El nuevo Museo Arqueológico Nacional del Valle del Camonica abre sus puertas: esta es la nueva ubicación

El Museo Arqueológico Nacional del Valle Camonica se presenta al público con una nueva sede: un bonito regalo por el 40 cumpleaños del instituto, que abrió sus puertas el 5 de julio de 1981. El nuevo museo llega tres años después de que en otoño de 2018 comenzaran las obras en Cividate Camuno (Brescia), la antigua Civitas Camunnorum, uno de los principales centros del Valle Camonica.

El nuevo museo se encuentra en el centro histórico de Cividate Camuno, en un antiguo convento, posteriormente sede del Vivero de Empresas, justo enfrente de la iglesia parroquial, en el corazón de la Civitas romana y del asentamiento medieval, como demuestran los restos hallados en el patio. Es un emplazamiento que pretende concretar con evidencias visuales la estratificación histórica del territorio, reafirmando su continuidad, haciendo del museo el centro vivo de una arqueología difusa, que lo contextualiza y explica.

El proyecto arquitectónico, por su parte, debía abordar la refuncionalización de un edificio inexpresivo, manipulado y no concebido con fines expositivos. “A escala arquitectónica”, explica Ilaria Volta, del estudio de arquitectura Volta de Brescia, que se encargó del diseño arquitectónico, museográfico y expositivo, “la actuación del proyecto supuso la transformación de una distribución paratáctica de las salas, oficinas accesibles desde recorridos comunes dispuestos en anillo en plantas superpuestas, en un recorrido secuencial en el que el visitante es acompañado en una narración continua a través de las secciones del museo. La trama no es cronológica sino que el planteamiento es temático, acorde con el proyecto científico. Cada sección se caracteriza por un color, que también se repite en el diseño de la exposición, traduciendo las intenciones del proyecto científico a un lenguaje nuevo y acogedor. Los colores de las secciones no son arbitrarios, pertenecen a la paleta de Le Corbusier de 1931, con algunas incursiones en la del 59 (blanco, negro y dorado)”.

Al color también se le confía el diálogo entre el clasicismo antiguo y el moderno, en una narración sin fisuras. Los colores de las secciones armonizan, según la gramática del teclado cromático de Le Corbusier, en acordes tonales con colores bisagra, que corresponden a las conjunciones en el fraseo de la narración. Las vitrinas de la instalación están dispuestas como cajas “desembaladas” en un acto de sorpresa y descubrimiento. Sobre una cinta de color, los objetos expuestos se revelan y se cuentan en su singularidad.

En el nuevo Museo Arqueológico del Valle Camonica se exponen objetos de época romana hallados en Cividate Camuno y sus alrededores: materiales de asentamientos tradicionales, una rica colección epigráfica, elementos arquitectónicos y escultóricos monumentales, refinados frescos de la domus y ricos ajuares funerarios de la necrópolis, con colgantes y amuletos, también de oro y plata, cargados de valor simbólico. Desde una larga abertura acristalada, los que están fuera, en la plaza, pueden ver una de las obras maestras del museo, la estatua de Minerva, procedente del santuario de Spinera, en Breno. Esta elección pretende subrayar que no hay cesura entre “dentro y fuera”, sino una ósmosis continua, también enfatizada por el área arqueológica de Porta Castello en el patio interior del edificio. Esta zona, con una cubierta de desplazamiento horizontal que vuelve a proponer la ciudad antigua a través de coloridos gráficos, no forma parte del museo, sino que está concebida como un lugar bisagra, que vive en relación con el museo, la cafetería y los espacios recreativos contiguos.

“El nuevo museo, con referencias cruzadas también a los lugares vecinos, contextualiza los hallazgos de Valle Camonica en el marco más amplio del arco alpino, posicionándose así como museo de la romanización de los Alpes”, explica Serena Solano, responsable arqueológica de la Soprintendenza Archeologia Belle Arti e Paesaggio para las provincias de Bérgamo y Brescia, directora de los Parques Romanos de Valle Camonica y comisaria científica del proyecto. “El proyecto científico pretendía relatar el encuentro entre culturas, concretamente entre camunos y romanos, ilustrando los cambios y novedades junto con los aspectos de superposición y continuidad. El fenómeno de la romanización de un valle alpino se declina en sus múltiples aspectos, desde la transformación del territorio, a la explotación de los recursos, los cultos, los asentamientos, los aspectos de la vida cotidiana, los espacios públicos y el ámbito funerario. El itinerario pretende guiar al visitante en el descubrimiento del Valle Camonica romano con un lenguaje que utiliza dos registros, uno más didáctico y científico y otro más inmediato, marcado por el colorido y las distintas secciones, con momentos dedicados también al descubrimiento y al juego para estimular la curiosidad y el deseo de conocimiento, especialmente de los más pequeños, a través de la participación activa y la diversión”.

El Museo Arqueológico Nacional del Valle Camonica es también el punto de partida y de llegada de la ruta romana del Valle Camonica, que en Cividate Camuno tiene como otras paradas el espacio del foro parcialmente visible en la zona arqueológica de Via Palazzo y el Parque Arqueológico del teatro y el anfiteatro, para desembocar después en el Parque Arqueológico del Santuario de Minerva, de donde procede la imponente escultura de la diosa. Nacido de la voluntad y el esfuerzo del municipio y de la dirección regional de Museos de Lombardía, no habría visto la luz sin las intenciones compartidas de la Soprintendenza Archeologia Belle Arti e Paesaggio de las provincias de Bérgamo y Brescia y las aportaciones de la Región de Lombardía y de la Comunidad de Montaña del Valle Camonica, y sobre todo sin la pasión de los numerosos ciudadanos que han seguido de diversas formas su realización, sintiéndolo inmediatamente como propio.

“El nuevo museo, situado en el centro histórico, con un recorrido racionalizado y ampliado respecto al antiguo emplazamiento, responde a múltiples necesidades”, explica Emanuela Daffra, Directora Regional de Museos de Lombardía del Ministerio de Cultura. “En primer lugar, dar espacio a un patrimonio, el surgido de las excavaciones, que está en constante crecimiento; después, actualizar los recorridos con respecto al perfeccionamiento de los estudios y los nuevos horizontes de la disciplina; y por último, pero no por ello menos importante, acercarse a un público que tiene hábitos visuales, estilos y modelos de conocimiento completamente distintos a los de los años ochenta y que está en constante evolución”. Los espacios expositivos no son neutros y son el bajo continuo que guía el diálogo entre objetos y visitantes".

El museo abre de martes a viernes de 8.00 a 14.00 h., sábados y domingos de 8.00 a 17.00 h. La entrada es gratuita.

El nuevo Museo Arqueológico Nacional del Valle del Camonica abre sus puertas: esta es la nueva ubicación

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