La Ministra francesa de Cultura , Roselyne Bachelot-Narquin, anunció la candidatura de la Maison Carrée de Nîmes, el monumento más famoso e importante de la ciudad occitana, a la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO. Construida a principios del siglo I d.C., la Maison Carrée es uno de los templos romanos mejor conservados que existen. Monumento de notable calidad arquitectónica, es testigo, por las circunstancias históricas de su creación, así como por la importancia política de su consagración y las opciones estilísticas que presidieron su desarrollo, de los valores de paz duradera, armonía y prosperidad que elImperio Romano pretendía promover y garantizar.
Aunque de forma rectangular (“Maison Carrée” significa de hecho “Casa Cuadrada”), el templo lleva este nombre desde el siglo XVI: en aquella época, de hecho, el rectángulo se consideraba un “cuadrado largo”. El edificio está dedicado al culto de la familia imperial. Inspirada en los templos de Apolo y Marte Ultor de Roma, la Maison Carrée impresiona por sus proporciones armoniosas y su majestuosidad. En la época romana, se alzaba al sur del foro de la antigua Nemausus, un vasto espacio público que constituía el corazón de la ciudad. En la parte sur del foro había una plataforma elevada sobre el nivel de la plaza, cuyos elementos aún son visibles a ambos lados de la escalinata del templo. En la plataforma había un gran altar de piedra, hoy desaparecido, que se utilizaba para ceremonias.
Como todos los templos romanos, el edificio descansa sobre un podio. Las piedras utilizadas en la construcción de la Maison Carrée proceden de varias canteras de la ciudad: las del podio y la escalinata son de piedra de Barutel, mientras que las de las columnas, muros y entablamento del monumento proceden de las canteras del Bois des Lens. Se trata de una piedra caliza blanca muy densa de una calidad cercana al mármol. El interior del templo consta de una sola sala, la cella, precedida de un pronaos. El techo del pronaos está sostenido por 10 columnas, 6 de las cuales se encuentran en el frente. Las columnas, corintias, tienen 9 metros de altura. Sobre los capiteles, el entablamento está decorado con un friso foliado inspirado directamente en los modelos realizados en Roma en la misma época. En cuanto al tejado, la Maison Carrée está cubierta con una alternancia de tejas planas y curvas, las tegulae y las imbreces.
La Maison Carrée tuvo una función pública y religiosa desde su construcción y atestigua la importancia del culto imperial en el seno de la nueva sociedad que se estaba formando en la época. Este culto dinástico era un elemento unificador entre los cientos de ciudades del imperio, que formaban un inmenso mosaico de pueblos y culturas. El culto imperial adoptaba la forma de ceremonias oficiales altamente ritualizadas. Los sacerdotes oficiantes eran notables nombrados por la ciudad, que al mismo tiempo que las ceremonias también organizaban fiestas acompañadas de grandes banquetes y luchas de gladiadores ofrecidas con sus propios fondos. El sumo sacerdote (el flamen) estaba a cargo de este culto. En cambio, el culto de las emperatrices (Augustae) estaba asegurado por una gran sacerdotisa (flaminica diale): era la única función oficial reservada a una mujer en una ciudad romana.
El interior de la Maison Carrée está siendo renovado hasta la primavera de 2022. Esta remodelación ofrecerá una nueva experiencia al visitante, respetando la arquitectura original del edificio y restaurando su volumen interior. Enriquecidos por nuevos modos narrativos evolutivos y nuevas tecnologías, los visitantes podrán descubrir el edificio y su historia a lo largo del recorrido. Este nuevo proyecto de acondicionamiento responde también a las exigencias científicas de la candidatura de inscripción del monumento en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO.
Francia pretende aportar como “valor universal excepcional” (exigido por la UNESCO) de la Maison Carrée la demostración de que este monumento, construido en vida del emperador Augusto en el siglo I d.C., representa una de las expresiones más antiguas y mejor conservadas de un templo romano consagrado al culto imperial. La candidatura será examinada por el Comité del Patrimonio Mundial de la UNESCO durante su reunión de junio/julio de 2023. La próxima sesión del Comité del Patrimonio Mundial, que se reunirá del 19 al 30 de junio de 2022 en Kazán (Rusia), examinará entonces también otra candidatura francesa, pero relativa al patrimonio natural, concretamente el sitio “bosques y volcanes del norte de Martinica”.
Imagen: la Maison Carrée de Nîmes. Foto: Oficina de Turismo de Provenza
Francia, la Maison Carrée de Nîmes solicita ser declarada Patrimonio Mundial |
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