Las subastas de Christie's y Sotheby's en Nueva York animan el mercado

Las subastas de arte moderno y contemporáneo de Christie ’s y Sotheby’s tuvieron lugar en Nueva York entre el 11 y el 13 de mayo , una cita importante para comprobar la salud de un mercado que parece responder con vigor a las propuestas de las dos casas de subastas, rememorando dinámicas anteriores a la era pandémica.

Christie’s: Arte de los siglos^XX y^XXI

La primera novedad reside en el nombre utilizado por Christie’s para los segmentos de la subasta."Arteimpresionista y moderno" y"Arte de posguerra y contemporáneo“ fueron sustituidos por ” Siglo XX" y " Siglo XXI". La razón de esta elección, según Christie’s, se debe a la evolución de un mercado cada vez más fluido que abarca varios géneros, más allá de cualquier tipo de catalogación. Un hecho que permite establecer vínculos más suaves entre artistas de distintas corrientes y épocas, debido también al desarrollo de la práctica del coleccionismo cruzado, un fenómeno que ha dominado las estrategias comerciales de las casas de subastas en el último año.

Denominaciones aparte, la venta nocturna de Christie’s 21st Century se inaugura el 11 de mayo en Nueva York, presentando un catálogo centrado en gran medida en propuestas de artistas jóvenes, en línea con el nuevo enfoque destinado a promover las últimas tendencias artísticas.

El primer resultado que destaca es In this Case, una obra de Jean-Michel Basquiat. Creada en 1983, In This Case tiene dimensiones de museo (198x187 cm) y se caracteriza por un enérgico uso del color. La obra cambió de manos por 93.105.000 dólares, algo menos que el récord establecido por Sotheby’s Nueva York en 2017, cuando el empresario japonés Yusaku Maezawa compró un cuadro de Basquiat por 110.487.500 dólares.

El resto de adjudicaciones destacadas corresponden a obras de artistas jóvenes. Empezando por Jonas Wood, su Two Tables with Floral Pattern (2013) encontró nuevo dueño por 6.510.000 dólares, más del triple de la estimación inicial, mientras que Lynette Yiadom-Boakye, recién llegada de una reciente exposición individual en la Tate Modern de Londres, alcanzó los 1.950.000 dólares, muy por encima de la estimación inicial. Llama la atención el cuadro de Nina Chanel Abney Sin título (xxxxxx) (2015), que representa a dos policías deteniendo a un hombre obligado a arrodillarse, una escena que recuerda dramáticamente a los acontecimientos actuales. La obra alcanza un precio cercano al millón de dólares.

La enérgica Anxious Red Painting December^18th (2020) de Rashid Johnson, tras una larga batalla de pujas, superó la barrera de los 2.000.000 de dólares, dejando atrás la base de subasta de 200.000 dólares. La recaudación de la obra, donada por el artista, se destinará a apoyar a CORE (Community Organised Relief Effort), una asociación que lucha contra el efecto de la pandemia del Covid-19 en las poblaciones más pobres.

También hizo una donación el artista Dana Schutz, la venta de su Fisherman (2021) apoyará la conservación permanente de 2,5 millones de acres de tierra en asociación con Art to Acres, una organización sin ánimo de lucro dirigida por artistas para la protección de la biodiversidad. Fisherman, que partía de 400.000 dólares, encontró un nuevo propietario por la impresionante cifra de 2.970.000 dólares.

También obtuvieron excelentes resultados 9 Cryptopunks (2017), de Alex da Corte, Salaman Toor y Larva Labs, que se vendió por casi 17.000.000 $, lo que confirma que el mercado de NFT sigue captando el interés de los coleccionistas.

Menos brillantes fueron los resultados de artistas con mercados bien establecidos como Gerhard Richter y Cyndy Sherman, cuyas obras, aunque adjudicadas, no alcanzaron la estimación baja. Christopher Wool defraudó las expectativas, su Hole (1992) cambió de manos por 3.630.000 dólares, justo por encima de la base, mientras que su otra obra OH OH permaneció sin vender.

El 13 de mayo fue el turno de la venta nocturna del siglo XX. La estrategia de Christie’s para esta sección de nuevo cuño consiste en reunir a maestros en la frontera entre lo moderno y lo contemporáneo, como Picasso, Matisse y Giacometti, con hitos de lo contemporáneo más puro, como Rothko, Mitchell y Boetti. La técnica parece funcionar, al menos a tenor del resultado final, que roza los 500 millones de dólares en ventas.

Una de las adjudicaciones más importantes de la noche fue la de Femmeassise près d’une fenêtre (Marie-Thérèse) (1932), de Pablo Picasso, que se vendió por 103.410.000 dólares, un resultado asombroso al que siguieron las ventas de las otras dos obras del artista español en el catálogo, Tête de femme (1940) y Femme dans un fauteuil (1941). Siguiendo en la década de 1900, Waterloo Bridge, effet de brouillard (1903) de Claude Monet se vendió por 48.450.000 dólares. También están presentes dos obras de Georges Seurat, pintor que, aunque perteneciente al siglo XIX, tuvo un estilo crucial para el desarrollo de las corrientes pictóricas del siglo XX y, probablemente por ello, incluido en el catálogo. Paysage et personnages (La jupe rose) y Le Saint-Cyrien de 1884 cambian de manos por 13.184.000 y 4.350.000 dólares respectivamente, superando en ambos casos la estimación máxima.

En la segunda mitad del siglo XX, Alighiero Boetti alcanzó un nuevo récord. El tapiz monumental Sottrazione (1982) alcanzó los 4.590.000 dólares, casi el doble de la estimación alta, una cifra que confirma el gran interés del mercado internacional por el artista turinés.

Las dos obras de Willem de Kooning también cambiaron de manos, pero fue East Hampton VI (1977) la que encendió especialmente la venta, pasando de 4.000.000 $ a 10.436.000 $. También fue muy bien la esculturaParent II (1971) de Barbara Hepworth , en el centro de una disputa de 2.500.000 dólares que la llevó a encontrar un nuevo propietario por 7.110.000 dólares.

La espléndida obra de Mark Rothko Sin título (1970) en tonos azules alcanzó un precio de martillo de 38.145.000 $, mientras que el retrato de un jugador de tenis de Wayne Thiebaud de 1968 titulado Toweling Off atrajo mucho interés. Partiendo de una base de subasta de 1.200.000 dólares, alcanzó los 8.489.500 dólares. Otro resultado notable lo obtuvo el artista chino Zao Wou-Ki , cuya obra
10.2.81 (1981) duplicó los ingresos de la subasta hasta 3.030.000 dólares.

Jean-Michel Basquiat, In This Case (1983) Cortesía de Christie’s

Jonas Wood, Dos mesas con motivos florales (2013) Cortesía de Christie’s

Rashid Johnson, Anxious Red Painting December 18th (2020) Por cortesía de Christie’s

Pablo Picasso, Femme assise près d’une fenêtre (Marie-Thérèse) (1932) Cortesía de Christie’s

12 de mayo: venta nocturna de Sotheby’s

El 12 de mayo, le tocó a Sotheby’s abrir los bailes empezando por la colección privada de la Sra. John L. Marion, filántropa y presidenta de Sotheby’s de 1975 a 1994. En este primer grupo de lotes se lograron cuatro resultados importantes: Rocker (1958), de Kenneth Noland, alcanzó 4.255.000 dólares; Elvis 2 Times (1963), de Andy Warhol , 37.032.000 dólares; Abstraktes Bild (1992), de Gerhard Richter, 23.244.000 dólares, y Africa I (1961-1962), de Larry Rivers, pulverizó su estimación baja de 350.000 a 2.077.000 dólares.

Una vez concluida la primera ronda, la subasta nocturna de arte contemporáneo entró en su apogeo.

Había mucha expectación por Versus Medici, creada en 1982 por Jean-Michel Basquiat, obra que representa el plato fuerte de la velada. A pesar de las grandes expectativas, la obra no despegó como debería, de hecho se estableció en 50.820.000 dólares, alcanzando la estimación más alta.

La historia fue diferente para Love is in the Air (2005), del artista callejero Banksy, que fue el centro de una batalla que derribó su estimación baja de 3.000.000 $ para alcanzar casi 13.000.000 $.

Un resultado interesante obtuvo el retrato de David Bowie (2012) de la artista Elizabeth Peyton que cambió de manos por 2.077.000 dólares muy por encima de su estimación baja, así como No Title (Deeper above all...) (2011) que alcanzó los 2.682.000 dólares. La obra es de Raymond Pettibon, artista conocido por haber creado portadas de discos icónicas como la del álbum Goo de Sonic Youth, banda de culto de la escena alternativa neoyorquina de los años 1980/90.

El artista de origen pakistaní Salman Toor está presente con una obra de 2019, The Arrival, que pulveriza la estimación inicial fijada en 60.000 dólares y encuentra un nuevo propietario por 867.000 dólares.

Récord paraGeorge Washington Carver’s Crossing the Delaware: Page from an American History Textbook (1975), de Robert Colescott , una obra que representa una intervención satírica del artista en la historia estadounidense. El cuadro vuela a un precio de subasta de 15.315.900 dólares.

El arremolinado Untitled (Rome) (1970) de Cy Twombly alcanzó los 41.628.000 dólares, mientras que la obra de neón luminiscente Life, Death, Love, Hate, Pleasure, Pain (1983) de Bruce Nauman se acercó a los 9 millones de dólares, dejando atrás el suelo de la subasta.

El último capítulo de la subasta de Sotheby’s estuvo dedicado al arte impresionista y moderno. El plato fuerte de la sesión fue la maravillosa Le Bassin aux nymphéas (1917-19) de Claude Monet, obra icónica del artista francés, un imán que atrajo la atención de los pujadores, que compitieron por la obra maestra hasta la puja final de 70.353.000 dólares.

Otras obras maestras impresionistas se alternaron en el transcurso de la subasta, desde Degas hasta Cezanne. Cabe destacar Femme nue couchée (1892), de Pierre-Auguste Renoir, que se vendió por 4.255.000 dólares, más del triple de su estimación mínima. El ruido, sin embargo, lo hacen obras pertenecientes a otras corrientes. Diego Rivera, por ejemplo, el pintor mexicano también famoso por ser el marido de Frida Kahlo, está presente con Retrato de Columba Domínguez de Fernández (1950), una obra que alcanza los 7.445.250 dólares. Lo mismo ocurre con Egon Schiele, presente con Sichentkleidendes Mädchen (1911) y Kauernder weiblicher Akt (1917), ambas adjudicadas por encima de la estimación alta. Sorpresa para la obra Autoportrait au scorpion (1938), del pintor Lenor Fini, que alcanzó 2.319.000 dólares a partir de una base de subasta de 600.000 dólares.

Jean-Michel Basquiat, Versus Medici (1982) Cortesía de Sotheby’s

Banksy, Love is in the Air (2005) Cortesía de Sotheby’s

Robert Colescott, George Washington Carver Crossing the Delaware (1975) Cortesía de Sotheby’s

Claude Monet, Le Bassin aux nymphéas (1917-19) Cortesía de Sotheby’s

Diego Rivera, Retrato de Columba Domínguez de Fernández (1950) Cortesía de Sotheby’s

Resumen de resultados

De esta subasta de tres días surgen los datos de un arte joven que gana cada vez más espacio, reclamando su propia posición dentro de la escena contemporánea. Los jóvenes artistas están mostrando su identidad, posicionándose muchas veces sobre temas difíciles y tristemente actuales y volcando en sus obras las tensiones del tiempo en que viven, consiguiendo sacar una pintura enérgica que capta la atención del mercado.

Un mercado que muestra sangre nueva, una señal de confianza que empieza a hacerse sentir tras un periodo de profunda incertidumbre.

Por supuesto, como hemos visto, las obras maestras consagradas, desdeel Impresionismo hasta los maestros contemporáneos, encuentran un buen punto de apoyo en inversiones seguras que, a pesar de ser muy caras, animan dinámicas vivas y agitadas.

Las subastas de Christie's y Sotheby's en Nueva York animan el mercado

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