Dura reprimenda dela Unesco a Turquía por la situación de Santa Sofía: como recordarán, el año pasado la antigua basílica fue convertida en mezquita, 85 años después de que el fundador de la actual Turquía, Kemal Atatürk, decidiera que Santa Sofía, monumento declarado Patrimonio de la Humanidad, se convirtiera en museo. En 2020, la vuelta al pasado: Santa Sofía vuelve a ser una mezquita como lo fue desde 1453, año de la caída del Imperio de Oriente, hasta 1931, cuando fue desconsagrada.
La Unesco ya había expresado su cólera el año pasado: el organismo vuelve ahora a la actualidad con una decisión emitida el 21 de julio, en la que se queja de la “profunda ausencia de diálogo e información” sobre la decisión tomada por el Presidente turco Recep Tayyip Erdogan, y pide a Turquía que presente un informe sobre el estado de conservación de Santa Sofía antes del 1 de febrero de 2022. La Unesco también expresó su preocupación “por el impacto potencial de estos cambios en componentes clave del valor universal excepcional del bien”, y pidió a Turquía que cooperara de forma más proactiva.
Turquía, sin embargo, no lo consintió: el país, a través de su Ministerio de Asuntos Exteriores, rechazó las críticas de la Unesco, tachándolas de “prejuiciosas, políticas y partidistas”, y subrayando el hecho de que Santa Sofía está siendo protegida de forma “meticulosa”. Por último, Turquía recordó que es “plenamente consciente de sus derechos, prerrogativas y responsabilidades para con sus bienes declarados Patrimonio Mundial por la UNESCO”.
La Unesco reprende a Turquía por la situación de Santa Sofía en Estambul |
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