Garage Stills, expuesta (comisariada por Marina Guida) hasta el 13 de enero de 2022 en el PAN de Nápoles, es una operación fotográfica que ha surgido de las manos de Jacquie Maria Wessels (Vlaardingen, 1959). La artista, holandesa de nacimiento, ha descubierto detalles, recuerdos, rincones polvorientos, devolviendo espacio y presencia a garajes de todo el mundo a través de cientos de inspecciones, viajes, desplazamientos.
Se trata, al menos, de una operación doble, porque también ha devuelto a su vida una dimensión errante, deliberadamente “perdida” como los lugares que visita, y en continua exploración. De hecho, su investigación no partió de una idea precisa, sino que se fue aclarando a medida que avanzaba. Visitando por casualidad un taller para reparar su coche, empezó a captar su historia, sus cambios. Una mezcolanza de historias, objetos que acabaron allí, recuerdos y fragmentos de una vida que ya no está, que reunió en treinta “naturalezas muertas” y suspendió.
Exploración visual y sutilmente crítica de una realidad que se desvanece, serie fotográfica que roza el reportaje, Garage Stills contrae en unos pocos planos los lugares del trabajo humano que la nueva globalización está barriendo para siempre. Marc Augé nos dice, parafraseando la condición doméstica con la del trabajo: “Hermes ha sustituido a Estia”. En efecto, del mismo modo que antes el centro del hogar era el hogar, hoy lo es el televisor o el ordenador, los lugares de trabajo que situaban al hombre o a la mujer en un lugar crucial ahora están desfasados, descentralizados. Y desconcertados, por este irreversible changement de pas, están también quienes habitan estos lugares, en la dimensión privada o profesional. Por ello, la invasión de campo realizada por Jacquie es fundamental para comprender artísticamente la dirección que está tomando la vida humana, fuera o dentro del entorno doméstico o laboral. Una proxémica del espacio de vida irremediablemente comprometido.
Qué nuevo equilibrio se encontrará? Es la pregunta tácita de su trabajo en imágenes, y es también el reto que nos espera, superar la sensación de desconcierto, de soledad que nos asola. La propuesta de Jacquie Maria Wessels tiene así el aroma de una caricia y, sin embargo, también el calor de una bofetada. Las fotos, sí, devuelven profundidad a las cosas del pasado, pero al mismo tiempo parecen señalar un camino distinto al del complaciente revival del pasado en una nostálgica apatía sentimental. Garage Stills, más bien, abre una mirada que desestabiliza delicadamente, incluso poniendo en escena, plano tras plano, un cambio en la mirada.
Jacquie Maria Wessels nació en los Países Bajos y vive y trabaja allí. Pero fue en Bélgica, en Bruselas, donde comenzó su carrera fotográfica en 1981. Cuando se trasladó a Amsterdam para estudiar en la Academia Gerrit Rietveld , en el departamento de fotografía y dibujo, realizó un programa de intercambio que fue fundamental para el desarrollo de su trabajo en la Academia de Arte Quicksilver Place de Londres, centrándose en la pintura/dibujo, porque, al final, sería la fotografía el medio más significativo para su expresión artística.
Cientos de exposiciones individuales y colectivas, desde La Haya (Galerie Baudelaire) en 2019, a Braga en Portugal, en 2017, desde Surinam a Nueva York (New York Photo Festival, 2011) y antes, entre otros, en Grecia y en Officine Fotografiche en Roma. Entre los reconocimientos y premios más destacados está que en 2011, dos fotografías fueron finalistas en losInternational Book Awards. Una en la categoría Fotografía: Personas, la otra en la categoría Fotografía: General.
En 2019 participó en la feria fotográfica MIA de Milán, pero Garage Stills, la exposición actual en el Palazzo delle Arti de Nápoles, es su primera muestra individual en Italia. Nápoles no viene al azar, no es solo el resultado de una oportunidad expositiva, sino la elección de investigar una ciudad que representa a toda Europa y que alberga tanto los recuerdos de un pasado como la dimensión más futurista de la metrópolis contemporánea.
Sus preferencias en el proceso de trabajo pasan por la fotografía analógica, porque tiene un rendimiento de impresión excepcional, y también porque retrasa el resultado, permitiéndole permanecer concentrada en la imagen que había fijado en su mente sin distracciones ni prisas. La investigación meticulosa y la indagación lenta son las señas de identidad de su estudio y su estilo; sus temas son, de hecho, un pretexto para investigar las condiciones sociales y el entorno que les rodea. Esta pasión por lo social también la llevó a cursar estudios de Psicología Social (2004-2007), graduándose en la Vrije Universiteit (VU) de Ámsterdam.
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