A las protestas de los sindicatos por el cierre hasta abril de 2021 de los Museos Cívicos de Venecia, se unen ahora las de la asociación Mi Riconosci? profesional del patrimonio cultural, que define la elección de la Fondazione Musei Civici como “ilógica”. Las razones de la elección, según Mi Riconosci ?, parecen claras: en ausencia de las actividades inducidas por el turismo y, por tanto, de los probables ingresos que se derivarían de ellas, la Fondazione Musei Civici preferiría no arriesgarse a sufrir pérdidas económicas y, en consecuencia, consideraría más conveniente despedir al 100% de los trabajadores, según la asociación. Hace menos de un mes, la presidenta de la Fundación Mariacristina Gribaudi declaró “estamos listos para reabrir hoy”, una declaración que sin embargo hoy suena completamente extraña en relación con la situación.
“Los cientos de trabajadores empleados por las cooperativas, subcontratados por la Fundación, estarán destinados a otros tantos meses de subsidios de desempleo, que en algunos casos ascienden a 350 o 400 euros, y en constante retraso”, explica la educadora de museos y activista Cristina Chiesura, “pero para otros cientos de trabajadores cuya suerte dependía de los Museos Cívicos de Venecia no habrá ni siquiera esa mínima protección: educadores de museos, por ejemplo, trabajadores autónomos con CIF que se encuentran sin trabajo y sin ningún tipo de subsidio. Y a esto hay que añadir todos los trabajadores vinculados a la cadena del turismo cultural: ¿cómo pensar en construir un turismo de proximidad con los museos venecianos cerrados?”.
“Llama la atención que la Fundación haya optado no sólo por mantener cerrados los museos, sino por suspender todas las actividades, incluidas las de catalogación, investigación y programación”, añade Alice Battistella, representante veneciana de la asociación Mi Riconosci?“Y eso a pesar de que la Fundación ha recibido subvenciones públicas por valor de 7 millones de euros, además del fondo de garantía de despido, que garantizaba a la dirección cerrar el año en números negros”. ¿A quién responde la Fondazione Musei Civici di Venezia, propiedad al 100% del ayuntamiento? ¿A los intereses de los ciudadanos y de la ciudad, a los intereses culturales o a los intereses económicos privados?".
Por tanto, se considera que la decisión recae sobre los hombros de los trabajadores y los ciudadanos. En resumen, 2020 parece ser el cierre en su peor momento. “¿Es esto realmente lo que queremos para Venecia?”, se preguntan los activistas.
Los Museos de Venecia cierran hasta abril, protesta: "una decisión ilógica |
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