Tommaso Bonaventura rememora la RDA antes de la caída del Muro de Berlín con una exposición sobre Begrüssungsgeld

Tommaso Bonaventura - 100 marcos - Berlín 2019 es un proyecto artístico del fotógrafo Tommaso Bonaventura (Roma, 1969), desarrollado en colaboración con la comisaria Elisa Del Prete, con motivo del trigésimo aniversario de la caída del Muro de Berlín (9 de noviembre de 1989). La exposición, en tres etapas (del 30 de octubre de 2019 al 6 de enero de 2020 en Turín en CAMERA - Centro Italiano per la Fotografia, Project Room Museo del Risparmio; del 9 de noviembre de 2019 al 26 de enero de 2020 en Trento, en la Fondazione Museo storico del Trentino, Le Gallerie; del 18 de enero de 2020 al 22 de marzo de 2020 en San Vito al Tagliamento, en el CRAF - Centro Ricerca e Archiviazione della Fotografia, Chiesa di San Lorenzo) propone la historia del Begrüssungsgeld, el dinero de bienvenida que desde 1970 hasta diciembre de 1989 recibían los ciudadanos de la RDA cuando entraban por primera vez en Alemania Occidental. Este acontecimiento ofrece una pista para cuestionar un cambio de época desde un punto de observación que privilegia las historias privadas y familiares, restituyéndolas a través de una doble narrativa: fotográfica y videográfica.

La simple pregunta “¿Recuerda cómo gastó su Begrüssungsgeld?” planteada a una muestra de alemanes de la antigua RDA de diferentes generaciones, entrevistados durante 2018 y 2019, fue el punto de partida de un viaje a la memoria, aún hoy poco compartida, de estas personas que experimentaron un cambio total, desde un punto de vista material, laboral, social y económico, así como político.

Si bien la caída del Muro de Berlín sentó las bases de un nuevo orden político y geográfico mundial al marcar el final de la Guerra Fría, la reunificación de Alemania Oriental y Occidental sigue siendo un fenómeno complejo y poco debatido en sus aspectos más profundos. A menudo resuelto de forma simplista como la coronación de un anhelo de libertad, el cruce de la frontera física que coincide simbólicamente con el derribo del muro conlleva inevitablemente la necesidad de cruzar también una frontera ideológica.

El 9 de noviembre de 1989 no sólo cayó el Muro de Berlín, sino que todo un país cambió: la parte que se reencontraba con sus orígenes sufrió una inevitable metamorfosis y una forma de vivir, pensar, comportarse, vestir y gastar se desvaneció rápidamente. En muy poco tiempo, la República Democrática Alemana desaparece de la imaginación y la memoria. Casi 17 millones de personas se encuentran de repente inmersas en una nueva forma de vida, en la que ya no rigen las reglas que habían aprendido hasta entonces. La transformación es brusca. El nuevo alfabeto de Occidente, sus colores, sus olores, sus políticas económicas y sociales se imponen en las políticas gubernamentales y en la vida cotidiana de la gente, y lo que eran dos comunidades distintas se encuentran viviendo juntas.

Tommaso Bonaventura comenta: “Me interesaba abrir un diálogo con personas, a menudo de mi generación, que de repente habían experimentado una transformación tan radical de sus vidas, que tuvieron que reinventar una nueva existencia con nuevos códigos, nuevas reglas, que a menudo habían luchado contra la dictadura en su país, pero que no pensaban que la verían desaparecer de la noche a la mañana”.

El resultado de la investigación será un relato fotográfico que, entrelazado con la narración de estas biografías, pretende restituir un Berlín contemporáneo hecho de rostros, lugares e historias que no se han dado por descontados, símbolo de uno de los acontecimientos más significativos de la historia reciente, aún vivo y presente en el tejido urbano y social de la ciudad. De hecho, la investigación se centró en Berlín como emblema de este cambio, pero también como ciudad en la que persiste de algún modo la presencia física y “mental” del muro, que tanto marcó la experiencia de la gente.

“En este sentido, la exposición”, afirma Elisa Del Prete, “es un proyecto que también abre una mirada al contexto sociopolítico actual, con la alternancia de nuevas ideologías y la difícil puesta a prueba de los procesos de absorción e integración entre comunidades. No se trata aquí de contar la historia ni de sacar conclusiones de ella, sino de posicionarse ante ella, o más bien dentro de ella, permaneciendo inmerso en ella, tratando de arrojar lo extraíble. En este sentido, la fotografía es preciosa porque va a contar y a construir nuevas fuentes directas para la historia contemporánea y, en particular, para esa historia material que se sitúa en los márgenes de la Gran Historia”.

Tommaso Bonaventura (Roma, 1969), licenciado en Literatura, se dedica a la fotografía desde 1992. Sus trabajos han aparecido en los principales periódicos internacionales y han recibido varios galardones, como el World Press Photo, el Premio Sony y el Premio Ponchielli. En 2005 publicó Le vie della fede (ed. Gribaudo), dedicado a las grandes peregrinaciones del cristianismo en Europa. Desde 2006 ha vivido varios años en China, donde ha realizado varios proyectos, entre ellos Beijing in and out, Real Woman Photo Shop y If I Were Mao. Sus obras han sido expuestas en diversos festivales y museos como Paris Photo, PAC, NoorDeerlicht Photofestival, Supermarket Art Fair, Zephir, Triennale Bovisa, Officine Fotografiche. De 2011 a 2015 trabajó en el proyecto “Corpi di Reato, un archeologia visiva dei fenomeni mafiosi nell’Italia contemporanea” cuyo fragmento Immediate Surroundings fue seleccionado y expuesto en la Bienal de Arquitectura de Venecia de 2014 y desde 2016 forma parte de la colección permanente del MAXXI, Museo nazionale delle arti del XXI secolo, Roma. En 2017 fue invitado a Fotografia Europea, donde expuso el proyecto Fondo.

Elisa Del Prete (Bolonia, 1978) trabaja en la producción y el comisariado de proyectos artísticos que implican a la esfera pública. Se licenció en Historia del Arte con una tesis sobre la influencia de Aby Warburg en Italia, (publicada en Aby Warburg e la cultura italiana, 2009). En 2006 abrió Nosadella.due (www.nosadelladue.com), un programa de residencia para artistas y comisarios en Bolonia (en 2012 publicó una crónica en la Revista 2007-2011). En 2008 y 2011 comisarió la sección de artes visuales del Gender Bender Festival, en 2012 realizó en el MAMbo la primera exposición individual de la artista sudafricana Bridget Baker, dedicándose a la investigación de la historia colonial italiana, en 2014 y 2015 fue codirectora de Archivio Aperto, exposición dedicada al cine amateur. Escribe para doppiozero.com, para el que ha publicado recientemente un ensayo sobre William Kentridge.

Fuente: comunicado de prensa

Tommaso Bonaventura rememora la RDA antes de la caída del Muro de Berlín con una exposición sobre Begrüssungsgeld

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