Del 15 de mayo al 18 de septiembre de 2022, el Mart de Rovereto dedica una exposición al artista y filósofo Julius Evola (Roma, 1898 - 1974), que participó activamente en lavanguardia italiana. Pintor, vivió una breve temporada artística entre 1915 y 1921, que abandonó para dedicarse al estudio de la filosofía, el esoterismo y las doctrinas orientales, herméticas y alquímicas. Tras un primer periodo futurista en el que realizó composiciones dinámicas y vivas, el artista se distanció del movimiento para acercarse a Tristan Tzara y a la poética del dadaísmo. El artista buscó una dimensión interior en línea con las tendencias abstractas europeas y el pensamiento expresado por Vasily Kandinsky en su famoso ensayo, Lo espiritual en el arte (1912).
Nacido en 1898 en Roma, Evola debutó como artista frecuentando el estudio de Giacomo Balla e interpretando el lenguaje futurista en composiciones dinámicas y vivas. Intelectual intolerante con el “mundo moderno, democrático y materialista” y movido por un “impulso hacia la trascendencia”, Evola se distanció más tarde del futurismo y se acercó a Tristan Tzara, adhiriéndose así a la poética del dadaísmo. El artista buscó una dimensión interior en línea con las tendencias abstractas europeas y el pensamiento expresado por Vasily Kandinsky en su famoso ensayo, Lo espiritual en el arte (1912). Sin embargo, su adhesión al movimiento dadaísta también fue efímera y el pintor anunció su “suicidio artístico” en 1922. Se dedicó a disciplinas humanísticas y esotéricas, proclamando posiciones políticas controvertidas y reaccionarias; frecuentó círculos próximos al fascismo -aunque impugnó sus jerarquías y nunca se afilió- y, en los años de la posguerra, al conservadurismo y a la extrema derecha italiana y europea.En la segunda mitad del siglo XX, su arte fue redescubierto: en 1963, Enrico Crispolti le dedicó una retrospectiva en la galería La Medusa de Roma y, al mismo tiempo, Vanni Scheiwiller publicó su autobiografía titulada Il cammino del cinabro (El camino del cinabrio) y adquirió su archivo de escritos dadaístas. El renovado interés por su arte llevó a Evola a volver a pintar unos años antes de su muerte, en 1974.
Cien años después de su alejamiento de la pintura, el MART de Rovereto da cuenta de la trayectoria artística de Julius Evola tras un largo periodo de olvido. La exposición, comisariada por Beatrice Avanzi y Giorgio Calcara, ilustra toda su trayectoria artística a través de una selección de obras realizadas entre 1915 y 1921 y entre 1965 y 1970. En medio de fuertes y vivos contrastes cromáticos, la exposición del Mart es la mayor jamás organizada sobre Evola. Se exponen más de 50 obras: en la primera parte, pinturas pertenecientes al periodo futurista caracterizadas por elementos abstractos cargados de energía e inesperadamente “psicodélicos”; le siguen los “paisajes interiores”, pura expresión del espíritu con referencias herméticas y esotéricas; por último, la década de 1960 con réplicas de sus obras históricas y algunas pinturas figurativas que se apartan de su producción temprana. Aunque se dedicó a la pintura durante muy poco tiempo, Evola recorrió la temporada de las Vanguardias, interpretando sus temas e instancias con originalidad. Denominador común de su práctica: la búsqueda espiritual.
Para toda la información, visite la web oficial del Mart.
En la foto: Julius Evola, Five o’clock tea (1917-1918), óleo sobre lienzo, 96x91 cm. Fundación Musei di Brescia
Julius Evola protagonista de la mayor exposición dedicada a él en el Mart de Rovereto |
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