En enero de 2023, un cuadro atribuido recientemente a Agnolo Bronzino saldrá a subasta en Nueva York, en Sotheby’s, incluido entre los Maestros Antiguos, estimado entre tres y cinco millones de dólares. Según la famosa casa de subastas, las obras de Bronzino raramente se encuentran en el mercado abierto: la última se vendió en subasta en Christie’s en 2015 por más de nueve millones de dólares; se trataba de Retrato de un joven con un libro. Y sobre la atribución del cuadro en Sotheby’s, Elisabeth Lobkowicz, vicepresidenta de Sotheby’s y especialista en pintura antigua, declaró que “descubrimientos de este calibre se producen una vez en la vida”.
La obra, titulada Retrato de un hombre mirando a la izquierda con una pluma y una hoja de papel, representa a un joven vestido de negro sentado a una mesa: su mano izquierda señala una inscripción, en latín, en una hoja de papel, mientras que en la derecha sostiene una pluma.
El cuadro perteneció a la rica coleccionista de arte judía Ilse Hesselberger, que se vio obligada a vender su finca de Múnich a raíz de las leyes raciales. Incluida su colección de arte, que incluía el cuadro en cuestión, que compró en 1927. Bajo la presión de los oficiales nazis, la convencieron para que contribuyera junto con otras personas a la construcción de un campo en Milbertshofen que más tarde se utilizaría para enviar a los judíos a campos de concentración y exterminio. A la mujer le aseguraron que le perdonarían la vida si pagaba, pero todo era mentira, porque en noviembre de 1941, pocas semanas después de pagar la cantidad de dinero necesaria para financiar el campo, la metieron en el primer tren con destino a la Lituania ocupada por los alemanes, donde ella y muchos otros judíos fueron asesinados por los nazis cinco días después.
La obra había sido incluida en la colección del Führermuseum, un museo que Hitler había planeado para su ciudad natal de Linz, pero el proyecto nunca llegó a realizarse. Después de la guerra, las fuerzas estadounidenses encontraron el cuadro en el interior de una mina de sal austriaca y lo entregaron posteriormente a las autoridades alemanas. En las últimas décadas ha estado en posesión de la República Federal de Alemania. Durante mucho tiempo permaneció en un edificio federal de Bonn, pero a principios de 2022 fue trasladado a un edificio de Berlín utilizado por la Sociedad Parlamentaria Alemana.
Hace varios años, David J. Rowland, abogado neoyorquino especializado en la recuperación de obras de arte saqueadas por los nazis, supo de la existencia de un cuadro en Alemania que podría haber pertenecido a los herederos de Ilse Hesselberger. A principios de 2022, el retrato fue devuelto a los herederos, que a su vez lo entregaron a Sotheby’s para su subasta. Ahora el retrato se venderá para apoyar causas judías y asistencia médica.
Atribuido a lo largo del tiempo a varios pintores italianos, el cuadro se ha atribuido ahora a Bronzino, que probablemente lo pintó hacia 1527. “Inmediatamente sospechamos que estábamos ante algo mucho más significativo”, dijo Elizabeth Lobkowicz, especialista en arte antiguo de Sotheby’s. Ella y otro especialista, Chris Apostle, enviaron entonces una fotografía del cuadro a Carlo Falciani, profesor de Historia del Arte en la Accademia di Belle Arti de Florencia y experto en retratos florentinos, quien concluyó que la obra era de Bronzino. Falciani señaló que las manos estaban dibujadas del mismo modo que en los primeros retratos de Bronzino y que “la luz clara y la forma estereométrica de la figura en el espacio son exactamente las de Bronzino”.
La Dra. Elizabeth Pilliod, directora del programa de historia del arte de la Universidad de Rutgers-Camden, a quien se mostró el cuadro, también opina que es uno de los primeros de Bronzino. Según un comunicado de Sotheby’s, el cuadro será catalogado con una atribución a Agnolo Bronzino por el conservador florentino Carlo Falciani en un artículo que se publicará el próximo año. En el texto inédito, Falciani investiga la posibilidad de que la presente obra fuera realizada originalmente como un autorretrato del artista italiano.
Imagen: Retrato de un joven con pluma y hoja de papel, atribuido a Bronzino. Cortesía de Sotheby’s.
Sotheby's subasta un Retrato atribuido a Bronzino. El cuadro pertenecía a un coleccionista judío |
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