Hallado el tesoro de los gobernantes de Lituania y Polonia: estaba en el sótano de la catedral de Vilna

Importante descubrimiento en el calabozo de la catedral de Vilna, capital de Lituania: se ha encontrado el tesoro de los soberanos de Lituania y Polonia(Alejandro Jagellón, que fue Gran Duque de Lituania de 1492 a 1506 y Rey de Polonia de 1501 a 1506, su madre Isabel de Habsburgo , que fue Gran Duquesa consorte de Lituania y Reina consorte de Polonia, y Bárbara Radziwill , que fue Gran Duquesa consorte de Lituania y Reina consorte de Polonia de 1548 a 1551). Las insignias de las soberanas, que antes se encontraban en su capilla funeraria dentro de la Catedral, fueron escondidas en un nicho secreto hace más de noventa años, probablemente en 1939, tras el inicio de la Segunda Guerra Mundial, para protegerlas del expolio.

En el escondite se encontraron varios objetos: la corona del Gran Duque de Lituania y del rey Alejandro de Polonia, la corona, la cadena, el medallón, el anillo y la placa de la tumba de Isabel de Habsburgo, la corona de Barba Radizwill, así como un cetro, tres anillos, una cadena y otros materiales, como seis placas de plata decoradas y numerosos exvotos. El hallazgo se remonta a mediados de diciembre de 2024, pero la noticia se ha dado a conocer en los últimos días.

“Ha habido varios intentos de buscar estas insignias, por lo que estoy sinceramente contento y agradecido a todos los que han contribuido voluntariamente a estas búsquedas, para que estos objetos hayan sido finalmente descubiertos gracias a la cooperación de diferentes instituciones”, afirma el arzobispo de Vilna , Gintaras Grušas. Ahora serán estudiados, restaurados y en el futuro presentados al público. Las insignias de los soberanos de Lituania y Polonia son valores históricos de incalculable valor, símbolos de la larga tradición del Estado lituano, signos de Vilnius como capital, maravillosas obras de orfebrería y joyería".

La búsqueda del tesoro de los reyes de Lituania y Polonia

La capilla funeraria de los soberanos se descubrió en el sótano de la catedral en otoño de 1931, durante las obras posteriores a la inundación que había sufrido la catedral ese año. En la cripta descansaban los restos del Gran Duque de Lituania y del rey de Polonia Alejandro y de las dos soberanas consortes Isabel de Habsburgo y Bárbara Radziwill, primera esposa de Casimiro IV de Polonia y madre de Alejandro, segunda esposa de Segismundo II Augusto de Polonia). Junto con los restos se conservaron las insignias sepulcrales reales.

Con el inicio de la Segunda Guerra Mundial y la amenaza de cierre de la catedral de Vilna, el cabildo catedralicio se preocupó de preservar los objetos más importantes de la catedral. Así, el tesoro de la catedral fue tapiado en un nicho situado en una de las escaleras del santuario. Tras la disolución de la Unión Soviética y la posterior independencia de Lituania, se hicieron varios intentos de encontrar el escondite del tesoro. Entre los intentos de búsqueda de las insignias de los soberanos figura un proyecto del Ministerio de Cultura polaco en 2009, cuando se firmó un acuerdo de colaboración con instituciones lituanas y la archidiócesis concedió un permiso para realizar una búsqueda no invasiva con georradar, cámara termográfica y detector de metales. En el transcurso de estos registros también se tomó declaración a un testigo que participó en la ocultación de la insignia. Sin embargo, ni siquiera este examen de las bóvedas de la catedral produjo resultados tangibles.

En 2023, se iniciaron negociaciones con el Instituto Lituano de Historia para realizar un inventario digital detallado de las mazmorras mediante el escaneado del edificio con un escáner 3D. El análisis de los datos obtenidos habría permitido la identificación de cambios estructurales y, por tanto, la identificación no invasiva de posibles ubicaciones del escondite. Sin embargo, este proyecto se interrumpió por falta de fondos. Con los mismos objetivos se llevó a cabo el proyecto de digitalización del patrimonio “Plataforma eCulture”, financiado con fondos estatales y realizado por la Biblioteca Nacional Lituana Martynas Mažvydas junto con el Departamento de Patrimonio Cultural del Ministerio de Cultura.

Por último, en 2024, el 9 de octubre, se celebró una reunión en la Catedral de Vilna, a la que asistieron representantes de la Archidiócesis de Vilna, el Departamento de Patrimonio Cultural del Ministerio de Cultura y el Museo del Palacio Soberano, con el fin de iniciar un reconocimiento utilizando una cámara endoscópica. El examen, que tuvo lugar el 16 de diciembre, dio sus frutos: tras varios intentos, se descubrió el escondite. El mismo día del hallazgo, las autoridades lituanas decidieron recoger, describir, catalogar y trasladar a un lugar seguro los objetos encontrados en el escondite. En el futuro, serán estudiados, restaurados y expuestos al público.

Hallado el tesoro de los gobernantes de Lituania y Polonia: estaba en el sótano de la catedral de Vilna

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