Olimpiadas de París 2024: la Casa Italia se abre al público por primera vez con una exposición y un recorrido panorámico

A partir del sábado 27 de julio, Casa Italia París 2024 en Le Pré Catelan, el lugar elegido por el CONI para acoger a los atletas de la Selección de Italia y a sus invitados durante los XXXIII Juegos Olímpicos de París, previstos hasta el 11 de agosto de 2024. Por primera vez en la historia de la Casa Italia, el público podrá entrar y sumergirse en un recorrido expositivo, escenográfico y emocional: una obra total de arte, arquitectura y diseño titulada Ensemble. Este emblemático edificio, una construcción de estilo Napoleón III inmersa en el Bois de Boulogne, el mayor parque de la ciudad y a dos pasos de los Campos Elíseos, está cargado de historia. La noche del 23 de junio de 1894, la cena organizada por el Barón Pierre de Coubertin para celebrar el nacimiento de los Juegos Olímpicos de la era moderna.

Para París 2024, la Casa Italia crea un vínculo simbólico y concreto con el “Padre” de los Juegos Olímpicos modernos y con Francia, el país “hermano” más cercano desde la época del Imperio Romano. Con su revuelta, Francia ha iniciado un proceso de toma de conciencia de los principios comunitarios y democráticos. Del lema Liberté, Egalité, Fraternité que caracteriza a la Revolución Francesa, la Casa Italia París 2024 se centra en la Fraternidad, el término más acorde con los valores fundacionales del espíritu olímpico y el más necesario en esta época desgarrada por nuevos conflictos y amenazas pandémicas, para imaginar una nueva utopía y una nueva paz.

Desarrollando, por tanto, el concepto Ensemble, Casa Italia París 2024 ha transformado Le Pré Catelan en un espacio extraordinario en el que se integran armoniosamente naturaleza, arte, arquitectura, diseño de mobiliario y diseño de iluminación. El edificio, caracterizado por sus numerosas ventanas y rodeado por un jardín, ha sido renovado con plantas típicas del paisaje italiano. Los interiores recuerdan la tradición italiana y a los maestros del siglo XX, famosos por su creatividad y hospitalidad.

La exposición incluye obras de 19 artistas italianos contemporáneos, entre ellos Vincenzo Agnetti, Marco Bernardi y Marinella Senatore, y creaciones de 32 diseñadores internacionales para 11 empresas de excelencia del diseño italiano, como Edra, Ethimo, Glas Italia y Moroso. Entre los diseñadores figuran nombres tan destacados como Mario Bellini, Patricia Urquiola y Ron Arad.

El diseño arquitectónico de la Casa Italia se basa en el vínculo entre lo nuevo y lo existente, entre artificio y naturaleza. La idea de “conjunto” se inspira en el entretejido de los Círculos Olímpicos, según la interpretación del sociólogo Tim Ingold: un tejido de líneas anudadas entre sí, donde los nudos representan el centro de las cosas. Este concepto se refleja en la disposición de Casa Italia, con habitaciones creadas dentro de la arquitectura del siglo XIX de Pré Catelan utilizando un tejido semitransparente que realza tanto los espacios interiores como los exteriores. El mobiliario, una selección de elementos icónicos del diseño italiano, tanto históricos como contemporáneos, establece un diálogo estético con el contexto y el entorno. La elección de formas, colores y materiales crea un entorno cohesivo y evocador, reflejo de la excelencia del diseño italiano y de la hospitalidad que le ha dado fama.

En la Casa Italia París 2024 se ha prestado gran atención a la sostenibilidad medioambiental. El uso predominante de tejidos naturales y reciclados reduce el peso del transporte de los materiales de equipamiento, reduciendo las emisiones de CO2 y haciendo que el proyecto sea sostenible con un bajo impacto en el ecosistema. El mobiliario también refleja este compromiso, con objetos de diseño italiano concebidos para durar y transmitirse a lo largo del tiempo, fabricados con procesos virtuosos que tienen en cuenta todo el ciclo de vida del producto.

Muchos elementos de diseño elegidos o diseñados para Casa Italia expresan la sensibilidad ecológica a través de un fuerte componente estético y material, incluidos muebles de madera, terracota, lava esmaltada, tejidos crudos, celulosa y plástico reciclado. La sala de prensa de Casa Italia es de impacto cero gracias a un protocolo firmado con el Ministerio de Medio Ambiente y Seguridad Energética, y al apoyo de Federlegno y sus empresas asociadas.

La sostenibilidad es un aspecto más del concepto “Ensemble”, ya que la lucha contra el cambio climático y las catástrofes medioambientales requiere una colaboración colectiva. Este compromiso refleja la necesidad de actuar juntos por un futuro sostenible, demostrando que el arte, el diseño y la sostenibilidad pueden coexistir y crear un impacto positivo en el medio ambiente y la sociedad.

El recorrido de la exposición

El itinerario expositivo de la Casa Italia París 2024, comisariada por Beatrice Bertini y Benedetta Acciari, comienza en el exterior con una copia de la inscripción “Italia” de la entrada del histórico Pabellón Italiano de la Bienal de Venecia, en homenaje a uno de los acontecimientos artísticos más importantes del mundo. Detrás de esta inscripción se encuentra el Pabellón Acciari, un volumen espejado de color corten, armoniosamente integrado en el contexto del bosque que lo rodea. Realizado con los módulos bioclimáticos de Pratic, este pabellón se configura como una sala de estar en tonos cálidos y naturales, con un sofá Standard de Francesco Binfaré y mesas de centro Cicladi de Jacopo Foggini en alabastro natural, ambos diseñados para Edra. Un sinuoso mostrador de madera y las lámparas de pie Capitain Flint de Micheal Anastassiades (Flos) en cálidos tonos tierra dan la bienvenida a los visitantes, subrayando que Casa Italia es ante todo un lugar de hospitalidad.

Siguiendo el recorrido de la exposición, los visitantes son recibidos por la obra “Sacral” del escultor Edoardo Tresoldi, inspirada en las formas del baptisterio renacentista. Esta obra actúa como una puerta simbólica y física, transportando a los visitantes a la dimensión Ensemble a través de un entretejido de mallas metálicas. Una monumental avenida arbolada, diseñada por el estudio Natura e Architettura y realzada por la iluminación de Massimo Pascucci, conduce al espacio situado frente a Le Pré Catelan, reconfigurado como una simbólica Piazza Italiana, espacio de encuentro y acogida.

A esta plaza dan los pabellones dedicados a la Media Factory y al bistró, con mobiliario de metal y teca diseñado por Patrick Norguet para la colección Swing de Ethimo y la alcoba Hut diseñada por Marco Lavit para la misma marca. La madera natural, material dominante en esta zona, contribuye a crear un ambiente relajado e informal. La fachada del edificio principal alberga una gran obra site-specific de Agostino Iacurci titulada “Ensemble”, una reinterpretación de la Tricolor en su típico estilo floral y abstracto, que fusiona imágenes naturales con una reinterpretación de la estética clásica.

En el interior del edificio principal, el sistema de “salas dentro de salas” muestra una disposición comisariada por el estudio de arquitectura IT’S, caracterizada por una estructura que se refuerza mutuamente. Aquí se encuentra el medallero olímpico, que crecerá durante la competición, incorporado y embellecido por la obra “Panorama Italia”, un tapiz de 30 metros cuadrados de Giovanni Bonotto. Este tapiz cubre todas las paredes, creando un ambiente envolvente que realza el conjunto a través de la variedad cultural, histórica, geológica, paisajística, gastronómica y lingüística de Italia. El diseño del tapiz se creó con ayuda de la Inteligencia Artificial, utilizando hilos obtenidos a partir de residuos plásticos reciclados.

La entrada al corazón de la Casa está marcada por la luminosa obra de Marinella Senatore, “Nos levantamos levantando a los demás”, que se hace eco de una famosa cita de Robert Ingersoll, “Nos levantamos levantando a los demás”. Esta obra habla del poder de ayudar a los demás y del impacto positivo que esto puede tener en nosotros mismos, haciendo hincapié en los valores de solidaridad y fraternidad.

La espaciosa entrada de la Galería está concebida como un entorno abstracto y elegante, cubierto con una tela semitransparente de Rubelli, cuyo color amarillo ilumina el espacio, realzando su valor físico y simbólico. El visitante es recibido por una serie de obras, la primera de las cuales es de Vincenzo Agnetti, protagonista absoluto de la segunda mitad del siglo XX. Con la icónica obra “Tra me e te l’infinito inesistente” (Entre tú y yo el infinito inexistente), una estructura rigurosa en la que el significado vago e inasible sólo puede percibirse a través de la complicidad de la mirada del observador. También en la Galería, la obra de Julie Polidoro, artista de origen francés y romana de adopción, titulada “Todos los grandes países iguales”, celebra el espíritu olímpico eliminando las jerarquías entre las naciones del mundo basadas en dimensiones territoriales en un mapa geográfico en el que las distintas naciones se convierten en una multitud de formas y colores. Otra conexión artística entre Italia y Francia se encuentra en la escultura “Amore e Psiche” de Fabio Viale, una reinterpretación contemporánea de “Cupido y Psique” de Canova, conservada en el Louvre, en la que Venus se vuelve negra mediante un tatuaje integral, en un claro homenaje a la diversidad. El vínculo entre los dos países y entre la sostenibilidad y el concepto de “Ensemble” se encuentra también en el cuadro “Todos colaboramos”, del colectivo franco-italiano Claire Fontaine, que llama la atención sobre las emergencias sociales, humanitarias y medioambientales, donde el concepto de estar juntos se entiende como la necesidad de colaborar en temas globales. El concepto global de la Casa Italia París 2024 se manifiesta claramente en la gran obra escultórica de Margherita Moscardini, que en “(Ou la mort)” extrapola la palabra más olvidada del famoso lema francés, convirtiéndola en la más importante y capaz de resumir también los conceptos de libertad e igualdad, repitiendo “Fraternité, Fraternité”, proporcionando un nuevo paradigma de estar juntos a pesar de ser diferentes.

En el centro del espacio de la Galería, una línea azul formada por los módulos del icónico sofá Camaleonda, diseñado por Mario Bellini y fabricado por B&B Italia, acompañado por la butaca Up de Gaetano Pesce, otro gran nombre del diseño recientemente fallecido, dialoga con las obras de arte y el gran volumen de la sala. En los espacios de la Galería, la idea de relación y vínculo se desarrolla en el doble plano de lo infinitamente pequeño y lo infinitamente grande en la obra de Alberto Di Fabio, “Vita Astrale”, que nos introduce en los fenómenos misteriosos y fascinantes de la naturaleza, explorando el mundo celular y las constelaciones, en una visión en la que todo es conexión y síntesis del universo. Entre las obras más impresionantes expuestas en Casa Italia figura el “Tappeto Volante” (Alfombra voladora) creado por el colectivo Stalker, junto con la comunidad kurda exiliada en Roma, un grupo de arquitectos activistas, un niño romaní y otro de Senegal, en el que 41472 cuerdas de cáñamo con terminales de cobre reproducen los mocárabes del techo de la Capilla Palatina de Palermo, símbolo de una milenaria cultura de la hospitalidad que une las culturas griega, latina, árabe y normanda. Bajo esta extraordinaria obra espacial se encuentran dos sofás Sherazade diseñados por Francesco Binfaré para Edra, que, con su sistema de cojines móviles de libre configuración, permiten sentarse o tumbarse para contemplar la obra con la mirada hacia arriba, contribuyendo a la experiencia de contemplar la obra en sí. Continuando por los espacios de la Galería, encontramos la escultura de bronce coloreado “Italiana” de Paolo delle Monache, que celebra expresamente Italia y sus maravillas, exaltando la singularidad de nuestro territorio fruto de la variedad de elementos que lo hacen inolvidable.

El itinerario artístico incluye una novedad exclusiva que la Casa Italia tiene el privilegio de acoger: el equipo y los accesorios especiales del Regimiento de los Corazzieri, unidad de élite del Cuerpo de Carabineros dependiente de la Presidencia de la República. La magnificencia del uniforme expuesto incluye una coraza, típica de la caballería pesada por la que los soldados se llamaban corazzieri, un casco y un sable.

En el centro de la Casa Italia, en la Galería y rodeada de obras de arte, se encuentra la Sala de Celebraciones, un cilindro que sirve de epicentro a la celebración del deporte, de Italia y de sus medallas. Este espacio, comisariado por InformaSistemi, está envuelto por pantallas y concebido como un anfiteatro contemporáneo donde la celebración de los atletas puntúa la jornada. En otros momentos, se convierte en un lugar para representar la excelencia italiana en todos sus aspectos: una explosión visual de obras de arte digitales, imágenes del Bel Paese y contenidos multimedia que fluyen en secuencia, transmitiendo el alto valor de Italia.

No muy lejos, encontramos el salón con la segunda obra de Paolo delle Monache titulada “Serendipity”, una columna que representa numerosos monumentos italianos y que envuelve, protege, sostiene y constituye a un individuo. Esta zona se caracteriza por una larga ventana perimetral que separa el interior del jardín, concebido como un espacio que se extiende hacia el exterior, donde interior y exterior se funden y la vegetación del Bois de Boulogne se convierte en protagonista. El diseño interior, obra del Atelier Bianca E. Patroni Griffi, pretende eliminar la frontera entre interior y exterior, recreando un paisaje fluido impregnado de elementos naturales con colores terrosos y naturales.

El paisaje está delineado en la entrada del salón por un mostrador de bar circular a un lado y dos bancos anulares al otro, concebidos como atolones, islas con vegetación en su interior. Estos tres elementos se han fabricado a medida con un material innovador a base de microfibras de papel procedentes de papel reciclado y bosques con certificado FSC, una especie de evolución del papel maché, desarrollado en colaboración con la Universidad de Salento en Lecce por Paper Factor, una empresa italiana situada en Apulia.

En el centro del salón, dos sofás Standard de Edra se disponen vis-à-vis, reforzando el eje central que define la simetría de la sala. Dos composiciones de sofás Ribes diseñados por Antonio Citterio, en tonos rojos, con mesas bajas Borea de Piero Lissoni en lava esmaltada roja, ambos para B&B Italia, acompañan el desarrollo lineal de la cristalera hacia el jardín, creando dos zonas de salón espejadas, flanqueadas por bancos de madera maciza de Brodie Neill para Riva 1920.

Siguiendo con la intención de potenciar la fusión entre interior y exterior, se establece un nuevo eje de simetría a lo largo de la pared acristalada. Como en un juego de espejos, los sofás Ribes se encuentran en el jardín, esta vez coloreados de verde, combinados con las mesas Borea (Piero Lissoni) en lava esmaltada verde. A las islas de sofás de exterior se unen en el jardín los sillones Crinoline, diseñados por Patricia Urquiola para B&B Italia. Una serie de asientos multicolores salpican el jardín como flores, creando una conexión entre las nuevas zonas exteriores y el paisaje circundante, combinando las esencias mediterráneas de la Casa Italia con la vegetación local del parque. Los asientos incluyen sillones de las colecciones Shadowy y Sunny, diseñadas por Tord Boontje, y Modou, de Ron Arad para Moroso, caracterizadas por un diseño gráfico y materiales lúdicos y coloristas. También en la zona exterior del jardín hay un segundo mostrador de bar circular, hecho a medida en Plastiz, un material derivado de residuos plásticos y completamente reciclable, producido utilizando únicamente energía de fuentes renovables.

Volviendo al interior desde la Galería, se entra en la sala Milano-Cortina, una experiencia inmersiva dedicada a la nieve y el hielo. Asientos diseñados por Jacopo Foggini, que reproducen la forma de la catedral de Milán en el respaldo, junto con sofás de Francesco Binfaré, ambos para Edra, amueblan el espacio en torno al volumen espejado que alberga la instalación. En el exterior, los asientos de Jacopo Foggini para Edra, con tejidos transparentes, evocan el agua y el hielo.

Subiendo a la planta superior de Le Pré Catelan, hay una escalera monumental iluminada por la composición escultórica Arrangements de Michael Anastassiades para Flos, con una concatenación simbólica de círculos luminosos. Los visitantes son recibidos por Fun with Flags, una serie de obras de Riccardo Previdi en las que el artista mezcla diferentes banderas del mundo, creando motivos coloristas e insólitos. La exposición continúa con el díptico Time Capsule, de Patrick Tuttofuoco, que explora el tema de las manos entrelazadas, convirtiéndose en un símbolo universal de hermandad.

La primera sala de la planta superior es la Sala Casa Italia, situada en el entresuelo. Este espacio oval permite contemplar la avenida y la obra Sacral de Edoardo Tresoldi desde el interior de la Casa. El mobiliario incluye amplios asientos de la serie Standard de Francesco Binfaré y las mesas Cicladi de Jacopo Foggini en alabastro de colores verde, blanco y rojo, en homenaje a la bandera italiana (ambas fabricadas por Edra). La iluminación corre a cargo de las lámparas de pie y de pared Bellhop, de Edward Barber y Jay Osgerby para Flos.

El cruce continuo entre interior y exterior también caracteriza la primera planta de Le Pré Catelan, donde el verde es el color predominante, realzado por la exuberante vegetación visible a través de los grandes ventanales. El espacio se divide en una serie de salas, destinadas principalmente a las habitaciones de la Casa Italia Hospitality. Cada habitación, aunque mantiene un hilo conductor, tiene su propia identidad definida por la elección del mobiliario y las obras de arte. A la derecha de la escalera de acceso, la sala Hospitality para deportistas está decorada con mesas Shimmer iridiscentes diseñadas por Patricia Urquiola para Glas Italia y sillas Gilda de Jacopo Foggini para Edra. Un gran sofá On The Rocks de Francesco Binfaré para Edra define el límite entre la sala interior y la terraza exterior. Aquí, los sinuosos bajorrelieves del artista Sergio Breviario, titulados Bianca y Marion, realzan la complejidad de cada individuo, invitando a la curiosidad y a la acogida.

Al lado hay una sala más íntima, donde el verde/azul de los asientos Ella, diseñados por Jacopo Foggini para Edra, se combina con las mesas de cristal transparente Hub, de Piero Lissoni para Glas Italia. La sala da a una pequeña terraza semicircular con dos módulos de exterior de la serie Standard de Francesco Binfaré. Los dos lienzos de Gabriele Picco, Lasciarsi attraversare dall’arcobaleno y Nuotando nel cielo, expresan la alegría de romper el aislamiento, representando figuras humanas inmersas en un arco iris o en un contexto que recuerda un “condominio” colectivo. Los espacios están iluminados por suspensiones de luz Viscontea y Zeppelin, diseñadas respectivamente por Achille y Pier Giacomo Castiglioni en los años sesenta y por Marcel Wanders a principios de los 2000, reinterpretando diseños clásicos de lámparas de araña.

Las salas de hospitalidad incluyen las sillas Gina y Gilda, con carcasas translúcidas de Jacopo Foggini para Edra, acompañadas por las mesas Jabot de Mario Bellini para Glas Italia o las mesas de plástico blanco hechas a medida con inserciones transparentes, fabricadas por Plastiz a partir de materiales reciclados. La iluminación corre a cargo de las icónicas lámparas de suspensión Teraxacum 88 de Achille Castiglioni y las String Lights de Michael Anastassiades, ambas para Flos. Continuando en la exposición, Francesco Jodice explora el apoyo mutuo y la colaboración en el díptico fotográfico The Surfers, en el que unos surfistas esperan la ola en un mar casi metafísico, simbolizando una confrontación colectiva con lo desconocido. Entre las obras, Messa a Terra de Marco Bernardi, inspirada en Masaccio, relee el cuento de Adán y Eva como forma arquetípica de hermandad y origen de la humanidad.

En el salón dedicado a los atletas, la instalación evoca el “cielo en una habitación”, convirtiéndose en metáfora de la consecución de hazañas atléticas. El cielo azul está representado por un mobiliario suave y aireado, en el que destaca el gran sofá Cipria de Campana para Edra, mientras que un techo de espejos amplifica la sensación de suspensión. La mediación entre el suelo y el techo la proporciona la superficie perimetral en tejido estampado degradé de Rubelli. El salón está iluminado por lámparas de pie Glo-Ball de Jasper Morrison para Flos, que se integran en el tema del cielo. Un futbolín especialmente fabricado por Impatia se sitúa en la sala, ofreciendo a los deportistas un espacio para relajarse, tanto en sentido literal como figurado.

Cierra la secuencia de espacios de la primera planta la Sala de Reuniones, un espacio oval decorado con un rico motivo blanco sobre fondo azul, donde la obra Il Giardino Perduto de Matteo Nasini encierra el concepto de la Casa Italia París 2024, Ensemble, y los valores universalistas del espíritu olímpico. Columnas de colores hechas de hilos de lana representan el entrelazamiento y subrayan la importancia de la colaboración y el respeto a la diversidad. En esta sala, una gran mesa Allure O’ y las sillas Flair O’, ambas diseñadas por Monica Armani para B&B Italia, crean un contraste entre el ambiente clásico y el mobiliario amarillo, más atrevido y vivo.

Por último, una gran terraza longitudinal acompaña a las habitaciones que dan al jardín de la planta baja. Aquí, los asientos de Marcello Ziliani para Ethimo, en madera de teca con asientos tejidos en arena, verde y burdeos, ofrecen un contraste natural y acogedor.

Siguiendo con las obras de arte, “Panorama” de Julie Polidoro es una serie de pinturas que relacionan cataclismos naturales y migraciones de pueblos. En contraste, “Mona Lisa con barba” de Marco Bernardi presenta una reinterpretación irónica de la Mona Lisa de Van Gogh con barba, jugando con símbolos de discordia entre Italia y Francia. “Taksim Square, Istanbul, Turkey, 05.31.2013” e “Innsbruck, Austria, 01.29.1964” de Margherita Moscardini representan momentos colectivos que revelan la forma de los lugares a través de la multitud. “The Belle of The Ball”, una serie de collages y dibujos de Sergio Breviario, cuenta historias de torpes y románticas figuras de caballería. Por último, “Energie”, de Alberto Di Fabio, un gran tapiz amarillo, combina la inspiración cósmica con la tradición milenaria de la tapicería italiana. Por último, Agostino Iacurci, con ’De mi jardinería abstracta’, dos cuadros florales con fondo negro, hace referencia a los horti picti romanos, los paisajes pintados directamente en las paredes.

Un elemento cohesionador fundamental de este largo itinerario artístico entre paisaje, arquitectura, arte y diseño es la luz. Fabertechnica by Marco Frascarolo ha trabajado para realzar las excelencias individuales, desde las obras de los artistas hasta las de los diseñadores, desde la escenografía hasta la ambientación paisajística, tejiendo un lienzo único en un itinerario perceptivo y narrativo, diurno y nocturno, capaz de captar cada momento de la Casa, resaltándolo en su totalidad.

La Casa Italia pretende ser un espacio doméstico para los atletas italianos, pero también para los invitados nacionales e internacionales, que podrán vivir Italia y el deporte italiano también gracias a los originales contenidos propuestos.

Olimpiadas de París 2024: la Casa Italia se abre al público por primera vez con una exposición y un recorrido panorámico

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