"Vendamos la Judith de Klimt para financiar el estadio". Venecia, propuesta de choque del concejal

Parece una broma tardía del día de los inocentes, pero en realidad el concejal de Movilidad, Infraestructuras y Vías Públicas del Ayuntamiento de Venecia, Renato Boraso, va muy en serio. En una entrevista al diario La Nuova Venezia , lanza lo que se ha calificado de “propuesta de choque”: Vender Judith , deGustav Klimt, uno de los tres únicos cuadros del gran pintor austriaco conservados en Italia, para financiar la construcción del nuevo estadio. El proyecto a financiar se llama “Bosco dello Sport” y prevé la construcción de un nuevo estadio, un parque en el que estará inmerso y un pabellón deportivo, en el suburbio de Tessera, en tierra firme: será necesaria una inversión de 308 millones de euros. Una parte, 93,5 millones, debería proceder de fondos europeos: en caso de que este dinero no llegue, surge la idea de vender la Giuditta. La Comisión Europea, que debe aportar los fondos del PNRR con los que se financiarían las obras, no está de acuerdo, de hecho, con que se trate de obras de reurbanización urbana y social, tal y como se presentan (es la misma diatriba en curso para la renovación del estadio Artemio Franchi de Florencia).

“Si no se encuentra una solución, hay una salida extrema para recuperar recursos: podemos vender la Judith II de Klimt”, dijo Boraso. “En 2015, cuando la idea llegó a nuestro alcalde Luigi Brugnaro, la obra estaba valorada entre 70 y 90 millones de euros, ahora seguramente valdrá más. Justo la suma que se necesita”.

La obra maestra de Klimt lleva en Venecia desde 1910, cuando la ciudad la compró después de que el artista la expusiera en la Bienal de Venecia de ese año. Sólo hay otros dos cuadros de Klimt en Italia: Las tres edades de la mujer, en la Galleria Nazionale d’Arte Moderna e Contemporanea de Roma, y Retrato de una dama , en la Galleria Ricci Oddi de Piacenza. No es la primera vez que la actual junta veneciana propone vender la obra expuesta en la Galería Ca’ Pesaro: la malsana idea ya relampagueó en 2015, cuando el alcalde Luigi Brugnaro propuso sacar el cuadro al mercado para sanear el presupuesto de las arcas municipales.

La oposición, naturalmente, se cuadró. "¿Vender el Klimt? Una propuesta muy grave e inadmisible’, comenta Monica Sambo, concejala y secretaria municipal del PD. ’Lo era hace 8 años y lo es aún más ahora que con el dinero recaudado nos gustaría construir un estadio y un área, intervenciones que se llevan a cabo en toda Italia con recursos privados o, como en el caso de Bolonia, con recursos mixtos públicos y privados. La mera idea de vender un cuadro que forma parte del patrimonio artístico de la ciudad, y de Ca’ Pesaro en particular, estremece. Europa se ha dado cuenta de que algo falla en este proyecto y de que también existe un “conflicto de intereses”.

En Venecia, de hecho, el proyecto es muy contestado debido a la posición del propio alcalde, que es también propietario del equipo de baloncesto local, Reyer Venezia, que podría beneficiarse del posible nuevo pabellón deportivo. Además, para una parte de la sociedad civil, el “Bosco dello Sport” no sería más que una especie de vaciado de hormigón que no responde a las necesidades de regeneración que se presentan: “La zona de intervención (Venecia-Tessera) no presenta ninguna de las características de degradación social y vulnerabilidad previstas por la normativa, ya que tiene unos índices de delincuencia muy bajos y una estructura territorial formada predominantemente por villas unifamiliares dentro de un paisaje agrícola virgen”, escribió Italia Nostra. Por el contrario, amplias zonas de la ciudad de Mestre, que tendrían pleno derecho a recibir estos fondos del PNRR, se ven abandonadas a su lento e inexorable declive".

"Vendamos la Judith de Klimt para financiar el estadio". Venecia, propuesta de choque del concejal

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