La Colección Peggy Guggenheim y el CNR elaboran un plan de conservación preventiva para salvaguardar las obras


La Peggy Guggenheim Collection y el CNR colaboran en un plan de conservación preventiva para salvaguardar las obras de la colección. Se analizan las condiciones ambientales, la calidad del aire y el flujo de visitantes.

Monitorización de las condiciones ambientales, análisis de la calidad del aire y estudio del flujo de visitantes son las principales acciones que caracterizan el estudio realizado por el Consejo Nacional de Investigación (CNR) gracias al Instituto de Ciencias de los Bienes Culturales (Ispc) y al Instituto de Aplicaciones del Cálculo “Mauro Picone” (Iac) en colaboración con el departamento de conservación de la Peggy Guggenheim Collection de Venecia dentro de las salas del histórico recinto del Palazzo Venier dei Leoni.

El pasado mes de julio, la campaña de análisis de la calidad del aire, realizada en el interior de algunas de las salas y vitrinas donde se conservan las obras, y las mediciones sobre la ocupación de las salas, dieron el pistoletazo de salida a la colaboración entre la Colección Peggy Guggenheim y el CNR. Gracias a los conocimientos científicos aportados por el CNR, será posible establecer un plan de conservación preventiva para salvaguardar el patrimonio artístico reunido por la mecenas Peggy Guggenheim.



Hasta la fecha, se ha completado el estudio de los factores antrópicos relacionados con la dinámica de los flujos de visitantes, realizado por el CNR-IAC, en el que se ha analizado el número de visitantes por sala, el tiempo de permanencia ante determinadas obras y los itinerarios seguidos. El estudio ha revelado algunos patrones no visibles a primera vista, que sugieren cómo optimizar el recorrido de los visitantes para mejorar la usabilidad del museo. El proyecto también incluye el control de las condiciones ambientales y la calidad del aire en algunas salas, realizado por el CNR-Ispc, con el fin de estudiar los principales contaminantes gaseosos, orgánicos e inorgánicos mediante muestreadores pasivos. La campaña actualmente en curso para determinar los principales contaminantes gaseosos afecta a las salas en las que se exponen algunas de las obras maestras del museo, como Paisaje con manchas rojas, nº 2, de Vasily Kandinsky, de 1913, y La mujer de la luna, de Jackson Pollock, de 1942, así como a las vitrinas que albergan las esculturas Dinamismo de un caballo corriendo + casas, de Umberto Boccioni, de 1915, y Cabeza de concha, de Jean (Hans) Arp, de hacia 1933.

La información obtenida de la observación de los gases contaminantes se correlacionará con los resultados del seguimiento continuo de los parámetros ambientales, es decir, la temperatura, la humedad relativa y la concentración de CO2, así como el número de visitantes de las propias salas. De este modo será posible caracterizar los ambientes, con el fin de establecer un plan de conservación preventiva para salvaguardar las obras de la colección.

Foto de Matteo De Fina

La Colección Peggy Guggenheim y el CNR elaboran un plan de conservación preventiva para salvaguardar las obras
La Colección Peggy Guggenheim y el CNR elaboran un plan de conservación preventiva para salvaguardar las obras


Advertencia: la traducción al español del artículo original en italiano se ha realizado mediante herramientas automáticas. Nos comprometemos a revisar todos los artículos, pero no garantizamos la ausencia total de imprecisiones en la traducción debidas al programa. Puede encontrar el original haciendo clic en el botón ITA. Si encuentra algún error, por favor contáctenos.