Ya estamos otra vez: después de la exposición de panettone en Vicenza en 2017, el infatigable empresario-curador Marco Goldin se dispone a lanzar otra exposición sobre Vincent Van Gogh. Esta vez la sede es el Centro Altinate San Gaetano de Padua, el periodo es del 10 de octubre de 2020 al 11 de abril de 2021, y el título es Van Gogh. El color de la vida. Goldin lo ha anunciado como “el mayor proyecto jamás dedicado a Van Gogh en Italia”, y que se organizará, dice una nota, “según el sentido de un amplio estudio en profundidad de carácter histórico que puede asemejarse a una verdadera novela, donde las obras maestras expuestas están flanqueadas por la historia de la vida, el descubrimiento de nuevos colores y la relación con algunos artistas que contaron para Van Gogh”.
Este año Goldin promete, a pesar de los títulos y las anticipaciones, que la exposición “no tiene nada de genérica y no es un simple desfile de cuadros que son, en muchos casos, obras maestras bien conocidas”, sino que será “un viaje sorprendente destinado a dar a conocer algunas parcelas de la vida y la obra de Van Gogh que no se han abordado hasta ahora, precisamente por la voluntad del comisario de reconstruir todo el recorrido, incluido lo que no se suele comprender”.
En cualquier caso, el guion es muy similar al de Vicenza en 2017: por el momento se desconoce la lista de cuadros, pero la “decisiva colaboración del Museo Kröller-Müller”, acostumbrado a prestar grandes cantidades de cuadros de Van Gogh, hace pensar que el recorrido no será muy diferente al de hace tres años (incluso entonces, los préstamos procedían todos del museo de Otterlo). Sin embargo, algunos de los préstamos se han hecho públicos: la gran mayoría de las obras que se sabe que estarán en la exposición proceden del Museo Kröller-Müller, y también hay una serie de préstamos como laArlesiana de la Galleria Nazionale d’Arte Moderna e Contemporanea de Roma, el Retrato del cartero Roulin del Kunstmuseum Winterthur, y el autorretrato con el sombrero de fieltro gris del Museo Van Gogh de Ámsterdam.
La exposición, dividida en cinco secciones y “siete estudios en profundidad dentro de las propias secciones”, constará de 125 obras, 80 de las cuales son pinturas y dibujos de Van Gogh (repartidos a partes iguales), y unas 40 obras de artistas importantes para el holandés, como Delacroix, Courbet, Millet, Hiroshige, Kunisada, Seurat, Pissarro, Signac, Bernard y Gauguin. La primera sección desarrolla la idea del “pintor como héroe” (“aquel que tiene una misión que cumplir y lo sacrifica todo por ella. Me gustaría en todos los sentidos que esta exposición hablara del pintor como héroe, y mostrarlo a través de sus obras”, dice Goldin), la segunda trata sobre los años de su formación con dibujos realizados entre 1880 y 1883, la tercera sobre su estancia en París, la cuarta sobre su traslado a Arlés, la quinta sobre sus últimos años. En la exposición habrá también algunos docu-films de quince minutos cada uno realizados también por Goldin. Y además, al margen de la exposición, un “curso en cuatro lecciones de Marco Goldin” en el auditorio del centro.
¿Podremos ver algo diferente esta vez, o será la habitual exposición ’made in Goldin’? Lo veremos en octubre... ¡!
Imagen: Vincent van Gogh, Autorretrato con sombrero de fieltro gris, detalle (1887; óleo sobre lienzo, 44,5 x 37,2 cm; Amsterdam, Museo Van Gogh)
Goldin ataca de nuevo. Llega otra exposición de Van Gogh (a Padua) |
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