Londres, en la National Portrait Gallery la primera exposición en el Reino Unido dedicada al retratista Munch

Del 13 de marzo al 15 de junio de 2025, la National Portrait Gallery de Londres acogerá la exposición Edvard Munch Portraits, comisariada por Alison Smith (antigua conservadora jefe de la National Portrait Gallery y actual directora de colecciones e investigación de la Wallace Collection), que pretende ser la primera exposición en el Reino Unido dedicada exclusivamente a Munch como retratista. El objetivo es ofrecer a los visitantes una visión del modo en que Edvard Munch creó retratos tanto por encargo como por motivos personales. Frente a la imagen convencional de Munch como artista aislado y atormentado, la exposición pretende presentarlo como una figura social, capaz de cultivar una amplia red de contactos en Escandinavia y el norte de Europa.

Con más de cuarenta obras procedentes de importantes museos internacionales y colecciones privadas, la exposición se estructurará temática y cronológicamente, guiando al público a través de cuatro secciones que explorarán las relaciones de Munch con su familia, con los círculos bohemios radicales, con mecenas y coleccionistas y, por último, con sus amigos más íntimos.

Los visitantes descubrirán los primeros retratos de los miembros de la familia de Munch, realizados en las décadas de 1880 y 1890. Estas pinturas íntimas, a menudo realizadas en pequeñas hojas de papel y en un estilo naturalista, introducen temas fundamentales que se repiten en toda la producción del artista. Tarde (1888), por ejemplo, representa a su hermana Laura durante unas vacaciones familiares, un año antes de que fuera hospitalizada definitivamente por esquizofrenia. Esta obra capta la sensación de alienación y prefigura el estilo simbolista que Munch desarrollaría en años posteriores. Otra obra significativa es Andreas Munch estudiando anatomía (1886), que revela el permanente interés del artista por la medicina y el tema de la mortalidad, presentes a lo largo de toda su carrera.

Tras trasladarse a estudiar arte a mediados de la década de 1880, Munch entró en la bohemia de Kristiania (actual Oslo), un animado ambiente poblado por artistas y escritores con conexiones internacionales. Entre ellos destacaba el anarquista Hans Jaeger, cuyo retrato dominará esta sección de la exposición. Las interacciones de Munch con los círculos bohemios de Kristiania, París y Berlín fueron cruciales para su desarrollo artístico, ya que le empujaron hacia un lenguaje más expresivo. En Berlín, Munch conoció al dramaturgo polaco Stanisław Przybyszewski, autor de la monografía Das Werk des Edvard Munch (1894), primera publicación que contribuyó a la promoción internacional del artista. Una obra especialmente interesante de esta sección será el retrato del abogado Thor Lütken, nunca antes expuesto en el Reino Unido: un examen atento revela cómo la manga del sujeto, en el borde inferior, se transforma en un paisaje lunar habitado por dos figuras misteriosas, símbolos del amor y de la muerte.

La tercera sección explorará la conexión entre Munch y sus mecenas y coleccionistas. A principios del siglo XX, Munch era uno de los artistas más expuestos de Europa. A su regreso a Berlín en 1902, recibió el apoyo de ricos coleccionistas que acrecentaron aún más su fama. Durante este periodo, el pintor comenzó a realizar retratos por encargo, adoptando colores vivos y brillantes para reflejar la personalidad de sus retratados. Entre ellos destaca el retrato del físico alemán Felix Auerbach (1906), pintado de tal manera que casi parece conversar con el espectador. Otro ejemplo notable es El broche (1902), una litografía que representa a la sensual y misteriosa violinista Eva Mudocci. Tras una crisis nerviosa en 1908, Munch fue ingresado en una clínica neurológica de Copenhague. Allí pintó con colores intensos un retrato del doctor Daniel Jacobson, representándolo en una poderosa pose inspirada en los retratos de Enrique VIII realizados por Hans Holbein.

La última sección de la exposición celebra el regreso definitivo de Munch a Noruega, apoyado por un círculo de amigos, artistas y mecenas. Entre las obras más significativas se encuentran los retratos de cuerpo entero de Jappe Nilssen, el pintor Ludvig Karsten y el escritor Christian Gierløff, a quienes Munch consideraba tan importantes que nunca quiso separarse de ellos y que actuaban como sustitutos de personas reales cuando no estaba en su compañía. En esta sección también se destacarán las modelos recurrentes de Munch, como Birgit Prestøe en Modelo sentada en el sofá (1924) y el sultán Abdul Karem en Modelo con pañuelo verde, el único tema no europeo retratado por el artista.

“A lo largo de su vida, Munch trató de ahondar tras las máscaras de aquellos a quienes retrataba, utilizando pinturas expresivas para revelar sentimientos y motivaciones interiores. Esta exposición ofrece una oportunidad única de apreciar su obra como retratista, tanto en lo que se refiere a su relación personal con sus modelos como a la forma en que los retrataba”, declaró la comisaria Alison Smith.

La exposición cuenta con el apoyo de la Fundación AKO, Viking y la Fundación Asbjorn Lunde.

Londres, en la National Portrait Gallery la primera exposición en el Reino Unido dedicada al retratista Munch

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