Uffizi confirma que Leonardo era ambidiestro


Leonardo da Vinci era ambidiestro. Así lo confirman los análisis y estudios diagnósticos realizados por el Opificio delle Pietre Dure de Florencia sobre su Paesaggio 8P.

La gran campaña de diagnóstico llevada a cabo por elOpificio delle Pietre Dure de Florencia sobre el Paisaje conocido como 8P (por su número de inventario) y considerado por muchos estudiosos como el primer dibujo conocido de Leonardo da Vinci (fechado el 5 de agosto de 1473), ha revelado que el gran genio era ambidiestro. Los análisis diagnósticos se han realizado con vistas al traslado de la obra a Vinci, a partir del 15 de abril, con motivo de la exposición En los orígenes del genio, organizada con motivo del 500 aniversario de su muerte. El estudio fue realizado por un equipo de especialistas, utilizando técnicas y maquinaria experimentales, bajo la supervisión de la historiadora del arte y funcionaria del Opificio, Cecilia Frosinini.

La ambidiestría se confirma comparando dos inscripciones de la obra, una en el anverso y otra en el reverso: la primera, de derecha a izquierda, reza “Dì di s[an]ta Maria della neve / addj 5 daghossto 1473”, la segunda, de izquierda a derecha, reza “Io, Morando d’Antoni, sono chontento”. Ambas están autógrafas y escritas con la misma tinta, con la que realizó la mayor parte del Paisaje. El estudio combinado de los materiales, los rasgos típicos de su caligrafía y la comparación con otros documentos han demostrado que el artista escribió la inscripción “espejo” del anverso presumiblemente con la mano izquierda, mientras que para la del reverso, con un verso ordinario, utilizó la derecha.



“Leonardo nació zurdo, pero fue reeducado en el uso de la mano derecha desde una edad temprana. La observación de sus escritos, incluido el del dibujo, muestra que su escritura diestra es culta, bien hecha; Leonardo sabe utilizar bien esta mano. En cuanto a la escritura en espejo, con verso de derecha a izquierda, es probable que el propio Leonardo, ya adulto, optara voluntariamente por adoptar este original estilo, que es, de hecho, en los primeros ejemplos, muy elaborado, incluso diría que artificial; luego, con el paso del tiempo y la continuidad del uso, se simplifica y se vuelve cursivo. Nuestra hipótesis es que la idea le vino de observar la letra al revés en las transparencias que utilizaba para los dibujos, después de darles la vuelta”, explicó Cecilia Frosinini.

Los análisis también revelaron dos bosquejos diferentes del paisaje en el anverso y un proceso similar en el reverso, donde hay dos paisajes, uno superpuesto al otro, completamente diferentes del dibujado en el anverso. Representan una escena fluvial, con un arroyo y dos orillas unidas por un puente en el centro, y una formación de rocas afiladas y dentadas a la izquierda. Leonardo había pintado esta escena con negro de humo; más tarde acentuó algunas de sus formas con tinta, añadiendo picos montañosos. El uso del negro de humo en la hoja 8P demuestra que Leonardo utilizó este material en una época anterior a la que los estudiosos han creído hasta ahora.
También son visibles en el reverso algunos dibujos a punta de plomo, una flor estilizada (una roseta) y algunos motivos geométricos bajo el paisaje fluvial de la parte inferior izquierda y más arriba.

Los estudios de diagnóstico se llevaron a cabo mediante numerosos exámenes no invasivos y tecnologías y prototipos científicos: rayos infrarrojos de un modelo muy avanzado, capaz de adquirir 32 bandas de color diferentes, ideado por el CNR-Ino (Instituto Nacional de Óptica); un innovador sistema de rayos X de fluorescencia; un detector portátil de materiales orgánicos; y las clásicas observaciones al microscopio y el uso de fotodiagnósticos de muy alta resolución.

Para crear el Paisaje 8P, Leonardo recurrió a diversas herramientas y materiales: un estilete de plomo que dejaba un trazo gris sobre el papel, una especie de lapis ante litteram, que era lo que Leonardo utilizaba para trazar la “base”, el borrador de todo el dibujo, y sobre este borrador trabajaba con tinta. En cambio, pintó la vegetación, el resto del terreno, las montañas y el agua completamente a mano alzada. El dibujo del anverso lo hizo en dos fases: primero utilizó el lápiz óptico, papel satinado y una primera tinta; después, una segunda tinta.

“Los elementos que han surgido durante esta campaña de investigación abren nuevas perspectivas sobre la interpretación del dibujo 8P de Leonardo y sobre cómo el artista ”construyó" el Paisaje, sobre su técnica e incluso sobre sus hábitos y habilidades de escritura, descubriendo que era ambidiestro: una verdadera revolución en el campo de los estudios sobre Leonardo“. En los últimos años, la colaboración entre las Galerías Uffizi y el Opificio delle Pietre Dure, un instituto de restauración e investigación tecnológica de obras de arte que no tiene parangón en el mundo, ha permitido llevar a cabo investigaciones que siempre han aportado nuevos resultados, a veces inesperados, sobre todo cuando se trata de obras famosas que ahora carecen aparentemente de misterio. Recuerdo el caso reciente de la Santa Catalina de Artemisia Gentileschi, bajo la cual se encontraron dos bocetos más. Ahora es el turno del dibujo de Leonardo, pero contamos con muchas otras sorpresas y descubrimientos importantes en los próximos años”, declaró el director de las Galerías de los Uffizi, Eike Schmidt.

En la foto: anverso del Paisaje 8P de Leonardo da Vinci

Fuente: comunicado de prensa

Uffizi confirma que Leonardo era ambidiestro
Uffizi confirma que Leonardo era ambidiestro


Advertencia: la traducción al español del artículo original en italiano se ha realizado mediante herramientas automáticas. Nos comprometemos a revisar todos los artículos, pero no garantizamos la ausencia total de imprecisiones en la traducción debidas al programa. Puede encontrar el original haciendo clic en el botón ITA. Si encuentra algún error, por favor contáctenos.