El Coliseo cierra antes de tiempo por la visita de Vance, los turistas furiosos: protesta

La visita de la familia del Vicepresidente estadounidense J.D. Vance al Coliseo desencadenó una fuerte protesta entre los turistas, que se encontraron con que se les impedía el acceso al monumento debido a un cierre anticipado para permitir a Vance y su familia realizar su recorrido por el interior del Anfiteatro Flavio. La decisión, tomada por motivos de seguridad relacionados con la presencia de la familia Vance, causó polémica y descontento entre los visitantes, muchos de los cuales se quejaron de la insuficiente comunicación por parte de las autoridades.

Sin embargo, ya el pasado jueves, 17 de abril, el Parque Arqueológico del Coliseo había anunciado que ayer, sábado 19, las puertas del Anfiteatro cerrarían antes de tiempo: “Con motivo de la visita de un dignatario extranjero, prevista después de la hora normal de cierre del monumento”, rezaba el aviso, “la Questura de Roma ha ordenado el cierre anticipado del Coliseo a partir de las 18.00 horas del sábado 19 de abril de 2025. La última entrada será, por tanto, a las 17.00 horas. Se reembolsarán todas las entradas adquiridas entre las 17.00 y las 18.15 horas”. Un cierre anticipado, pues el Coliseo cierra normalmente a las 19h15. A los visitantes que habían reservado una visita en las franjas horarias posteriores se les había enviado un correo electrónico de cancelación, con toda la información sobre el reembolso. Además, se había informado a todos los operadores turísticos asociados del parque y a las asociaciones profesionales de guías turísticos.

A pesar de estas medidas, numerosos turistas acudieron a las puertas del Coliseo y las encontraron cerradas. Algunos expresaron su decepción pidiendo entrar de todos modos. Las protestas también fueron documentadas por vídeos colgados en las redes sociales, en los que se puede ver a grupos de visitantes quejándose de la imposibilidad de entrar en el recinto arqueológico.

La visita al Coliseo estaba prevista para la esposa del vicepresidente, Usha Vance, y sus tres hijos. J.D. Vance no asistió al acto: según el Corriere della Sera, lo evitó precisamente por las protestas de los turistas. Según el periódico de via Solferino, la familia Vance pasó el día visitando algunos de los principales lugares turísticos de Roma, como el Coliseo, el Foro Romano y el Palatino. Durante la visita, uno de los hijos de la pareja fue fotografiado con un casco de gladiador, comprado a un vendedor ambulante cerca del monumento.

La presencia de la familia Vance en Roma formaba parte de un viaje privado organizado con motivo de las vacaciones de Semana Santa. Según informa ANSA, el vicepresidente se reunió en el Vaticano con el cardenal Pietro Parolin, con quien trató temas como la paz, la libertad religiosa y la emigración. El encuentro se desarrolló en un ambiente cordial y representó un momento significativo en las relaciones entre Estados Unidos y la Santa Sede.

Sin embargo, las protestas de los turistas excluidos de la visita al Coliseo suscitaron dudas sobre la gestión de las comunicaciones por parte de las autoridades competentes. A pesar de los esfuerzos del Parque Arqueológico por informar a los visitantes, muchos de ellos afirmaron no haber recibido comunicación alguna sobre el cierre anticipado. Algunos expresaron su frustración por haber planeado su visita con mucha antelación, comprado entradas y organizado el viaje, para encontrarse con las puertas cerradas. Sobre todo porque el cierre se produjo durante el periodo de Semana Santa, cuando el Coliseo está tomado por asalto: al intentar reservar una nueva entrada esta mañana, la primera disponibilidad es para el miércoles 23 de abril. Y muchos de los turistas “rebotados” probablemente tenían otros planes: en esencia, muchos turistas, quizá incluso de otros continentes, tuvieron que renunciar a su sueño de visitar el Coliseo para permitir la visita de Vance.

El Parque Arqueológico del Coliseo reiteró que había seguido todos los procedimientos exigidos para situaciones de este tipo, subrayando la importancia de garantizar la seguridad de los visitantes y de las personalidades públicas presentes.

El asunto, sin embargo, ha tenido una amplia repercusión en los medios de comunicación italianos e internacionales, porque la cuestión es relevante y se refiere al equilibrio que hay que encontrar entre las exigencias de seguridad y el derecho de los turistas a acceder a lugares de interés cultural, teniendo en cuenta también que el turismo representa un componente fundamental de la economía italiana.

El Coliseo cierra antes de tiempo por la visita de Vance, los turistas furiosos: protesta

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