El director de las Galerías Uffizi, Eike Schmidt, lanza una provocadora propuesta contra la comida callejera, causante de la suciedad en las ciudades del arte.
La propuesta consistiría en introducir “un impuesto adicional para los establecimientos de comida callejera, es decir, aquellos que no ofrecen a sus clientes espacio y mesas, sino que les obligan a comer en la calle. La gente que come en la calle ocasiona costes a la comunidad porque luego hay que limpiar las calles del aceite de los bocadillos”. Un impuesto que serviría para cubrir los gastos de limpieza de las calles tras el consumo de comida callejera por parte de los turistas. Esto se aplica a Florencia, pero también a todas las demás ciudades de arte.
“El aceite de los bocadillos y el ketchup no son buenos para la pietra serena. Hay que limpiarla inmediatamente, de lo contrario se mete dentro y la mancha. Hay que limpiar todo el tiempo. Nosotros pensamos en la logia, el ayuntamiento piensa en la plaza y, de hecho, esta última está en un estado aún peor”, comentó el director. Añadió que los Uffizi y la logia exterior se limpian a expensas del museo dos veces al día para mantenerlos limpios y evitar que la suciedad los manche.
Schmidt: "Gravar a los establecimientos de comida callejera. Hay que limpiar las calles de aceite de bocadillos' |
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