Cartuja de Florencia: la Capilla de las Mujeres reabre tras dos años de obras

La restauración de la Capilla de las Mujeres, la pequeña capilla situada al borde del patio de entrada de la Cartuja de Florencia, ha concluido. Sin duda se construyó para permitir a las mujeres asistir a la celebración eucarística o simplemente rezar. De hecho, las mujeres podían acceder a la Cartuja hasta este pequeño patio, pero no podían ir más allá: la Orden de los Cartujos era, desde sus orígenes, una formación monástica estrictamente de clausura. Una Orden enteramente dedicada a la oración y a la vida eremítica, aunque con un estilo de vida comunitario.

El retorno de la Capilla de las Mujeres a la oración tuvo lugar al final de un complejo y delicado proyecto de restauración que duró dos años y fue posible gracias a la Fondazione CR Firenze, que destinó 220.000 euros a las obras. La restauración afectó a todo el edificio, lo que requirió una revisión completa de la cubierta y de las cuatro fachadas, que, dadas sus diferentes características y acabados, fueron analizadas individualmente. A continuación, se restauraron los interiores del edificio, empezando por la propia sala de la iglesia, con su decoración pictórica y su llamativo artesonado. Además de estas operaciones, también se llevaron a cabo trabajos de adaptación y mejora de los sistemas, tanto eléctricos como térmicos. Para completar las obras, pronto comenzará la restauración de las habitaciones de los niveles inferiores, intervención que requerirá un nuevo proyecto.

Historia de la Capilla de las Mujeres

En un documento de 1665, se hace referencia a ella como la nueva capilla de la plaza. También en la vista impresa, grabada por Alessandro Cecchini hacia finales del siglo XVII, se la describe como Sacellum novum S. Laurentii (Nuevo Oratorio de San Lorenzo). Su arquitecto es desconocido. Se trata de un edificio muy lineal desde el punto de vista arquitectónico. Y fue necesario construir altas subestructuras (que también se están restaurando) debido a la pronunciada pendiente de la montaña. La capilla estaba dedicada a San Lorenzo -martirizado en Roma en el siglo III-, al igual que la iglesia principal de la Cartuja.

En la Guía de la Cartuja de 1861, se indica un cuadro de San Lorenzo de Giacinto Butteri en el altar, pero sin duda fue pintado por Giacinto Botti, pintor florentino (1603-1679). Curiosamente, en los documentos de la época relativos a la Cartuja (Archivo de Estado de Florencia, Conventi soppressi 51, filza nº 12), se indica que el pintor es Giacinto Botteghi, que ya había pintado otros lienzos para la Cartuja en aquella época. La Guía de Giuseppe Bacchi de 1930 nos informa de que la Capilla fue destruida por un incendio en 1914, pero ese mismo año fue reconstruida con un interior airoso y elegantemente decorado en estilo del siglo XVI: es el mismo que puede admirarse tras la restauración. La Guía añade que anteriormente contenía un cuadro de Botteghi (o más bien, Botti) y un San Nicolás de Rossi, que evidentemente fueron destruidos durante el incendio. Rossi es identificado como Giovanni Paolo Roffi, pintor mediocre y hermano de un prior de la Certosa, que trabajó aquí en la década de 1760.

Cuando se reconstruyó la capilla en 1914, es probable que se dedicara a la Virgen en honor de las mujeres que podían visitarla libremente. No se sabe si las dos estatuas de terracota de los nichos de la fachada, que representan a San Bruno, fundador de los monjes cartujos, y a San Lorenzo, son de la misma época que la construcción original. Más bien parece que son un poco posteriores, quizá del siglo XVIII, o puede que fueran reconstruidas tras el incendio porque parecen bien conservadas. Hoy, este histórico lugar de culto reabre sus puertas al público.

La ceremonia de inauguración se ha celebrado esta mañana en presencia del cardenal Giuseppe Betori (arzobispo de Florencia), Luigi Salvadori (presidente de la Fondazione CR Firenze), Andrea Pessina (Soprintendente Archeologia, Belle Arti e Paesaggio per la Città metropolitana de Florencia y las provincias de Pistoia y Prato), Don Carmelo Mezzasalma (superior de la Comunidad de San Leolino), Giovanni Leoncini (historiador del arte e historiador de la Certosa), Valerio Tesi (arquitecto responsable del proyecto por parte de la Superintendencia) y Antonio Fara (arquitecto responsable de la dirección de obra por parte de la Archidiócesis).

“Estoy muy contento de poder celebrar la conclusión de la restauración de la Capilla de las Mujeres en el complejo monumental de la Cartuja de Florencia”, afirma el Cardenal Giuseppe Betori, Arzobispo de Florencia , “en particular por la hermosa y constructiva colaboración que ha llevado a su realización y en la que han participado activamente la Superintendencia de Florencia, la Archidiócesis de Florencia y la Comunidad de San Leolino, con la generosa e indispensable ayuda de la Fondazione Cassa di Risparmio di Firenze”. La Capilla de las Mujeres está dedicada a la Santísima Virgen María, figura central de este tiempo de Adviento, y es un símbolo de acogida para todo el complejo. Es muy significativo que hayamos podido restaurarla para dar una señal más del papel que la Cartuja pretende desempeñar hoy como centro de hospitalidad y promoción espiritual y cultural para la ciudad y fuera de ella".

“Nuestra contribución a la recuperación de esta hermosa capilla”, afirma el Presidente de la Fondazione CR Firenze, Luigi Salvadori, “se inscribe en la importante línea de intervenciones destinadas a la conservación y valorización de nuestro rico patrimonio artístico”. Recuerdo, refiriéndome sólo a las últimas obras, la reciente restauración de la decoración interior de la iglesia de San Giorgio e Santo Spirito alla Costa, la restauración de la Porta dei Cornacchini de nuestra Catedral y la consolidación del Seminario Maggiore. En este contexto, y para apoyar la valiosa labor de los restauradores, gravemente afectados por la pandemia, hemos promovido también la convocatoria Firenze Restaura que, en sus tres ediciones y con una dotación total de 754.000 euros, ha permitido realizar hasta 66 proyectos en Florencia y en los municipios limítrofes. La convocatoria se dirige expresamente a la conservación y restauración de las iglesias y de los preciosos objetos que en ellas se conservan y que, también por su valor histórico-artístico, no deben perderse en absoluto".

Para más información: Certosa di Firenze, Via della Certosa 1, Galluzzo, Florencia (dirección: https://goo.gl/maps/W9tRUyvVBjiUuFuv5) Teléfono +39 055 2047729 www.certosadifirenze.it certosanews@gmail.com

La Certosa abre todos los días (excepto lunes y domingos por la mañana) 10-12 | 15-18 Entrada 5 euros; el precio también incluye una visita guiada a la Certosa todos los días -excepto lunes y domingos por la mañana- a las 10, 11, 15, 16 (y 17 hasta finales de octubre de 2021).

Cartuja de Florencia: la Capilla de las Mujeres reabre tras dos años de obras

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