Nuevos espacios en las Galerías Uffizi de Florencia, con también nuevos descubrimientos: durante las obras de recuperación y restauración de algunas salas delala oeste de la galería (la más cercana al Ponte Vecchio), han resurgido dos importantes frescos del siglo XVII y otras pinturas del siglo XVIII. Se trata de dos retratos de los Grandes Duques de Toscana: el primer fresco es un clypeus que representa al Gran Duque Fernando I, mientras que el segundo, el más grande e intacto, es un retrato de cuerpo entero y tamaño natural del joven Cosme II de Médicis, con las alegorías de Florencia y Siena, que debe atribuirse a la esfera del pintor Bernardino Poccetti (Florencia, 1548 - 1612). El fresco superpuesto ha resurgido bajo el enlucido de una habitación.
En la sala contigua a aquella en la que se hallaron los frescos de los dos Médicis, han salido a la luz decoraciones ejecutadas en el siglo XVIII, probablemente durante el reinado de Pietro Leopoldo de Lorena. Se trata de motivos vegetales que adornan las paredes y el techo, en cuyo centro está pintada al fresco una panoplia con fasces de lictor. Estos espacios, situados en la planta baja de la Galería, formarán parte de la entrada del museo y serán visibles para el público.
En total, se han restaurado casi 2000 metros cuadrados, hasta ahora inaccesibles: un total de ocho salas en el ala oeste (409 metros cuadrados) y 14 salas en la planta baja del ala este (699 metros cuadrados), así como otras 21 (684 metros cuadrados) en el sótano, en el marco de las obras para la construcción de los Nuovi Uffizi realizadas por la Superintendencia junto con las Galerías, a cargo de la arquitecta Chiara Laura Tettamanti (directora de las obras) y del arquitecto Francesco Fortino (director único del proyecto). Los nuevos espacios disponibles suponen también una reorganización del acceso al complejo Vasari. De hecho, a partir de la reapertura, los visitantes entrarán por el lado más cercano al Arno: las entradas se dispensarán en las salas del ala Ponente, donde también se instalará un nuevo guardarropa para grupos; la entrada al museo estará enfrente, en la planta baja del ala Levante (aquí habrá varios puntos de recepción y un segundo guardarropa). En el sótano del ala este, donde se encuentran las salas técnicas y los vestuarios del personal de la Galería, también se han restaurado las antiguas caballerizas de los Médicis. Una vez adquirida la entrada, los visitantes saldrán para acceder al museo por el lado opuesto de la plaza, en la planta baja del ala este, con control de visitantes mediante detector de metales y servicios de recepción como la distribución de audioguías y guardarropas adicionales. Paralelamente, se iniciarán las obras de restauración de las salas que hasta ahora albergaban las taquillas y la librería , y dentro de un año aproximadamente se destinarán a albergar estatuaria clásica. Mientras tanto, los visitantes accederán a la escalera monumental a través de un itinerario provisional, diseñado para permitir la realización de las obras. En esta fase provisional, los visitantes con problemas de movilidad podrán acceder al ala oeste, junto al auditorio Vasari: desde aquí, llegarán a la segunda planta mediante ascensores. En la Sala de los Caballeros se ha instalado una nueva y espaciosa librería, que sustituye a la anterior colección caótica de puestos de venta y mercancías. La salida del museo sigue situada en la Piazza Del Grano.
“En los últimos cinco años”, afirma el director de los Uffizi, Eike D. Schmidt, “se han realizado enormes progresos en la remodelación de los espacios, progresos que permiten ahora un acceso más racional y seguro al museo, y una organización más eficaz de los puntos de recepción. Pronto, cuando se restauren las salas de la planta baja del ala este, la visita a los Uffizi podrá tener una gloriosa introducción: las salas de la planta baja expondrán de hecho estatuaria clásica, con obras procedentes de los depósitos y otras recientemente adquiridas”.
“Otro hito en las obras de los Nuovi Uffizi que hoy ven la entrega a las Galerías de las salas destinadas a la recepción de los visitantes, además de las salas técnicas y de servicio”, dice Andrea Pessina, Superintendente de Arqueología, Bellas Artes y Paisaje de la Ciudad Metropolitana de Florencia y las provincias de Pistoia y Prato. “Esto representa el fruto de la colaboración institucional de la más alta calidad y profesionalidad llevada a cabo en los últimos años por la Superintendencia y las Galerías Uffizi con la contribución, también, de estudiosos y especialistas de diferentes disciplinas. La obra fue también una oportunidad para profundizar en la investigación arqueológica de la zona. Las investigaciones estratigráficas que precedieron a las obras de consolidación y restauración, según un programa acordado por arqueólogos y arquitectos de la Superintendencia y de las Galerías, permitieron iniciar un estudio histórico-topográfico de esta parte de Florencia con referencia a los riquísimos depósitos de cerámica, vidrio, metales y huesos de animales recuperados, así como numerosos enterramientos, restos de los cimientos de numerosos edificios,dotados de sótanos donde se almacenaban mercancías y alimentos, con escaleras, pozos y vertederos, hoy visibles en los sótanos restaurados, utilizados desde la época de los Médicis como establos para los animales pertenecientes a cada Magistratura. La obra de los Nuovi Uffizi, tras la necesaria reorganización impuesta por la emergencia sanitaria, avanza hacia la fase final del proyecto”.
En la foto: el fresco con el joven Cosimo II
Uffizi, los frescos del siglo XVII resurgen de unas obras que revolucionarán la entrada |
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