El Tribunal Administrativo Regional del Lacio ha desestimado el recurso de Vittorio Sgarbi y Codacons contra el cierre de los museos: en efecto, el historiador del arte había solicitado la reapertura de los recintos culturales basándose en los supuestos que hemos resumido en un artículo dedicado al asunto. “No concurren los requisitos para estimar la solicitud cautelar”, reza el auto, “pues no parece manifiestamente irrazonable, dentro del alcance y límites de la revisión permitida al juez administrativo, la decisión de la Autoridad de restringir, por un periodo de tiempo limitado, un interés ciertamente significativo para el bienestar individual y colectivo, como es el disfrute de los museos y otros espacios culturales, debido a la especial gravedad de la actual situación de emergencia sanitaria”.
El Tribunal Administrativo Regional, en esencia, considera prevalente “la necesidad que subyace a la adopción de las medidas impugnadas de proteger el derecho a la salud, tras el recrudecimiento del contagio epidemiológico, mediante una reducción significativa de las actividades presenciales”. Además, el juez de lo contencioso-administrativo observó que “la eventual valoración de la posibilidad de permitir de nuevo la utilización de los museos a la luz de la mejora de la situación sanitaria se deja a la discrecionalidad de la Administración, que está llamada a adoptar la opción relativa en el respeto de los principios de adecuación y proporcionalidad al riesgo efectivamente presente”.
En definitiva, el tribunal administrativo ha rebatido un argumento que, en estas páginas, se trató en la entrevista con el constitucionalista Enrico Grosso publicada el martes. Ahora queda la posibilidad de un recurso ante el Consejo de Estado, también porque, por el proyecto de dpcm que circula esta mañana, el gobierno parece decidido a prorrogar el cierre de los sitios culturales hasta el 15 de enero. Y el presidente de Codacons, Carlo Rienzi (que es también el abogado que representa a Sgarbi en el recurso), ya ha dejado entrever que habrá recurso ante el Consejo de Estado. “La discrecionalidad”, comenta el abogado, “debe ser razonable, limitada y proporcionada”. Frente a las 34 mega-librerías abiertas en Roma donde hay aglomeraciones, los 21 museos romanos donde sólo podían entrar unas pocas personas y con medidas estrictas se mantienen absurdamente cerrados".
Museos cerrados, el Tribunal Administrativo Regional del Lacio rechaza el recurso de Sgarbi: "prevalece la protección de la salud |
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