¿Cuándo nació realmente el gran Rafael Sanzio y cuándo desapareció?

Hoy muchos celebran el cumpleaños (o el aniversario de la muerte) de uno de los más grandes pintores de la historia del arte, Rafael Sanzio (Urbino, 1483 - Roma, 1520): la mayoría sitúa la fecha de su nacimiento en el 6 de abril de 1483. Además, según muchos, el 6 de abril fue también el día en que desapareció el artista, en el año 1520. Merece la pena profundizar un poco más en esta cuestión, en el sentido de que se ha discutido mucho sobre las dos fechas: un argumento que a primera vista puede parecer insignificante, es en cambio de gran interés porque nos hace darnos cuenta de lo difícil que es el estudio de las fuentes y de la poca certeza que tenemos en muchos casos cuando estudiamos la historia del arte.

En cuanto a la fecha de nacimiento, existen básicamente dos fuentes: Giorgio Vasari (Arezzo, 1511 - Florencia, 1574) y Pietro Bembo (Venecia, 1470 - Roma, 1547). En sus célebres Vidas, Giorgio Vasari escribe que: “Rafael nació, pues, en Urbino, ciudad muy conocida en Italia, en el año 1483, el Viernes Santo a las tres de la noche”. El Viernes Santo de 1483 cayó el 28 de marzo. El erudito Pietro Bembo fue quien compuso elepitafio para el pintor, escribiendo en latín: “Quo die natus est, eo esse desiit VIII Id. Aprilis MDXX”, es decir, “Falleció el mismo día en que nació, el octavo día antes de los idus de abril de 1520 (es decir, el 6 de abril de 1520)”, y la fecha de su fallecimiento se fija en el 6 de abril de 1520. Lo que no podemos saber, sin embargo, es qué quiso decir Bembo con “quo die” (“el mismo día”), es decir, si “6 de abril” o “viernes”. Sin embargo, como el 6 de abril de 1520 cayó en martes, la mayoría ha interpretado la frase de Bembo como una referencia al número, el 6 de abril, y no al día de la semana: de ahí la tendencia a trasladar la fecha de nacimiento de Rafael al 6 de abril de 1483. Por cierto: precisemos que no todo el mundo está de acuerdo en atribuir el epitafio a Pietro Bembo. Desde 1911, en efecto, circula el nombre de Antonio Tebaldeo (Ferrara, 1462 - Roma, 1537), propuesto por Domenico Gnoli (en un artículo del Giornale d’Italia) en lugar del de Bembo, mencionado por primera vez en las Vidas de Giorgio Vasari: la situación se complica así aún más. Hay que decir, sin embargo, que todavía son muchos los que se inclinan por atribuir el epitafio a Bembo.

Rafael Sanzio, Autorretrato (c. 1504-1506; óleo sobre tabla, 47,5 x 33 cm; Florencia, Galería de los Uffizi)

¿Qué sabemos, en cambio, sobre la fecha de su desaparición? Diversas fuentes, entre ellas una carta del conde Pandolfo Pico della Mirandola enviada a Isabel de Este el 7 de abril, fijan la fecha de la muerte del artista en el Viernes Santo de 1520 (así escribía el noble: “ala Excellentia vostra la quale per hora non sarà advisata d’altra cosa che de la morte di Raphaello d’urbino, quale morite la notte passata, che era quella del venerdì santo, lasciando questa corte in grandissima et universal mestitia per la perdita de la speranza di grandissime cose che si expettavano da Lui”), que ese año cayó el 6 de abril. La fuente más discutida (porque también proporciona la hora) es, sin embargo, otra carta, del conocido coleccionista de arte Marcantonio Michiel (que, por otra parte, era sólo un año más joven que el artista), en la que se escribe que “en la noche del Viernes Santo, llegando el Sabbat, a las 3 murió el gentilísimo y excelente pintor Rafael de Urbino”. Así pues, es probable que Rafael muriera realmente el viernes por la noche, porque suponiendo que Michiel razone el cálculo de las horas sobre la base de la puesta del sol, como era costumbre en la época, la tercera hora de la noche correspondería a las actuales 21 o 22 de la noche.

Sin embargo, la mitificación del artista desempeñó un papel importante en el discurso sobre las fechas. Incluso en vida, dado el gran refinamiento y la gracia celeste de su pintura, se le consideraba un pintor divino, dotado de capacidades y habilidades casi sobrenaturales. Por tanto, era natural que su muerte (y nacimiento) el Viernes Santo formara parte fundamental del mito rafaelesco: era una forma de relacionar la figura del pintor con la de Cristo. Este elemento, esta comparación, basta para mostrar hasta dónde había llegado el mito de Rafael.

Bibliografía de referencia

• Giorgio Vasari, Le vite dei più eccellenti pittori, scultori e architetti, Florencia, Giunti, 1568
• Pietro Odescalchi, Istoria del ritrovamento delle spoglie mortali di Raffaello Sanzio da Urbino, Roma, Boulzaler, 1833
• Alessandro Zazzaretta, Sulla data della nascita di Raffaello en L’arte. Rivista bimestrale di storia dell’arte medioevale e moderna, Volumen 23, 1920
• Giuseppe Rossi, La rinascenza dell’arte del Piceno : Raffaello e Bramante, Macerata, Bisson & Leopardi, 1925
• Domenico Gnoli, La Roma di Leone X: quadri e studi originali, Roma, Hoepli, 1938
• Claudio Strinati, Raffaello, Florencia, Giunti, 1995
• Elena Capretti, Raffaello, Florencia, Giunti, 1996
• Stefano Pagliaroli, L’epitaffio di Pietro Bembo per Raffaello en Pietro Bembo e l’invenzione del Rinascimento, catálogo de la exposición (Padua, 2 de febrero - 19 de mayo de 2013), Padua, Marsilio, 2013

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