Notre-Dame, el Tribunal de Cuentas francés quiere abrir una investigación sobre el uso de las donaciones

El presidente del Tribunal de Cuentas francés, Pierre Moscovici, ha pedido que se investigue el uso de las donaciones recaudadas para la reconstrucción de Notre Dame. A 31 de diciembre de 2019, la colecta había movilizado hasta 338.086 donantes, que han aportado un total de 824 millones de euros: Moscovici pide ahora claridad sobre la transparencia y el uso que se está haciendo de estos fondos. “La gestión de una catedral es muy complicada”, declaró Moscovici al diario Le Figaro, “y las responsabilidades se reparten entre la diócesis, el Ayuntamiento de París y la autoridad nacional de monumentos. La consecuencia es que las responsabilidades se derivan de procedimientos y contratos poco claros, con instrumentos bastante débiles y responsabilidades intrincadas”.

Las preocupaciones de Moscovici llegan después de que el Tribunal de Cuentas presentara un informe en el que señala que “hay margen para mejorar la transparencia con la que se utilizan los fondos” que gestiona el organismo público que, dentro del Ministerio de Cultura francés, tiene que gestionar el proceso de reconstrucción de la catedral. Existe el riesgo de que el organismo (que se denomina “organismo público encargado de la conservación y restauración de la catedral de Notre-Dame de París”) utilice los fondos procedentes de donaciones para su funcionamiento ordinario, que requiere 5 millones de euros al año con los que el organismo, dirigido por Jean-Louis Georgelin (un antiguo general retirado del ejército), tiene que pagar los sueldos de 39 empleados y el alquiler de locales en el séptimo distrito. En pocas palabras“, dijo Moscovici, ”no creemos que los donantes hayan querido financiar salarios y alquileres que no tienen relación directa con la obra".

De hecho, la ley promulgada el 16 de julio de 2019 para regular los fondos de donaciones establece que los recursos derivados de la recaudación “se destinen exclusivamente a financiar las obras de conservación y restauración de la catedral de Notre-Dame y de su mobiliario, de los que el Estado es propietario, así como a financiar la formación inicial y continua de los profesionales que posean las competencias especiales requeridas para estas obras”. En consecuencia, señala el Tribunal de Cuentas, para su funcionamiento ordinario el organismo debería recibir los recursos directamente del Ministerio de Cultura, del que depende.

Notre-Dame, el Tribunal de Cuentas francés quiere abrir una investigación sobre el uso de las donaciones

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