¿El primer día del pase verde en Roma? Largas colas y molestias. Lo que dicen los guías

¿El primer día de pases verdes en museos y monumentos de Roma? Un desastre, según AGTA Associazione Guide Turistiche Abilitate (Asociación de Guías Turísticos Cualificados), que interviene sobre los inconvenientes que se han producido en toda Italia para acceder a los monumentos debido a la exigencia del pase verde. “Era previsible”, escriben los guías en una nota. Esta mañana, la nueva norma ha provocado colas larguísimas para acceder a los principales lugares turísticos públicos. En Roma, la cola para entrar en el Coliseo era de unos 45 minutos a primera hora de la mañana, pero se convirtió en hora y media para los que hicieron cola a las 11.30, mientras que a las 13.00 ya no se podía calcular porque era de 350 metros de largo, en dos carriles. Y hay que tener en cuenta que en el Coliseo sólo se puede entrar con reserva, que es por horario y que tiene su propio coste extra además de la entrada; así que hoy los visitantes, a pesar de haber hecho debidamente su reserva por internet y haber comprado previamente su entrada, se encontraron con colas de 45-90 minutos al sol sólo para entrar a una hora distinta de la prevista. En el Panteón, colas de 40-45 minutos. En Pompeya, lo mismo, de madrugada. Muy organizado en cambio el servicio en los Museos Vaticanos, donde las personas con reserva hicieron cola durante un total de 10 minutos".

“Lo que provocó la pérdida de tiempo con respecto al PRE-Pase Verde”, señalan los guías, “fue la absoluta ineptitud del personal encargado, la frecuencia de los contratiempos técnicos (dificultad de lectura de los QR según la fuente) que alargaron el tiempo de control, y la gente que exigía la entrada incluso sin el Pase Verde, muchos de ellos diciendo que no sabían que también servía para los monumentos”.

La presidenta de AGTA, Isabella Ruggiero, explica: “Por lo que hemos oído en la última semana en las cadenas de televisión y radio, casi constantemente centradas sólo en el Pase Verde para restaurantes, no nos sorprende. Desde luego, no ha habido ninguna campaña mediática sobre los monumentos. Y, por desgracia, la mayoría de los turistas, incluidos nuestros conciudadanos, no se informan acudiendo a los emplazamientos de los distintos monumentos. Pero... ¿hablamos de la contribución que ha hecho en esto el Ministerio de Cultura? Anoche entré en la página web del Ministerio de Cultura pensando que allí encontraría toda la información sobre la entrada a museos y sitios culturales (nótese que no son idénticas a las de entrada a Italia). ¿Qué encontré? En la página de inicio fluían fotos preciosas y noticias deslumbrantes sobre los sitios de la UNESCO, Parma como capital de la cultura, descubrimientos en Pompeya y mucho más, pero nada sobre la nueva norma en vigor a partir de hoy; consulté la sección de abajo y la de abajo otra vez, pero nada. Hace un rato he vuelto a la página y nada ha cambiado. No obstante, no nos extrañemos si cientos de visitantes bloquean las colas, gritando porque no se les permite entrar en los museos”.

“Las normativas”, prosigue el presidente de AGTA, “son muchas más de las que pensamos y no es fácil desentrañarlas según los distintos casos: hemos notado sobre todo una gran confusión entre los que sólo habían hecho el frotis, porque todos daban por sentado que podían entrar con el certificado expedido por el laboratorio, que en cambio no equivale a la Certificación Verde (la específica de 48 horas después de la impresión) y no tenían ni idea de cómo descargar el Pase Verde a partir del certificado del laboratorio. No hablemos de los italianos residentes y vacunados en el extranjero, para los que salió una Circular específica del Ministerio de Sanidad sólo el 4 de agosto y que casi ninguno de ellos ahora en Italia conoce”.

Según Ruggiero, es sobre todo la diferente aplicación de las normas lo que crea inconvenientes y problemas, especialmente para los operadores del sector. “Si las normas fueran realmente idénticas en todas partes, bastaría con aprendérselas bien. Incluso respecto a los lugares de aplicación hay una cierta interpretación personal: en las iglesias no se exige el Pase Verde, hasta el punto de que ni siquiera se ha introducido en San Pedro (la basílica más visitada por los turistas de todos los tiempos), pero en San Petronio, en Bolonia, ahora piden el Pase Verde a los visitantes que forman parte de grupos con guía, porque si entran solos se puede suponer que entran para rezar, pero si hay guía entonces no”.

Los guías de AGTA en Roma se han organizado incluso con un “boletín informativo” que circula vía Whatsapp entre sus miembros desde esta mañana para informar de la duración de las colas en los distintos monumentos de la capital, a raíz de la oleada “verde” en la radio. Ruggiero concluye: “Ya explicamos hace unos días en un artículo (https://www.finestresullarte.info/opinioni/perche-introdurre-green-pass-nei-musei-e-una-pessima-idea) las razones por las que creemos que en este momento la exigencia del Pase Verde también para los museos al aire libre y los parques arqueológicos no es una buena idea. Repetimos: no porque no estemos a favor de la Certificación Verde, al contrario, creemos firmemente en la necesidad de la vacunación, que es actualmente la única salida a la pandemia. Es sólo que el estado actual del Patrimonio Cultural en Italia no se lo puede permitir, porque carece del personal y la organización necesarios. Así que el Pase Verde supondrá grandes inconvenientes para los usuarios (turistas) y más cierres de secciones o de sitios enteros más pequeños. Personalmente, también me gustaría tener el Pase Verde en el transporte público. Los que aprueban de forma simplista la Certificación Verde en los museos no tienen ni idea del estado en que se encuentran la mayoría de los sitios italianos. En el Coliseo se ven hoy las colas, pero casi nadie se dará cuenta cuando cierren secciones individuales y otros monumentos menos famosos”.

En la foto: la cola para entrar en el Foro Romano esta mañana

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