Milán, una exposición explora al joven Boccioni

Del 5 de marzo al 5 de mayo de 2021, la Galleria Bottegantica de Milán presenta la exposición Il giovane Boccioni (El joven Boccioni): muchas exposiciones han investigado la figura y el arte de Umberto Boccioni en las últimas décadas, pero la etapa juvenil y formativa del artista ha sido hasta ahora poco contada.

La exposición, comisariada por Virginia Baradel, pretende presentar una cuidada selección de las obras de Boccioni realizadas entre 1901 y 1909, años en los que el pintor de 20 años afianzó su vocación artística a través de sus estudios en Roma, Padua, Venecia y Milán y de su importante estancia en París en 1906 y su viaje a Rusia. En las obras de este periodo se puede reconocer la influencia de diferentes corrientes figurativas europeas y un interés por la tradición clásica y renacentista. Son obras a través de las cuales Boccioni experimenta, especialmente con la producción gráfica.

Se expondrán varios dibujos de su periodo de aprendizaje. Un núcleo de obras, de fuerte impronta escolástica, que se remonta a la época en que fue alumno de Giacomo Balla y asistió a las escuelas de dibujo pictórico y de desnudo de Roma, está flanqueado por otro, más copioso y diversificado, que se remonta a los años inmediatamente posteriores, en los que el trazo adquiere confianza para plasmar precisas visiones arquitectónicas, curiosos retratos, casi rayanos en la caricatura, y figuras humanas de extrema síntesis formal. Los ejemplares del museo también pertenecen a este periodo de aprendizaje.

A continuación, la exposición se centrará en las pinturas al temple comerciales que Boccioni pintó en estos años por motivos sobre todo económicos. El afán por aprender y perfeccionar sus habilidades artísticas también caracteriza el periodo veneciano del artista, durante el cual experimentó con técnicas de grabado bajo la dirección del pintor Alessandro Zezzos.

La exposición concluye con el traslado de Boccioni a Milán en septiembre de 1907. Su interés por las obras de Giovanni Segantini, Carlo Fornara y Gaetano Previati, a quienes había tenido ocasión de admirar unos meses antes en la Bienal de Venecia, orientó al joven hacia la búsqueda de un estilo capaz de conciliar la modernidad positivista con laidealidad en el campo de la ilustración y el cartelismo. La producción pictórica contemporánea encuentra su expresión en pequeñas vistas de paisajes lombardos que demuestran una superación de la textura impresionista aún presente en los lienzos de la época veneciana.

Entre las obras expuestas se encuentran Paesaggio lombardo (Paisaje l ombardo) y La madre malata (La madre enferma ) de 1908; Il lutto (El luto ) constituye el resultado más desgarrador del interludio simbolista del pintor entre 1908 y 1910. También se exponen los bocetos para el cartel de la Exposición de Pintura y Escultura promovida por la Famiglia Artistica de Brunate (mayo-junio de 1909): una síntesis de los diferentes estilos que Boccioni había adquirido hasta entonces, desde el Divisionismo hasta los ecos del Modernismo.

En la foto: Umberto Boccioni, La madre, detalle (1912; óleo sobre lienzo, 52 x 35 cm; Piacenza, Galleria Ricci Oddi).

Milán, una exposición explora al joven Boccioni

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