Del 18 de septiembre de 2020 al 6 de enero de 2021, Perugia acogerá la exposición Rafael en Umbría y su legado en la Academia, organizada en la sede de la Fundación CariPerugia Arte, en el Palazzo Baldeschi, con motivo de las celebraciones del 500 aniversario de la muerte de Rafael Sanzio (Urbino, 1483 - Roma, 1520). Se trata de una exposición a medio camino entre lo real y lo virtual: Rafael llegará, de hecho, en versión digital (los visitantes podrán incluso verle mientras discute con su padre y con su maestro Pietro Vannucci, conocido como Perugino), gracias a las reproducciones digitales de todas sus obras relacionadas con Umbría, que hoy se conservan en los museos más importantes del mundo. Pero también está la parte “real”: las obras de grandes maestros que recogen su legado artístico.
De hecho, la exposición se divide en dos secciones: la primera, comisariada por Francesco Federico Mancini, con la dirección de la Fundación CariPerugia Arte y la contribución de la Superintendencia de Archivos de Umbría y las Marcas y el Archivo Estatal de Perugia; la segunda, con el subtítulo L’Accademia di Perugia e Raffaello: de Minardi y Wicar al siglo XX, realizada por la Academia de Bellas Artes “Pietro Vannucci” de Perugia y comisariada por Alessandra Migliorati, Stefania Petrillo y Saverio Ricci, con la coordinación de Giovanni Manuali, conservador de los Bienes de la Academia. Rafael tuvo una relación muy estrecha con Umbría: en Perugia, el artista pasó más o menos seis años de su vida, de 1500 a 1505 aproximadamente. Perugia y Città di Castello representan los lugares de Umbría donde Rafael dio sus primeros pasos y llevó a cabo una parte importante de su formación artística, que comenzó cuando su padre Giovanni Santi pidió a Pietro Vannucci que aceptara a su hijo en su taller para perfeccionar el arte de la pintura.
Las dos obras de Rafael que aún se conservan en Umbría son el Gonfalone della Trinità (Estandarte de la Trinidad ) en la Pinacoteca Municipal de Città di Castello y el fresco de San Severo en la capilla del mismo nombre anexa a la iglesia camaldulense, hoy propiedad del Ayuntamiento de Perugia. Todas las obras umbras de Rafael (se conocen doce en total) se reúnen ahora en el Palacio Baldeschi en una experiencia que permite a los visitantes explorar hasta los detalles, acompañados de información leída por un narrador. Desde el Retablo de San Nicolás de Tolentino - (hoy reducido a fragmentos y prácticamente reconstruido gracias a algunos dibujos autógrafos de Rafael y a una copia del siglo XVIII), pasando por el Gonfalone de la Trinidad, la Crucifixión de Mond, los Desposorios de la Virgen (comparados con la obra homónima de Perugino), el Retablo Colonna, el Retablo Oddi, el Retablo Ansidei, la Madonna del Libro (más conocida como Madonna Conestabile), la conocida como la Madonna Conestabile), el fresco de San Severo, la Deposizione Baglioni, la Madonna con el Niño y los Santos (el famoso retablo también conocido como la Madonna di Foligno), y la Coronación de la Virgen, obra de Giulio Romano y Giovan Francesco Penni basada en un diseño de Rafael.
En otra sala del palacio, también gracias a la tecnología, a partir de famosos retratos unos actores con trajes renacentistas escenificarán al pintor de Urbino a través de dos diálogos: el primero (ambientado en 1494), es una conversación en la que un Rafael de once años es llevado por su padre Giovanni Santi al taller de Perugino, a quien pide que lo acoja entre sus alumnos. La segunda, en la que Rafael tiene 21 años, es una comparación con Perugino que gira en torno a las dos obras maestras que representan los Desposorios de la Virgen. Acompañan al visitante en este viaje tres obras del Renacimiento umbro pertenecientes a la colección de la Fondazione Cassa di Risparmio di Perugia y creadas por tres maestros que inspiraron a Rafael y con los que se relacionó cuando llegó a Umbría: la Virgen con el Niño y dos querubines de Perugino, la Virgen con el Niño y San Juan Bautista de Pintoricchio y San Esteban apedreado de Luca Signorelli.
La segunda sección de la exposición, titulada L’Accademia di Perugia e Raffaello: da Minardi e Wicar al Novecento (La Academia de Perugia y Rafael: de Minardi y Wicar al siglo XX), se divide a su vez en cuatro partes temáticas y cronológicas que pretenden mostrar y demostrar cómo, a lo largo del siglo XIX, Perugia, gracias a la presencia de Tommaso Minardi, fue epicentro junto con Roma de la corriente purista y del retorno al arte de inspiración religiosa. De hecho, la Academia fue un vivero de pintores de talento que reelaboraron la lección de los antiguos maestros, Perugino y Rafael en primer lugar, actualizando sus modelos y su estilo, interpretando ese gusto neorrenacentista, muy apreciado también por los coleccionistas internacionales y el mercado de la época. Así, tras una antología de autorretratos de los artistas que se inspiraron en Rafael, la exposición se despliega en tres secciones dedicadas respectivamente a El culto a Rafael entre clasicismo y purismo, con obras de la escuela de Baldassare Orsini, Tommaso Minardi y Wicar; Rafael ’docet’: la copia e l’invenzione, que traza la larga temporada de la Academia de Perugia que floreció sobre el fértil legado dejado por Tommaso Minardi; Raffaello nelle arti applicate e nella decorazione murale, que presenta al público una variada y sorprendente selección de obras de principios del siglo XIX a principios del siglo XX.
La exposición irá acompañada de un catálogo especial “COVID free”, realizado por Fabrizio Fabbri Editore con un innovador sistema de impresión certificado capaz de reducir la carga bacteriana y algunos de los principales agentes microbianos y fúngicos, desarrollado con la imprenta Graphic Masters en colaboración con tres laboratorios de análisis especializados. Para toda la información sobre la exposición, visite la página web de la Fundación CariPerugia Arte.
Imagen: Pinturicchio, Virgen con el Niño y San Juan
Una exposición en Perugia sobre Rafael y Umbría, a la vez digital y... real |
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