La fachada de la Santa Croce de Florencia está siendo sometida a una minuciosa inspección periódica.
Utilizando un carro móvil y una plataforma aérea, necesaria para alcanzar una altura de 62 metros, los técnicos examinarán los elementos de piedra que componen la fachada: mármol blanco de Carrara y de la Montagnola Senese, mármol amarillo de Siena, mármol rojo de Monsummano y Garfagnana, y mármol verde de Monteferrato in Prato e Impruneta. Elementos de mármol elegidos por el propio Nicola Matas, el arquitecto que diseñó la fachada de Santa Croce y supervisó su construcción entre 1857 y 1863.
La construcción de la fachada fue una verdadera campaña de recaudación de fondos ante litteram: el Papa Pío IX participó en la inauguración de la obra el 22 de agosto de 1857 y pagó 3133 liras, el Rey Víctor Manuel II pagó 3190 liras, el Gran Duque Leopoldo y otros miembros reales de su familia pagaron nada menos que 44666 liras. La Ópera de Santa Cruz organizó una comisión de recaudación de fondos y una intensa actividad propagandística: llegaron contribuciones de particulares, comunidades y asociaciones italianas y extranjeras. Cabe destacar la importante contribución de Francis Joseph Sloane, que aportó 358.168 liras.
Las inspecciones que hoy se realizan en la fachada de la basílica son también una oportunidad para seguir investigando y profundizando en los aspectos históricos y científicos de las características de este complejo arquitectónico.
Santa Croce: inspección periódica de la fachada construida con fondos reales |
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