Los incendios que asolan Sicilia en las últimas horas no han perdonado a una de las iglesias más antiguas de Palermo, la de Santa Maria di Gesù. Las llamas no sólo afectaron al edificio eclesiástico, sino también al cementerio monumental adyacente y al convento de San Benedetto il Moro. La iglesia, situada en el pueblo del mismo nombre, a los pies del monte Grifone, tiene sus orígenes en el siglo XIII (pero fue terminada en el siglo XV), y fue entre los muros de su convento donde murió en 1589 San Benito el Moro, canonizado en 1807, cuyo santuario principal es el que ardió en llamas. Hijo de esclavos, probablemente de origen etíope, San Benito el Moro es muy venerado en África (es patrón de Nigeria, Togo, Benín y Angola), y la iglesia albergaba sus reliquias, gravemente dañadas por las llamas.
El fuego, que surgió de la vegetación del monte Grifone, semidestruyó la iglesia, comprometiendo el precioso artesonado de madera de la época renacentista y causando graves daños a las obras de arte que aquí se conservan. Las fotografías publicadas en la web muestran altares ennegrecidos y estatuas de madera destruidas. Afortunadamente, las treinta personas que se encontraban en el convento, todas ellas evacuadas, están a salvo. Una vez extinguidas las llamas, la consejera de protección civil Antonella Tirrito pudo comprobar, tras una inspección, que “el tejado ha desaparecido, todas las paredes están ennegrecidas, muchos cuadros han sido destruidos, así como la estatua del altar”.
Entre las obras devastadas por el fuego figuraba la preciosa Virgen con el Niño, de madera, de alrededor de 1470, que se encontraba en el altar de Santa María de Jesús, el más pintoresco del edificio. También quedó destruido el crucifijo del siglo XVII realizado por Fra Innocenzo da Petralia Sottana.
Palermo, los incendios destruyen la iglesia del siglo XV de Santa Maria di Gesù |
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