Florencia, mantas térmicas de migrantes en las puertas de San Miniato al Monte: instalación de Giovanni De Gara

Se ha inaugurado hoy, jueves 28 de junio de 2018, la instalación Eldorato: Birth of a Nation, de Giovanni De Gara (Florencia, 1977), que ha colocado en las puertas de la basílica de San Miniato al Monte, una de las iglesias más famosas de Florencia, las mantas térmicas doradas que se entregan a los migrantes al final de su agotador viaje, cuando llegan a los puertos europeos. Las mantas se han colocado para cubrir los tres portales de entrada, en una instalación que recuerda estéticamente el dorado del mosaico del siglo XIII con Cristo entre la Virgen y San Mini ato que adorna el frontón de la fachada. Pero el significado de la obra va más allá: es, explica el artista, “un fuerte signo de bienvenida”, que promueve “una profunda reflexión sobre las migraciones, sobre las tierras prometidas y brutalmente negadas, sobre la aspiración a un mundo diferente, construido más allá de la idea de fronteras y capaz de volver a ser humano”. La obra, prosigue De Gara, “relata la ilusión de este milenio: la existencia de una tierra de oro, donde hay bienestar y futuro. Una tierra lejana de la que se sabe poco y se imaginan maravillas; una tierra más allá de la línea del horizonte que nos la oculta”.

El objetivo del proyecto es promover una reflexión profunda sobre el tema de la acogida a todo individuo, sin distinción de raza, sexo o credo, y al mismo tiempo dar un mensaje de calidez y salvación a quienes emigran, por el motivo que sea, en medio de mil dificultades y soñando con una tierra prometida (pero a menudo encuentran ante sí la muerte en el mar o, si consiguen sobrevivir, puertos cerrados y muros levantados). El título del proyecto hace referencia precisamente al lugar imaginario por excelencia,Eldorado, pero también es un juego de palabras con la palabra El (“Dios” en hebreo: y es Dios el único vínculo que consuela a muchos de los que emigran abandonando su tierra). Las mantas se instalan en las puertas de San Miniato por su valor simbólico: la de la izquierda es la Puerta Santa de Florencia, y la inscripción del escalón la identifica como ianua coeli (“puerta del Cielo”), el acceso al Paraíso (la obra se llena así también de significados escatológicos, y devuelve a la fachada de San Miniato su antiguo valor simbólico).

La instalación fue presentada por el abad de San Miniato, Bernardo Gianni, el sacerdote Andrea Bigalli, el científico Stefano Mancuso y el historiador del arte Tomaso Montanari. “Acogemos con gusto una obra que, en plena sintonía con el Magisterio cotidiano del Papa Francisco, quiere recordarnos que hoy, más que nunca, es esencial prestar atención a lo lejano, a lo último”, especificó el padre Bernardo, que añadió: “no se trata de un buenismo genérico, sino de una contribución para una reflexión elevada y evangélicamente inspirada en una consideración redescubierta de la aventura de toda historia humana, especialmente la de aquellos que, como el antiguo Israel y la misma Sagrada Familia de Nazaret, experimentaron la condición del exilio. Un llamamiento que sentimos en línea con la gran tradición La Pira de esta ciudad y, sobre todo, de este lugar que el Santo Alcalde Giorgio La Pira llamaba ’terraza que se extiende hacia todas las naciones’”.

La obra permanecerá unos días en Florencia y después se trasladará: primero a Roma, después a la Pieve di Santomato (Pistoia) y también está prevista una parada en Lampedusa. El proyecto puede seguirse en Instagram en la cuenta @eldoratoproject (hashtag #eldoratoproject.

Florencia, mantas térmicas de migrantes en las puertas de San Miniato al Monte: instalación de Giovanni De Gara

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