Del 21 de octubre al 3 de noviembre de 2024, la Sala d’Arme del Palazzo Vecchio de Florencia acogerá la exposición El último sello: el hábito de San Francisco y un viaje inmersivo desde el Monte della Verna hasta Florencia. Organizada por el Ayuntamiento de Florencia y comisariada por MUS.E en colaboración con el Comité Franciscano del Octavo Centenario de los Estigmas de San Francisco, la exposición pone de relieve el profundo vínculo histórico y espiritual entre el santuario del Alverna y la ciudad de Florencia, a través de un itinerario que combina historia, arte y religión.
En la Sala d’Arme se proyecta un vídeo inmersivo, creado por el director Francesco Cacchiani, que recorre los momentos más destacados de la historia del santuario y la relación entre Florencia y el Alverna, donde San Francisco recibió los estigmas en septiembre de 1224. La pieza central de la exposición será la presentación del precioso hábito de San Francisco, que ha regresado a Florencia tras haber permanecido aquí durante unos quinientos años. El santuario franciscano situado en el monte Alverna, inmerso en los bosques del Casentino, tiene fuertes lazos con Florencia. Fue aquí donde Francisco, durante un periodo de oración silenciosa, recibió los estigmas en 1224, las marcas del crucifijo en sus manos, pies y costado. En 1432, el Papa Eugenio IV confió el convento a la protección de la Comuna de Florencia, reforzando así un vínculo que sigue vivo hoy en día. El hábito de San Francisco, que vuelve a Florencia para la ocasión después de 23 años (se vistió por primera vez en 1503 y se guardó primero en la iglesia de San Salvatore al Monte alle Croci y luego en la iglesia de Ognissanti, hasta su regreso al Alverna en 2001), no es un hábito monástico típico, sino una prenda de lana basta, similar a la que llevaban los pobres y los campesinos, a los que Francisco quería estar cerca.
Además de la exposición principal, se organizarán conferencias y mesas redondas para explorar temas históricos, artísticos y religiosos relacionados con San Francisco, la ciudad de Florencia y el convento del Alverna. El primer encuentro, previsto para el pasado miércoles 23 de octubre, estuvo dedicado a Los estigmas de San Francisco: acontecimiento religioso e iconografía del siglo XIII. Los ponentes fueron Fray Dario Chiapetti y Fray Mario Panconi, ambos pertenecientes a la Orden de los Hermanos Menores, con la moderación de Fray Maurizio Pietro Faggioni, de la Pontificia Universidad Antonianum de Roma. El viernes 25 de octubre tuvo lugar un debate sobre la arquitectura y el arte franciscanos, con especial atención al Convento del Alverna. El encuentro, titulado Il Convento della Verna. Architettura e arte francescana, contó con la participación de Stefano Bertocci, de la Universidad de Florencia, y Anna Guarducci, de la Universidad de Siena, moderados por Carlo Francini, del Ayuntamiento de Florencia. La tercera cita, prevista para el martes 29 de octubre a las 18.00 horas, estará dedicada a Los alcaldes de Florencia, la urgencia de la paz y la verdadera Europa. Giorgio La Pira y Piero Bargellini en el Alverna. Se hablará de la relación que estas figuras centrales de la historia florentina tuvieron con el convento casentino. La alcaldesa de Florencia, Sara Funaro, Patrizia Giunti, de la Fundación Giorgio La Pira, e Isabella Gagliardi, de la Fundación Piero Bargellini, participarán en la mesa redonda, moderada por el periodista Duccio Moschella, de La Nazione. El miércoles 30 de octubre, por la mañana, habrá una reunión a puerta cerrada dedicada a la Via di Francesco en Toscana, la ruta que conecta Florencia con el Monte della Verna. Roberta Fabbrini, coordinadora del proyecto, presentará la aplicación Experiencia Francesco, basada en la encíclica Laudato si’ del Papa Francisco. En la mesa de trabajo participarán los 26 alcaldes de los municipios implicados, junto con Eugenio Giani, Presidente de la Región de Toscana, y Jacopo Vicini, Consejero de Turismo de Florencia. Por último, el 30 de octubre tendrá lugar el acto de clausura, titulado El Alverna, Florencia y los Médicis, que explorará el vínculo histórico entre el Alverna, la ciudad y la familia Médicis. Los ponentes serán Nicoletta Baldini, Roberto Boddi, del Museo della Verna, y Claudia Tripodi, de la Deputazione di storia patria, en diálogo con Valentina Zucchi, del MUS.E.
“Florencia, la comunidad franciscana y el Alverna han tenido siempre un intenso e indisoluble vínculo histórico, ideal y espiritual que esta exposición quiere recrear y revivir aquí, en el Palazzo Vecchio, gracias a un itinerario inmersivo y a la exposición del precioso hábito del santo”, declara la alcaldesa Sara Funaro. “El mensaje de San Francisco, de armonía, paz, amor a los hombres y a la naturaleza, se encuentra en las grandes iniciativas que Florencia ha puesto en marcha en el mundo, pensemos en las Conferencias de las Ciudades y de la Paz, que propiciaron el diálogo y el encuentro de líderes y gobernantes de muchos países en conflicto entre sí. La exposición y los diversos eventos colaterales profundizarán esta relación especial entre Florencia y el Alverna en el signo de San Francisco, una relación que ha atravesado los siglos y que sigue siendo hoy fuente de inspiración y guía para nuestra ciudad”.
“La experiencia del Alverna, custodiada por la ciudad de Florencia a lo largo de los siglos, es una palabra de curación y de esperanza para todos los hombres”, explica el hermano Matteo Brena, secretario del Comité franciscano para las celebraciones del VIII Centenario de los Estigmas. “Gracias a esta interacción entre el comité franciscano y el municipio de Florencia, hoy se entrega de nuevo al mundo y contribuirá sin duda a reavivar, en este tiempo marcado por las guerras y la incertidumbre, el deseo de vivir e inculcar los valores de paz, encuentro y respeto por todas las criaturas tan queridos por Francisco de Asís”.
“El vínculo de la ciudad de Florencia con el santuario del Alverna tiene raíces muy antiguas”, explica Valentina Zucchi, MUS.E. “En 1432, el Papa Eugenio IV puso el lugar bajo la protección de la Comuna de Florencia, sancionando así el vínculo con la montaña sagrada; desde entonces, todas las formas de gobierno de la ciudad -desde la república al gran ducado, hasta hoy- han prestado especial atención a este lugar. Ochocientos años después de los estigmas de San Francisco, volver a prestar atención a estos aspectos nos permite captar rasgos importantes de la historia y el arte del monasterio, que todavía pueden inspirar a cada uno de nosotros hacia un compromiso civil tejido de humanidad”.
Una exposición en el Palazzo Vecchio muestra el precioso hábito de San Francisco |
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