En Carrara, las fuentes antiguas a veces cambian de color: la fuente de Vezzala, del siglo XVII, se vuelve azul.

Había sido una gran sorpresa para todos los habitantes de Carrara cuando, en abril de 2018, el artista callejero que firmaba como “AGIO / ODIO / AGRO” había repintado por completo la fuente Vezzala del siglo XVII, una antigua fuente del centro histórico de Carrara, justo fuera de la puerta Bozzo: la pared trasera del arco que alberga la fuente había adquirido un color rosa chocante, mientras que el nicho de la estatua se había vuelto verde lima. Aún hoy se desconocen los motivos del gesto del artista callejero: la hipótesis más plausible es que el artista actuó para salvar la fuente de la degradación, ya que el lugar, situado en una de las zonas más problemáticas del centro histórico, se había convertido en blanco de las incursiones de escritores y grafiteros que habían cubierto el monumento con diversos tipos de escritura.

En los últimos meses, sin embargo, los escritores habían vuelto a la acción, arruinando la obra de “AGIO / ODIO / AGRO” y cubriéndola de nuevo con escritos y pintadas. Así, en la primera semana de enero, la fuente volvió a cambiar de color: esta vez el nicho era azul claro, mientras que la pared se volvió azul ultramar, con muchas estrellas doradas en el centro, una especie de reinterpretación street art de la bóveda de la Capilla Scrovegni o, quizá una comparación más acertada, de la bóveda de Piermatteo d’Amelia en la “versión” del siglo XV de la Capilla Sixtina. Una obra que más tarde se cubrió con los mundialmente famosos frescos de Miguel Ángel. ¿Quiere el artista callejero enviar un mensaje? ¿Quizá está esperando a ser cubierto de nuevo, o quiere vengarse del poco conocido artista del siglo XV haciendo triunfar su azul y sus estrellas? No lo sabemos: mientras tanto, la ciudad vuelve a dividirse entre los que aprecian el gesto del artista callejero anónimo y los que desearían que la fuente de Vezzala se restaurara con colores más “apropiados” y cercanos a los originales. Mientras tanto, sólo podemos observar cómo, de vez en cuando, las fuentes de Carrara cambian de color.

En la imagen: a la izquierda la fuente de Vezzala tras la intervención de 2018 y a la derecha tras la intervención de este año.

En Carrara, las fuentes antiguas a veces cambian de color: la fuente de Vezzala, del siglo XVII, se vuelve azul.

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