La Slovenská Národná Galéria: un museo en varios emplazamientos para contar toda la historia del arte eslovaco

Un museo relativamente joven, pero con una rica historia: la Slovenská Národná Galéria, la Galería Nacional Eslovaca, el museo más importante del país (también joven, ya que se independizó en 1993), que cuenta con cinco sedes: el Palacio Esterházy de Bratislava, el Castillo de Zvolen, la mansión de Strážky, la Galería Ludovít Fulla de Ružomberok y el Molino Schaubmar de Pezinok. Todos ellos forman parte de una única entidad, fundada oficialmente el 29 de julio de 1948 por el Consejo de Eslovaquia, cuando el país aún formaba parte de Checoslovaquia. Relativamente reciente para Europa, pero fruto de las ambiciones eslovacas tras la guerra", afirma el museo. Desde sus inicios, la galería se fijó el objetivo de documentar ampliamente la cultura artística del siglo XX: y este sigue siendo el principal objetivo de la Slovenská Národná Galéria, que hoy cuenta con una colección de más de 70.000 objetos, que abarca tanto las artes tradicionales (como la pintura y la escultura) como formas de expresión más recientes, desde el diseño y la fotografía hasta la escenografía y los nuevos medios de comunicación.

Las actividades de la Galería comenzaron a pleno rendimiento en 1950, cuando se estableció el primer núcleo del museo: unas pocas salas en las que se exponían unos 500 objetos, ubicadas en un edificio del siglo XVII a orillas del Danubio, el “Vodných kasární” (“Cuartel del Agua”), que anteriormente se había utilizado con fines militares. El edificio fue reformado según los planos de los arquitectos Florians y Rozmány y el 9 de mayo de 1955 las puertas de la galería se abrieron al público por primera vez. Sin embargo, al poco tiempo, la dirección de la Galería se dio cuenta de que el espacio ya no era suficiente para albergar las crecientes colecciones, por lo que en 1963 se encargó a la Asociación de Arquitectos Eslovacos el diseño de un nuevo edificio en Bratislava: el nuevo edificio, segunda sede de la Galería, se inauguró el 1 de marzo de 1977. Fue un gran logro para Eslovaquia, ya que el nuevo edificio de la Galería Nacional fue el primer edificio moderno diseñado en el país con fines puramente culturales, y sigue siendo el mayor edificio museístico de Eslovaquia. Ese mismo año también abrió sus puertas la colección de artes aplicadas del castillo de Zvolen.

Posteriormente, en 1986, se inauguró la colección de arquitectura, una de las más singulares de su género, y en 1991 se inició un importante proyecto de renovación del Vodných kasární, que duró hasta 1994. En 1997, el castillo de Strážky abrió sus puertas al público como una sede más de la Galería, con una exposición de escultura eslovaca del siglo XX, mientras que en noviembre del mismo año se inauguró también el molino de Schaubmar. Así llegamos a principios de la década de 2000, en la que se tomó la decisión de renovar el Palacio Esterházy, que entretanto se había convertido en una sede más de la Slovenská Národná Galéria: el palacio del siglo XIX de los aristócratas húngaros es hoy la sede principal de las exposiciones temporales, pero también alberga parte de las colecciones permanentes.

El Vodných kasární. Foto SNG

Palacio Esterházy. Foto SNG

Castillo de Zvolen. Foto SNG

La villa de Strážky. Foto SNG

La Galería Ludovít Fulla en Ružomberok

El molino Schaubmar en Pezinok

Las colecciones se centran principalmente en el arte moderno y contemporáneo, pero no faltan interesantes cuadros antiguos. Los dos núcleos principales son la pintura moderna y contemporánea y la gráfica. Estas dos colecciones se iniciaron inmediatamente después de la fundación del museo mediante transferencias de instituciones estatales y con compras a artistas y particulares, gracias sobre todo a la labor de los dos conservadores Karol Vaculík y ?udmila Peterajová que, en los años cincuenta y sesenta, enriquecieron la colección de la Slovenská Národná Galéria intentando documentar lo mejor posible la evolución de las artes en el país. Una operación de adquisición que continúa en la actualidad. La colección de pintura cuenta con unos 5.000 cuadros, mientras que la sección gráfica tiene 20.000 obras de grabados y dibujos (principalmente de artistas eslovacos, pero también hay una amplia sección internacional con grabados japoneses y obras de artistas como Pablo Picasso, Emil Nolde, Max Klinger, Oskar Kokoschka, Fernand Léger y muchos otros). La colección de escultura es otro de los buques insignia de la Slovenská Národná Galéria, con representación de los principales autores eslovacos (en la sección de colecciones del sitio web oficial se muestran las principales adquisiciones de cada núcleo de la colección).

Otra particularidad de la Slovenská Národná Galéria es su colección de arte naïf: se trata de una vertiente especialmente de moda en Europa en los años 50, época en la que el instituto también quiso iniciar una operación de documentación sobre las formas artísticas de artistas outsiders, que no ha decaído con el tiempo y hoy alberga unas 2.000 obras de artistas eslovacos e internacionales. Entre las obras maestras de la Sección Antigua, procedente de un traslado de obras del Museo Histórico de Eslovaquia entre 1950 y 1953, se encuentran también varias obras de maestros italianos, de Giulio Cesare Procaccini a Cecco del Caravaggio, de Francesco Vanni a Pietro Liberi, de Bonifacio de’ Pitati a Antonio Balestra. Entre los artistas no italianos figuran Simon Vouet, Hans von Aachen y Franz Xaver Messerschmidt. También es muy interesante la colección de arte gótico eslovaco, con unas 200 piezas procedentes de iglesias de la zona: es la mayor colección de arte medieval del país. También son significativas las colecciones de cerámica, vidrio y joyería, y sobre todo la de arquitectura, uno de los principales núcleos de la colección de la Slovenská Národná Galéria: es la más reciente (se fundó en 1986, con la primera compra de obras) y pretende investigar la evolución de la arquitectura en los siglos XIX y XX. Hay dibujos, planos, estudios que documentan las fases de trabajo de muchos de los edificios más importantes del país.

Por último, la vocación investigadora del museo queda patente no sólo por el hecho de que las colecciones siguen creciendo, sino también por la presencia de una biblioteca especializada, fundada en 1949 y especializada sobre todo en publicaciones sobre arte y museos, que se amplía constantemente, y por un archivo especializado en artistas y arquitectos, que contiene inventarios, textos, fotografías y material con el que se ha podido reconstruir la actividad de muchos artistas eslovacos. Un museo en el que se encierra, pues, toda la historia del arte de Eslovaquia.

La Slovenská Národná Galéria: un museo en varios emplazamientos para contar toda la historia del arte eslovaco

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