Ferrara, tres rutas en bicicleta y barco para descubrir las Delicias y la naturaleza

¿Le apasiona el arte, la naturaleza e incluso el cicloturismo? Visit Ferrara le lleva a descubrir la provincia de Ferrara con tres nuevos itiner arios en los que conviven el paisaje natural del Patrimonio Mundial de la UNESCO, la bicicleta y el río. Los itinerarios de los Anillos del Po son rutas en anillo que permiten, partiendo de Ferrara, admirar las artes del Renacimiento, conocer los espacios naturales y degustar las especialidades enogastronómicas del territorio, bajo el signo de la movilidad sostenible y el turismo fluvial, ya que se pueden recorrer en bicicleta y en barco. De hecho, se trata de excursiones planificadas entre Delizie y naturaleza: las Delizie Estenses, cotos de caza y fincas de recreo, siguen de hecho ligadas alagua: están rodeadas de tierras fértiles surgidas de la recuperación de tierras y cerca de muchas de estas Delizie hay ríos y canales que a menudo siguen siendo navegables. Gracias a una densa red de canales navegables, el agua conectaba la ciudad de Ferrara con las Delizie, suntuosos palacios suburbanos.

Construidos a instancias de los duques de Este, estos palacios, declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, están situados en las vías flu viales y eran centros de control político, económico y militar, pero también destacaban desde el punto de vista paisajístico y artístico, ya que estaban dotados de grandes jardines y salones decorados por los artistas de la época. Entre ellos, la Delizia di Benvignante en Argenta, diseñada por el arquitecto de la corte Pietro Benvenuto degli Ordini para Borso d’Este, es testimonio de la sobria y refinada elegancia de la arquitectura ferrarense del Renacimiento. Sin embargo, su interior no puede visitarse. La Delizia del Verginese en Portomaggiore, originalmente una casa de campo y posteriormente transformada en residencia ducal a principios del siglo XVI por Alfonso I d’Este y donada a la dama Laura Eustochia Dianti. El interior fue decorado a partir del siglo XVIII con estucos, flores Art Nouveau al temple, conchas, rosetones, volutas y gruesas cornisas; actualmente alberga la exposición permanente Mors Inmatura. La necrópolis de los Fadieni, que documenta el descubrimiento de una pequeña necrópolis romana a pocos pasos de la Delizia. Además de cinco estelas, aquí se exponen más de doscientos objetos encontrados en las tumbas, materiales de arcilla, objetos de bronce, arreos de caballo, una serie de monedas y una colección de cristalería intacta y finamente trabajada, muy rara en la zona de Ferrara. La Delizia más rica y suntuosa, tanto que fue definida en el siglo pasado como el Versalles de los Estensi, es la de Belriguardo en Voghiera: Construida a instancias de Niccolò d’Este en 1435, fue la primera de las famosas residencias de los Este que se construyó fuera de las murallas de Ferrara y se utilizó también como palacio de verano; toda la corte se trasladaba al palacio de Belriguardo durante unos seis meses al año y desde aquí se gobernaba oficialmente el ducado. Si antaño la Delizia se caracterizaba por decenas de salas con frescos y grandes jardines, ahora el único elemento superviviente a la devastación que sufrió el palacio durante cuatro siglos, desde que en 1598 la familia Este se viera obligada a abandonar el feudo ferrarés para devolvérselo al papa, retirándose a Módena y Reggio Emilia, feudos que en cambio habían obtenido del emperador, es la Sala della Vigna: una gran sala pintada al fresco con sarmientos, hojas de parra y racimos de uva en la parte superior, dando la ilusión de una gran pérgola, sostenida por hileras de cuatro cariátides, sobre un fondo de paisajes imaginarios. En cambio, los señores d’Este están representados en una de las paredes, en actitudes similares a las de los frescos del palacio Schifanoia de Ferrara. Artistas como Cosmè Tura y Ercole de’ Roberti, Pisanello, Battista Dossi, Girolamo da Carpi y Garofalo trabajaron allí, pero sólo se conservan descripciones de sus obras maestras, ya que casi todo se ha perdido. Un ala de la Delizia di Belriguardo alberga el Museo Cívico con piezas de la Necrópolis de Voghenza. También, el Castillo de Mesola, a medio camino entre una fortaleza y una Delizia, con sus cuatro torres almenadas, sus poderosos muros y sus grandes ventanales. Construida a instancias del duque Alfonso II, último descendiente de la dinastía Este, la Delizia estuvo en su día protegida por nueve millas de murallas y rodeada de un bosque para la caza. Otras delicias de la zona de Ferrara son la Villa della Mensa, del siglo XV, en Sabbioncello San Vittore, construida a instancias de Bartolomeo della Rovere y frecuentada por personajes ilustres; la Delizia della Diamantina, en Vigarano Pieve, una espléndida finca creada tras la recuperación del Polesine di Casaglia por Borso d’Este: se llamó Diamantina por uno de los emblemas de la Casa de Este, el diamante; la Delizia di Fossadalbero, que según la tradición fue el lugar de encuentro de Ugo, hijo del marqués Niccolò III, y Parisina, la joven esposa del marqués, cuyo amor acabó trágicamente. El palacio fue transformado en Delizia por Borso d’Este poco antes de su muerte; la Delizia di Zenzalino en Copparo, villa citada como una de las joyas de la corona del duque Borso d’Este, fue ampliada y decorada por Bartolomeo Pendaglia, uno de los hombres más ricos de hombres más ricos de Ferrara; y el Palazzo Pio en Tresigallo, construido en los primeros treinta años del siglo XVI por el noble Alessandro Feruffino, caballero, capitán de la milicia del duque Alfonso I d’Este. Estas últimas Delizie sólo son visibles desde el exterior.

Las Delizie mencionadas forman parte, por tanto, de los itinerarios de los Anelli del Po (Anillos del Po): elAnello del Grande Fiume (Anillo del Gran Río ) parte de Ferrara y llega a Bondeno, tras las huellas del Po, por el carril bici del canal de Burana: un recorrido en bicicleta que le permitirá visitar la fortaleza Rocca di Stellata, con su peculiar planta en forma de estrella, y el Museo Cívico Arqueológico. El Anillo del Renacimiento, en cambio, le llevará a descubrir la edad de oro de Ferrara, deteniéndose en la Delizia del Belriguardo y la Delizia del Verginese. La ruta se desarrolla con intermodalidad bicicleta-barco y atraviesa la rica campiña ferrarense; tras visitar las Delizie, desde la Chiusa di Sabbioncello, se regresa a Ferrara en barco por el Po di Volano. Por último, el Anello delle Delizie (Anillo de las Delicias) se centrará en las extraordinarias residencias de la familia Este: recorrerá la campiña de Ferrara y pedaleará hasta Villa Mensa, continuando hasta la Delizia di Copparo y la iglesia parroquial románica de San Venanzio. En la estación de atraque de Ro Ferrarese, navegaremos de vuelta a Ferrara por el Po Grande.

Todos los itinerarios incluyen salida y regreso a Ferrara, donde dentro de las murallas se encuentra el famoso Palacio Schifanoia, erigido en 1385 a instancias de Alberto V d’Este, pero fue Borso d’Este, marqués y más tarde duque de Ferrara, quien lo transformó en su aspecto actual para “esquivar el aburrimiento”. Símbolo de la Ferrara de los Este, aquí se encuentra el Salone dei Mesi (Salón de los Meses), con uno de los ciclos de frescos más importantes del siglo XV en Italia. Es una de las expresiones arquitectónicas que se conservan de las residencias destinadas a la representación, conocidas como las Delizie Estensi.

"Las residencias de los duques de Este en el delta del Po ilustran excepcionalmente el reflejo de la cultura renacentista en el paisaje natural": esta es la motivación con la quela UNESCO reconoció el sistema de las residencias Este y el paisaje que las rodea como un eje de conexión fundamental entre la ciudad renacentista de Ferrara y su delta del Po. Las Delizie y la red de canales navegables reflejan la grandeza de la casa, y los itinerarios propuestos permiten descubrirla.

Ferrara, tres rutas en bicicleta y barco para descubrir las Delicias y la naturaleza

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