¿Quién tendrá razón en el IBAN-gate que se desarrolla en torno al asunto del turista que había pintarrajeado el Coliseo este verano? La historia es bien conocida: un joven inglés, el 23 de junio, había dañado una pared de ladrillo grabando su nombre y el de su novia con un objeto punzante. Captado en un vídeo difundido en las redes sociales, fue identificado: el turista se arrepintió entonces sinceramente y tomó medidas para pagar los daños (cuantificados en unos mil euros), quejándose sin embargo de que nadie, a pesar de sus recordatorios, le comunicaba el IBAN. Sin embargo, la respuesta del Parque Arqueológico del Coliseo llegó poco después, señalando que había actuado con prontitud tras recibir la solicitud.
El instituto, tras denunciar el hecho ante la Comandancia de Carabinieri de Piazza Venezia, afirma no haber recibido ninguna otra comunicación oficial relativa al proceso penal por parte de la autoridad judicial, ni de los órganos policiales delegados. En concreto, “no se ha recibido ninguna solicitud”, subraya el parque, "del cuerpo de policía local de Roma Capitale, en el que, según informaciones de prensa, se ha delegado la adquisición del Iban del parque.
No fue hasta el pasado 3 de octubre, señala el Coliseo, cuando, por primera vez en muchos meses, se envió un correo electrónico (“por otra parte, no a la dirección oficial del Parque”, precisan), que contenía una solicitud de la abogada Maria Valentina Miceli para adquirir el IBAN del parque arqueológico del Coliseo, con el fin de permitir al cliente definir su situación jurídica mediante el pago del importe relativo a los gastos de restauración. El lunes 9 de octubre, el Parque Arqueológico del Coliseo remitió toda la información necesaria para llegar a un acuerdo.
“En cuanto al fondo”, concluye el instituto en una nota, “cabe señalar que el Parque Arqueológico del Coliseo, reafirmando su compromiso con la preservación del patrimonio cultural, siempre ha activado una colaboración máxima y oportuna con las autoridades judiciales y las fuerzas policiales con el fin de contrarrestar y reprimir cualquier acto contra el patrimonio cultural y garantizar que quienes causan daños deben responder personalmente de su conducta”.
Desfiguración del Coliseo, respuesta a un turista que pide el IBAN: "nosotros se lo proporcionamos" |
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