For My Best Family es el nuevo proyecto expositivo concebido por la artista Meriem Bennani y encargado por la Fondazione Prada. Combinando una nueva instalación site-specific con una película artística codirigida con Orian Barki, For My Best Family explora formas de estar juntos en contextos sociopolíticos representándolos de forma pública o íntima. Este proyecto es el más ambicioso que ha realizado Bennani en términos de complejidad, tamaño de las obras y duración del proceso creativo, que ha durado más de dos años. Sigue una línea de programación que la Fondazione Prada ha trazado a lo largo de más de treinta años de actividad, colaborando con artistas internacionales en la creación de proyectos utópicos tanto conceptual como escénicamente complejos.
Meriem Bennani(Marruecos, 1988) explora el potencial de la narrativa amplificando la realidad mediante el uso de la imaginería fantástica y el humor y mezclando lenguajes propios de los vídeos de YouTube, la telerrealidad, los documentales, la animación y la estética de las grandes producciones. A lo largo de su carrera, Bennani ha desarrollado una práctica en evolución caracterizada por películas, esculturas e instalaciones inmersivas realizadas con una amplia flexibilidad para cuestionar la sociedad contemporánea y sus identidades fragmentadas, las cuestiones de género y el omnipresente poder de las tecnologías digitales.
Como explica Bennani, “uno de los temas centrales de For My Best Family es saber estar juntos, preguntarse dónde empieza y acaba una persona”. La película se centra en una madre y su hija que aprenden a estar juntas, mientras que en la instalación el concepto es más abstracto y se refiere a la colectividad en un sentido más amplio, a momentos de encuentro no verbales en los que parece haber una fuerza que adopta la forma de un cuerpo multiforme. Como una marioneta, la multitud se convierte en una sola cosa, una sola voz, una sola forma de actuar, y cada uno sabe exactamente lo que tiene que hacer en ese momento, ya sea rítmicamente o cantando, por ejemplo, cómo utilizar su cuerpo y zapatear. Me gusta utilizar la animación como medio para cuestionar el hecho de estar juntos y lo que significa estar vivo".
Para la Fondazione Prada, Bennani ha desarrollado un entorno multisensorial en los dos niveles del Podium. En la planta baja, Sole crushing es una gran instalación mecánica que anima 192 chanclas y zapatillas en un “ballet-sinfonía-giro” y una composición musical. La banda sonora fue compuesta en colaboración con el productor musical Reda Senhaji, conocido como Cheb Runner. Este complejo sistema cinético está concebido como un archipiélago de grupos polifónicos en el que multitud de zapatillas se disponen en diferentes conformaciones: dos “orquestas”, dos esculturas en espiral y una isla central. Cada objeto está conectado a un sistema neumático que lo hace móvil, vivo y respirable, y a una superficie caracterizada por diversos materiales que, como en un instrumento de percusión, amplifica el sonido del elemento que lo golpea. Este espacio lúdico y orgánico evoca estados de catarsis general, acontecimientos caóticos o rituales colectivos estructurados como las tradiciones musicales marroquíes, incluida la deqqa marrakchia, arquitecturas destinadas al entretenimiento como los estadios, condiciones de delirio o alucinación y formas de protesta.
La primera planta del Podium acoge un escenario cinematográfico para la proyección de For Aicha, una nueva película de arte y ensayo dirigida por Orian Barki y Meriem Bennani y realizada con la producción creativa de John Michael Boling y Jason Coombs. Ambientada en Nueva York, Rabat y Casablanca, en un mundo poblado por animales antropomórficos y suspendida entre el realismo, la autobiografía y la ficción, esta obra es la culminación de un largo proceso creativo que fusiona los lenguajes del documental y la animación en 3D.
For Aicha sigue a Bouchra, una cineasta marroquí de 35 años que vive en Nueva York. El personaje, con aspecto de chacal, es narrado mientras escribe una película autobiográfica que trata del impacto que su homosexualidad ha tenido en su madre Aicha, una chacal cardióloga que vive en Casablanca. La historia mezcla la ficción -la película dentro de la película dirigida por Bouchra- con una adaptación de conversaciones grabadas que tuvieron lugar realmente entre Bennani y su madre. Con ternura y humor, tanto “Bouchra la directora” como “Bouchra el personaje” intentan comprender los matices del amor y el dolor en la relación madre-hija para poder seguir adelante con sus vidas. La decisión de Bennani de utilizar animales animados en esta obra y en otras anteriores es una forma deliberada de transmitir mensajes complicados recurriendo a imágenes aparentemente inocuas. La forma narrativa de la animación se convierte así en una poderosa herramienta para abordar temas actuales y controvertidos de una forma ingeniosa y atractiva.
Para más información, visite el sitio web oficial de la Fondazione Prada.
En la foto: Orian Barki, Meriem Bennani, John Michael Boling Y Jason Coombs, imagen de For Aicha (2024), Cortesía del artista
Meriem Bennani en la Fondazione Prada con el proyecto "Para mi mejor familia |
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