España, medidas estrictas para la reapertura de museos: distancias, nada de didáctica, prohibición de audioguías

Como escribíamos en el artículo de esta mañana, el lunes España reabrirá los museos de las regiones que podrán acogerse a la segunda fase de contención de la pandemia del coronavirus Covid-19 (para España, que comenzó con la “fase 0”, será por tanto la “fase 1”). Las regiones que podrán abrir serán Galicia, Asturias, Cantabria, País Vasco, La Rioja, Navarra, Aragón, Extremadura, Región de Murcia, Canarias, Baleares y las ciudades extraterritoriales de Ceuta y Melilla. Las medidas oficiales de seguridad a las que deberán atenerse los museos acaban de publicarse en una orden del Ministerio de Sanidad incluida hoy en el Boletín Oficial del Estado.

Comienza con disposiciones generales para los trabajadores de todos los ámbitos regulados por la ordenanza (incluidos, por tanto, los museos). Los empleados de las instalaciones tendrán que disponer en todo momento de agua y jabón o geles hidroalcohólicos o desinfectantes con acción virucida autorizados por el ministerio para lavarse las manos. Asimismo, los trabajadores deberán mantener en todo momento una distancia de seguridad interpersonal de dos metros entre ellos: si esto no es posible, deberán ir equipados con equipos de protección individual adecuados al nivel de riesgo. En este último caso, el personal debe estar adecuadamente formado e informado sobre su correcta utilización. Los sistemas de control del tiempo que impliquen contacto deben sustituirse (o, si esto no es posible, desinfectarse con frecuencia), y los turnos de trabajo deben organizarse de forma que el personal pueda permanecer a una distancia interpersonal segura. En caso de que un trabajador desarrolle síntomas compatibles con el Covid-19, debe contactarse con un número de teléfono regional especial, y debe exigirse al trabajador que abandone el lugar de trabajo hasta que su estado médico haya sido evaluado por un médico. También se prescribe una desinfección cuidadosa de las superficies de contacto (pomos de puertas, manillas, mesas, muebles, pasamanos, teléfonos y otros objetos que se tocan con frecuencia). Además, debe garantizarse la ventilación regular de las salas, al menos una vez al día y durante al menos cinco minutos.

Los museos podrán abrir a condición de que limiten su capacidad a un tercio de lo que pueden albergar habitualmente, y seguirán teniendo que garantizar la protección de trabajadores y visitantes: podrán (no es obligatorio) cambiar los recorridos de visita, separar la entrada y la salida, o excluir de los recorridos las salas que no permitan mantener la distancia de seguridad interpersonal. Sólo se permitirán las visitas: por lo tanto, no se permitirán actividades culturales o pedagógicas. También se prohibirá el uso de material táctil, así como de audioguías, folletos o material similar. También se prohibirán las visitas en grupo: sólo se permitirán las visitas individuales, o a personas que convivan juntas (familias o parejas de hecho), siempre que se respete en todo momento la distancia interpersonal de dos metros (para facilitarlo, los museos tendrán que colocar pegatinas especiales en el suelo o dispositivos similares para marcar las distancias en las zonas de acceso y espera).

Para garantizar un número de visitantes adecuado a la nueva capacidad, los museos tendrán que controlar cuidadosamente la venta de entradas, tanto in situ como en línea. Los museos podrán determinar el número máximo de entradas que se venderán por horas. El Ministerio de Sanidad sigue recomendando la venta de entradas por internet. También se desactivará el servicio de guardarropa (aunque no se especifica si se impedirá la entrada a visitantes con mochilas voluminosas o similares).

Los museos también pondrán a disposición de los visitantes dispensadores de geles hidroalcohólicos o desinfectantes. En lugar de folletos, que no podrán utilizarse, los museos instalarán carteles informativos. A partir de entonces, los museos estarán obligados a informar regularmente a los visitantes sobre las medidas higiénicas obligatorias durante la visita, y tendrán que garantizar una limpieza y desinfección constantes, pero al mismo tiempo se asegurarán de que las superficies históricas o las obras de arte sólo se traten con productos adecuados. La limpieza también debe reservarse a las vitrinas.

El documento también incluye medidas para las bibliotecas: además de medidas higiénicas similares a las de los museos, se prevé una “cuarentena” para los libros, que durará catorce días después de su uso (durante este periodo, nadie podrá consultarlos).

Foto: interior del Museo del Prado. Foto Crédito Francisco Anzola

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