La serie de televisión I Medici va ya por su tercera temporada: En el nombre de la familia (este es el subtítulo de los ocho episodios que se emitirán por primera vez en diciembre de 2019) narra, obviamente desde una perspectiva muy ficcionalizada y con diversos hechos y personajes inventados, los acontecimientos que rodearon a Lorenzo el Magn ífico desde 1478, inmediatamente después de la conspiración de los Pazzi(aquí se explica en profundidad cómo fueron realmente los hechos) y 1492, año de su muerte. Los ocho episodios narran la rivalidad del Magnífico (interpretado por el actor inglés Daniel Sherman) con Girolamo Riario (Jack Roth), sus complots para conseguir un papa de su bando al trono papal (que más tarde será Inocencio VIII, interpretado por Neri Marcorè) y las maniobras para encubrir los robos del banco de los Médicis. La serie narra también el amor entre Lorenzo y Clarice Orsini (Synnøve Karlsen), las hazañas artísticas de Sandro Botticelli (Sebastian de Souza), la amistad del Magnífico con los intelectuales de la época, entre ellos, además de Botticelli, Poliziano (Jack Bannon) y Leonardo da Vinci, sus misiones al extranjero para tejer su red de alianzas.
Gran parte del drama se rodó en las localizaciones de la primera y la segunda serie: para quince de estos escenarios, les remitimos al artículo que escribimos el año pasado. Aquí, en previsión del final de temporada, te desvelamos otros diez lugares donde se rodaron algunas de las escenas más importantes de la serie.
1. Ficción: el patio del Palacio de los Médicis (Florencia). 2. Realidad: el patio del Palacio Piccolomini (Pienza)
Todas las escenas ambientadas en lo que en la serie es el patio del Palacio de los Médicis se rodaron en el espléndido Palacio Piccolomini de Pienza, que da a la plaza principal de la localidad toscana (lo mismo ocurre con los exteriores: la plaza Pío II se ve en prácticamente todos los episodios de la serie). El Palacio Piccolimini es uno de los primeros ejemplos de arquitectura renacentista y fue construido a partir de 1459 según un diseño de Bernardo Rossellino y por encargo del Papa Pío II, nacido Enea Silvio Piccolomini, natural del pequeño pueblo de Corsignano, que más tarde pasaría a llamarse “Pienza” en su honor.
Ficción: el patio del Palacio de los Médicis (Florencia) |
Realidad: el patio del Palacio Piccolomini (Pienza). Foto Créditos Francesco Bini |
2. Ficción: iglesia y convento de San Marco (Florencia). Realidad: iglesia de San Pietro alla Carità (Tívoli)
El convento de San Marcos es una de las localizaciones protagonistas de la tercera temporada, ya que en él tienen lugar todas las escenas en las que aparece Girolamo Savonarola, uno de los protagonistas de la última temporada de la ficción. De hecho, todas las escenas en las que interviene San Marcos (excepto el jardín, como veremos enseguida) se rodaron en la iglesia de San Pietro alla Carità de Tívoli: vemos la fachada y el campanario cuando Savonarola predica a la multitud de florentinos, y también vemos el interior en algunas escenas. La iglesia es una de las más antiguas de Tívoli, y su aspecto actual se debe a las reformas del siglo XII y a la restauración de 1951 tras los bombardeos sufridos durante la II Guerra Mundial. En el interior hay un hermoso suelo cosmatesco.
Ficción: Iglesia y Convento de San Marcos (Florencia) |
Ficción: Iglesia y convento de San Marcos (Florencia) |
Realidad: Iglesia de San Pietro alla Carità (Tivoli). Foto Crédito |
3. Ficción: El jardín de San Marcos (Florencia). Realidad: claustro de San Giovanni Battista dei Genovesi (Roma).
El jardín de San Marcos, el lugar que el Magnífico puso a disposición de los artistas (un jovencísimo Miguel Ángel también se formó allí), también aparece con frecuencia en la serie, ya que es el escenario de los encuentros entre el señor de facto de Florencia y Savonarola, quien en un principio no se opone al Magnífico (de hecho, es él quien desea que se convierta en prior del convento). Todas las escenas del jardín se rodaron en el claustro de la iglesia de San Giovanni Battista dei Genovesi de Roma, una iglesia del Trastévere que ha sufrido numerosas reformas a lo largo de los siglos: la fachada es del siglo XVIII, pero en el claustro se conserva un pozo del siglo XIV (que también se ve a menudo en la ficción).
Ficción: El jardín de San Marcos (Florencia) |
Realidad: Claustro de San Giovanni Battista dei Genovesi (Roma). Foto Crédito |
4. Ficción: la residencia de los Medici en Pistoia. Realidad: el Casino Farnese (Caprarola).
Para escapar de una epidemia de viruela que se extiende por Florencia, Lorenzo envía a su esposa Clarice y al resto de la familia, los hijos Piero y Giovanni y el sobrino Giulio, junto con su tío, el cardenal Carlo de’ Medici, a una villa ficticia en Pistoia: en aquella época, los Medici no tenían residencia en Pistoia (tenían una cerca, en Poggio a Caiano). En cualquier caso, las escenas de la residencia están ambientadas en el Casino Farnese de Caprarola, que además de ser uno de los anacronismos más flagrantes es también una de las localizaciones más curiosas de la serie. El Casino di Caccia fue construido en la segunda mitad del siglo XVI por el cardenal Alessandro Farnese (aunque la obra fue terminada más tarde, por el cardenal Odoardo), como pabellón de caza y recreo a pocos pasos del grandioso Palazzo Farnese (tanto es así que el Casino forma hoy parte del recorrido del Palazzo). Su peculiaridad radica en que tiene dos fachadas completamente distintas: así, en la ficción, la fachada que da al Palacio se utiliza para las escenas ambientadas en los jardines vaticanos, mientras que la fachada opuesta es la ficticia residencia de Pistoia de los Médicis.
Ficción: la residencia de los Médicis en Pistoia |
Realidad: el Casino Farnese (Caprarola). Foto Crédito Ventanas al Arte |
5. Ficción: el Desembarco de Nápoles. Realidad: el Castillo de Santa Severa (Santa Marinella)
En la serie, Lorenzo el Magnífico va en misión a Nápoles para negociar con el rey Fernando I de Nápoles (Ferrante de Aragón) en el contexto de la guerra antimedicea que estalló en 1478 tras la Conspiración de los Pazzi, y que enfrentó por un lado a Florencia, junto a Milán y Venecia, y por otro a los ejércitos papales aliados de Nápoles, Siena, Lucca y Urbino. En la ficción, sin embargo, Florencia lucha sola contra la alianza entre la Iglesia y Nápoles: en la serie, Fernando I cede ante Lorenzo al verse obligado a retirar sus ejércitos de Florencia para frustrar un ataque turco contra el reino de Nápoles. En realidad, el rey aragonés accedió a las peticiones de Lorenzo, por un lado, porque la guerra corría el riesgo de hacer demasiado intrusiva la presencia de Girolamo Riario en el centro de Italia y, por otro, para evitar tensar aún más las relaciones con Milán. En la serie, el desembarco en Nápoles se rodó en realidad en el Lacio, en Santa Marinella: al fondo se ve el imponente castillo de Santa Severa, una fortaleza del siglo XIV construida a orillas del mar Tirreno.
Ficción: El desembarco en Nápoles |
Realidad: el Castillo de Santa Severa (Santa Marinella). Foto Crédito |
6. Ficción: El castillo de Fernando I (Nápoles). Realidad: Castillo Orsini-Odescalchi (Bracciano)
Todas las escenas ambientadas en el castillo de Fernando I de Nápoles (las audiencias, las conversaciones en el exterior entre el Magnífico y la nuera de Fernando, Ippolita Maria Sforza, la cena) se rodaron en realidad en el castillo Orsini-Odescalchi de Bracciano, construido en el siglo XV y todavía propiedad de la familia Odescalchi, que lo mantiene abierto al público y lo ha convertido también en sede de eventos privados y conferencias.
Ficción: el castillo de Fernando I (Nápoles) |
Ficción: el castillo de Fernando I (Nápoles) |
Realidad: Castillo Orsini-Odescalchi (Bracciano) |
7. Ficción: Ferrara. Realidad: Castillo Brunelleschi (Oliveto di Castelfiorentino)
En la serie, asistimos a una improbable conquista de Ferrara por Girolamo Riario, ambientada en una aún más improbable Ferrara... en las colinas. La conquista de la ciudad, en la ficción, tiene como objetivo debilitar Florencia. En realidad, los acontecimientos que rodearon la presencia de Riario en Ferrara afectaron a Florencia de forma muy marginal: el señor de Imola y Forlì, de hecho, fue en misión a Venecia para sugerir a la República que hiciera la guerra a la familia Este (el objetivo de Riario era, de hecho, expandir su dominio en Imola en detrimento de la familia Este). El casus belli se identificó en la disputa por la posesión de las salinas de Comacchio. La suerte de la guerra la ganaron los venecianos, y en 1484, dos años después del inicio de las hostilidades, se firmó el Tratado de Bagnolo, que sancionaba la paz entre las dos potencias, estipulando, no obstante, que el ducado de Ferrara mantendría su independencia sin pasar ni a Venecia ni a los Estados Pontificios. En la ficción, el ataque de los hombres de Riario a Ferrara se rodó en el Castello Brunelleschi de Castelfiorentino, antaño residencia de la noble familia Pucci de Florencia .
Ficción: Ferrara |
Realidad: Castillo de Brunelleschi (Oliveto di Castelfiorentino) |
8. Ficción: Casa de la Paz en Bagnolo. Realidad: Palacio Farnesio (Caprarola)
El tratado de Bagnolo que puso fin a la guerra de la sal entre Ferrara y Venecia se firmó en agosto de 1484 en Bagnolo Mella (hoy en la provincia de Brescia). Sin embargo, en la realidad, el episodio tuvo un ambiente totalmente distinto al relatado en la ficción (donde, además, no se produjo como conclusión de la guerra entre Venecia y Ferrara, sino de la guerra antimedicea). Fueron los representantes de las potencias implicadas quienes se reunieron en Bagnolo y no los jefes de Estado directamente, y sobre todo la paz no tuvo lugar en un suntuoso palacio, sino en una taberna muy común, la Osteria “delle Chiaviche”. En la serie, en cambio, el Tratado de Bagnolo se firma en el maravilloso Palazzo Farnese de Caprarola, construido en la segunda mitad del siglo XVI por el cardenal Alessandro Farnese (por tanto, casi cien años después de los hechos narrados por I Medici).
Ficción: Casa de la Paz de Bagnolo |
Realidad: Palacio Farnesio (Caprarola). Foto Crédito Ventanas al Arte |
9. Ficción: El lugar de encuentro entre Clarice Orsini y Caterina Sforza. Realidad: Villa Giulia (Roma)
El lugar del primer encuentro entre Clarice Orsini, esposa del Magnífico, y Caterina Sforza, esposa de Girolamo Riario, tiene lugar en lo que parece ser el palacio de un ficticio “Cardenal Bianco”, participante en el cónclave que elegiría al Papa Giovanni Battista Cybo, que subió al trono de Pedro con el nombre de Inocencio VIII. La escena de la reunión está rodada en el patio del hemiciclo de Villa Giulia en Roma (hoy sede del Museo Nacional Etrusco). Otro anacronismo, ya que la villa fue construida, al igual que el Palacio Farnesio, en la segunda mitad del siglo XVI.
Ficción: lugar del encuentro entre Clarice Orsini y Caterina Sforza. |
Realidad: Villa Giulia (Roma). Foto Créditos Camilla Boban |
10. Ficción: La llegada a Sarzana. Realidad: Castillo Orsini-Odescalchi (Bracciano)
En el sexto episodio de la serie, el consejero de Lorenzo el Magnífico (un ficticio Bruno Bernardi interpretado por Johnny Harris) viaja a su ciudad natal, Sarzana, para pedir al gonfaloniere (su hermano Guido, otro personaje inventado) que pague una deuda de cien mil florines al banco de los Médicis, pues de lo contrario el Magnífico habría desatado una guerra contra la ciudad ligur. Este es uno de los puntos de inflexión de la serie, aunque en realidad las cosas no resultaron así: en la serie, Sarzana no se ve afectada por ningún acontecimiento bélico, pero en realidad entre 1484 y 1487 fue escenario de una agria disputa (que desembocó en el asedio de la ciudad) entre Florencia y Génova surgida en el contexto de cuestiones territoriales (la ciudad estaba bajo el control de Génova, y el Tratado de Bagnolo establecía que debía volver a Florencia, pero los genoveses, por el contrario, la cedieron al Banco di San Giorgio, que no quería dejársela a los florentinos). Los florentinos ocuparon así Sarzana: durante la guerra fue destruida la Fortaleza de Firmafede, que fue reconstruida por el propio Magnifico: aún existente, hoy es la sede del MUdeF (Museo della Fortezza) y acoge eventos y conciertos. Lo que en la ficción se supone que es la Fortaleza Sarzana, en realidad sigue siendo el Castillo Orsini-Odescalchi de Bracciano, filmado desde un ángulo diferente.
Ficción: La llegada a Sarzana(Florencia) |
Realidad: Castillo Orsini-Odescalchi (Bracciano). Foto Crédito |
11. Bonificación: el cuadro ficticio "Argo y yo
En la escena de despedida entre Lorenzo el Magnífico e Ippolita Maria Sforza (que, contrariamente a cómo es retratada en la ficción, tenía fama de ser una mujer extremadamente fiel a su marido Alfonso d’Aragona), la noble regala a Lorenzo un cuadro que representa el mito de Io y Argo, que alude a la condición de Ippolita como mujer muy vigilada en la corte de Nápoles. La obra que se ve en la ficción es en realidad un pastiche del siglo XVII en el que Io es “interpretada” por una Ariadna anónima del siglo XVII en un cuadro, Baco y Ariadna, subastado por Wannenes en 2015, mientras que Argo no es en realidad otro que el San Juan Bautista protagonista de un cuadro de hacia 1640 de Pierfrancesco Mola en la National Gallery de Londres (que, por otra parte, aparece en el cuadro de la serie de televisión... con el brazo cortado).
El cuadro ficticio |
Pintor del siglo XVII, Baco y Ariadna (segunda mitad del siglo XVII; óleo sobre lienzo, 74 x 90 cm; Colección particular) |
Pier Francesco Mola, Predicación de San Juan Bautista en el desierto (c. 1640; óleo sobre lienzo, 54 x 70 cm; Londres, National Gallery) |
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