En Florencia, si no consumes en un bar, tienes prohibida la entrada a gran parte del centro histórico por la noche

¿Quiere dar un paseo nocturno o de fin de semana por el centro histórico de Florencia para ver algunos de los principales monumentos de la ciudad bajo las estrellas? A partir de hoy, 25 de junio de 2021, ya no podrá, a menos que quiera sentarse en un bar a consumir. Con la excusa de dispersar a las multitudes, de hecho, el Ayuntamiento de Florencia emitió anteayer una ordenanza, firmada por el alcalde DarioNardella, que prohíbe “aparcar” y transitar por varias zonas del centro histórico de 21.00 a 6.00 horas todos los jueves, viernes y sábados. La gente sólo podrá pasar para ir al bar (estrictamente sentados a la mesa), para volver a casa o para ir a otro sitio. En algunos casos, sin embargo, la prohibición es ilimitada en cuanto a días y horas: se aplica, por ejemplo, al patio de la iglesia de la basílica de Santo Spirito, donde hace unos días se instaló un discutido cordón que, sin embargo, fue inmediatamente destruido durante una manifestación de protesta.

La ordenanza afecta a varias zonas del centro histórico: por ejemplo,toda la Piazza Santo Spirito, la Piazza Sant’Ambrogio y la Via Pietrapiana, la Via Giuseppe Verdi, la Piazza Strozzi, la Via di Calimala entre la Via di Porta Rossa y la Piazza della Repubblica, el tramo de la Via dei Lamberti entre la Via Pellicceria y la Via di Calimala, la Via dei Cavalieri, y tres de las plazas florentinas más bellas, a saber, la Piazza Santa Croce, la Piazza Santissima Annunziata y la Piazza San Lorenzo. En estas zonas entrarán en vigor a partir de esta noche restricciones de acceso que, según reza una nota oficial del Ayuntamiento de Florencia, suponen “la prohibición de que las personas permanezcan de pie, salvo para hacer cola para acceder a los establecimientos públicos y comercios legítimamente abiertos respetando las distancias mínimas interpersonales, y salvo para estar presentes en la mesa en los espacios en uso de los establecimientos públicos que sirven comidas y bebidas; la posibilidad de cruzar únicamente para acceder a los establecimientos públicos y a los establecimientos comerciales legítimamente abiertos, así como a los domicilios particulares y a las oficinas públicas y privadas de la zona, y para la salida de la zona; la prohibición de consumir bebidas alcohólicas, salvo en el mostrador y en la mesa en los espacios en uso por los establecimientos públicos que sirven comidas y bebidas”.

En otras palabras: ¿quiere detenerse en la plaza de Santa Croce para contemplar la fachada de la basílica por la noche, o quiere detenerse en los detalles de las fuentes de Pietro Tacca en la plaza de la Santissima Annunziata sin que le pegue el sol abrasador durante el día? Esto ya no es posible los fines de semana: sólo se puede acceder a estas zonas para ir a comer al bar, o cruzarlas para ir a otro sitio. La infracción de las prohibiciones se castiga con una multa administrativa de 400 a 1.000 euros.

“Reglas claras para la habitabilidad de nuestras calles y plazas”, ha declarado la concejala de Seguridad , Benedetta Albanese, “con presencia de fuerzas policiales y controles generalizados en la zona. Con esta ordenanza queremos garantizar que todos puedan vivir los espacios públicos de forma segura, encontrando un equilibrio entre las distintas necesidades, empezando por la prevención sanitaria que aún está en curso y que implica la necesidad de evitar situaciones de contagio. Se trata de un gran compromiso por parte de la policía municipal y de las fuerzas del orden. Si todos respetamos las normas podremos conciliar la protección del derecho a la tranquilidad, la necesaria seguridad urbana y el derecho a vivir las plazas. Estas medidas tienen también por objeto comprobar la ”sostenibilidad“ de los flujos y pueden ser remodeladas, eventualmente atenuadas, en función de la respuesta”.

En las próximas horas, la Policía Municipal de Florencia definirá con sus propias medidas las medidas organizativas y los métodos operativos necesarios para aplicar plenamente esta ordenanza, según lo acordado en la mesa redonda técnica coordinada por el Questore de Florencia. Los empleados municipales y los voluntarios del sistema de protección civil, así como los vigilantes y el personal de las empresas externas que trabajan para la gestión de la movilidad de la ciudad, podrán ser utilizados para las actividades de instalación, así como de información y encaminamiento para facilitar el acceso o la salida de las personas. Por último, el ayuntamiento ha hecho saber que está trabajando en algunas iniciativas culturales en el parvis de la basílica de Santo Spirito, que se presentarán en los próximos días. Pero lo que es seguro es que esta ordenanza sólo suscitará nuevas protestas.

En Florencia, si no consumes en un bar, tienes prohibida la entrada a gran parte del centro histórico por la noche

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