Tras el excepcional descubrimiento de Como hace unas semanas, se ha encontrado otro tesoro de monedas romanas antiguas en Lombardía. El descubrimiento tuvo lugar en el yacimiento arqueológico de Bedriacum, cerca de Calvatone (provincia de Cremona), y el mérito se debe a un equipo de arqueólogos de la Universidad de Milán, dirigido por Maria Teresa Grassi, profesora de arqueología clásica del Departamento de Patrimonio Cultural y Medioambiental. Las monedas descubiertas, aproximadamente ciento cuarenta, datan probablemente de la época del emperador Galieno, que reinó entre 253 y 268. Estaban escondidas en el fondo de un vaso de cerámica y son “antoninianas”, monedas acuñadas a partir del imperio de Caracalla (198 a 217): tenían el valor de un denario doble y debían acuñarse en plata, aunque a menudo sólo estaban recubiertas.
Probablemente el propietario las había escondido con la idea de volver a por ellas más adelante. El periodo del que datan fue una época de profunda crisis, y las pruebas contemporáneas encontradas en el mismo asentamiento donde se hallaron las monedas indican que por aquel entonces la aldea de Bedriacum ya había caído en la ruina. En particular, la ubicación del tesoro en el que se encontró el vaso indica claramente, según los arqueólogos, que esa parte de la aldea ya había sido abandonada. Se trata de indicios importantes porque, según los arqueólogos, permiten anticipar la fecha del abandono del asentamiento, que hasta ahora se creía que había tenido lugar entre los siglos IV y V.
Las monedas entran ahora en el laboratorio para ser restauradas por la Superintendencia de Cremona, Lodi y Mantua. El descubrimiento ha sido posible gracias a una campaña de excavación de la Universidad de Milán financiada por la propia universidad, el municipio de Calvatone y la Región de Lombardía.
En la foto: las monedas encontradas. Foto Crédito Universidad de Milán
Cremona, descubierto un tesoro de monedas romanas antiguas |
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