Isgrò cancelaBrixia: este es el título del nuevo proyecto de Emilio Isgrò (Barcellona Pozzo di Gotto, 1937), uno de los grandes protagonistas del arte contemporáneo, que tendrá lugar en Brescia del 23 de junio de 2022 al 8 de enero de 2023. Tras la realización de laIncancellabile Vittoria, la instalación monumental presentada en octubre de 2020 en el metro de Brescia, estación FS, para celebrar el regreso de la Victoria Alada, Emilio Isgrò refuerza el vínculo con la ciudad a través de un nuevo proyecto, grande y original, que involucrará los sitios más importantes del Parque Arqueológico de la Brescia Romana (el más grande del norte de Italia) y el Museo de Santa Giulia: del Capitolium al Teatro Romano, del Claustro Renacentista a los jardines del Viridarium.
El proyecto expositivo, comisariado por Marco Bazzini, está producido por la Fondazione Brescia Musei y el Ayuntamiento de Brescia y aúna arqueología y arte contemporáneo, historia y presente, cultura clásica y su pervivencia en nuestro tiempo. Consta de instalaciones monumentales (físicas y digitales), la puesta en escena de un drama autógrafo del maestro siciliano en el Teatro Romano de Brescia y una exposición de 14 obras originales en los espacios del Museo de Santa Giulia. Las obras de arte, todas de dimensiones ambientales, serán especialmente diseñadas y creadas por el artista para esta ocasión, en estrecha relación con los espacios que las acogerán. Junto con la exposición y la representación teatral, demostrarán lo vivas y profundas que están en la producción de Isgrò las raíces de la gran cultura mediterránea que, con la antigua Roma, también fue protagonista en la zona de Brescia. “Borrar Brixia”, por tanto, es para Isgrò una forma de revivirla en formas nuevas e inesperadas. Esto es posible porque, en casi sesenta años de actividad, el artista siciliano ha sabido transformar el borrado de un simple acto de destrucción en una compleja experiencia de conocimiento.
El recorrido expositivo abarcará idealmente el espacio monumental cubierto por el Corredor Unesco, un proyecto que se completará durante el periodo de apertura de la exposición y que prevé la creación de un único itinerario majestuoso, gratuito, que serpentea por el interior de los espacios del Parque Arqueológico hasta el Museo de Santa Giulia. La exposición comenzará en la sala central del Capitolium, el museo epigráfico, que acogerá la obra Las abejas de Virgilio. Una multitud de abejas en vuelo borrará las inscripciones de los epígrafes romanos colocados en la pared: una instalación espectacular, realizada con las técnicas digitales más futuristas, donde el borrado se manifestará en la viveza de imágenes en movimiento.
Las abejas, símbolo de socialidad y laboriosidad, además de cubrir los epígrafes, compondrán nuevas palabras evocadoras, para evocar una temporalidad diferente entre las palabras antiguas y las de la época contemporánea. El espectador inmerso en este ambiente se verá sorprendido, como Eneas ante la súbita aparición de las almas que, como un enjambre de abejas, recorrían el valle del mitológico río Lete, en el episodio narrado por Virgilio en el Libro VI de laEneida. El complejo museístico de Santa Giulia acogerá otros tres episodios del proyecto expositivo. En el Claustro renacentista, dispuesto sobre el césped, el Harmonum de las locas alondras, un enigmático y monumental instrumento musical, en cuyo perímetro corre una secuencia de teclas de piano. En el silencio del lugar, resonará el aria Casta diva de Norma, de Vincenzo Bellini, una de las óperas más poderosas de la tradición operística italiana, ambientada en la Galia romana. La versión de la pieza que encantó a Richard Wagner es la transcrita por Fryderyk Chopin para piano, en homenaje al pianista bresciano Arturo Benedetti Michelangeli, interpretada por el gorjeo de una alondra acompañada por un coro de pájaros. Esta obra, presentada por primera vez precisamente en Brescia, será realizada por la Fondazione Brescia Musei en coproducción con Arte Sella, el importante parque de arte contemporáneo en la naturaleza de Val di Sella, Valsugana, (Trento) dentro de cuyos itinerarios expositivos, al final de la exposición, se colocará de forma permanente en el espacio al aire libre identificado por el propio artista.
Las salas de exposición del Museo di Santa Giulia acogerán también un ciclo inédito de pinturas titulado Roma como Atenas, trece grandes lienzos en los que se han borrado en blanco las páginas ilustradas de un libro sobre la vida cotidiana de una antigua polis griega. En estas obras, Isgrò devuelve el borrado a una práctica pictórica plena, y ya no sólo conceptual, recuperando una modalidad operativa con la que lleva experimentando desde principios de los años ochenta. El itinerario finalizará en los jardines del Viridarium, un parque público situado en el barrio de Santa Giulia y próximo a la Domus dell’Ortaglia, donde aparecerá un gran globo terráqueo de 4 metros de diámetro como si se hubiera dejado caer sobre el césped. Todos los topónimos del globo serán borrados por Isgrò excepto el de Brixia (Brescia). Esta gran obra pública, que permanecerá de forma permanente en la ciudad, enriqueciendo las colecciones cívicas de la ciudad, se realizará sobre acero inoxidable utilizando la más moderna tecnología de impresión digital.
"El proyecto Isgrò cancela Brixia", afirma Francesca Bazoli, presidenta de la Fundación Brescia Musei, “nos lleva hacia el objetivo de 2023, año en que Brescia será Capital de la Cultura, y corona el viaje que la Fundación Brescia Musei emprendió hace dos años en torno al regreso a la ciudad de de la Victoria Alada, de la que ha surgido un vasto y variado programa cultural, e implica la nueva gran ”obra“ del Teatro Romano, que fue bautizada el pasado 4 de abril por una importante conferencia sobre el futuro del teatro romano de Brescia y en la que se implicará la Fundación en los próximos años. No sólo: la implicación por parte de la Fondazione Brescia Musei de un gran maestro de la talla de Emilio Isgrò, tras la de Francesco Vezzoli, protagonista de la exposición Palcoscenici Archeologici recientemente concluida, confirma la voluntad de la Fondazione de interpretar la riqueza del patrimonio artístico de Brescia a través de todos los lenguajes del arte, incluido el contemporáneo”.
"Para la Fondazione Brescia Musei,Isgrò cancella Brixia es un proyecto extremadamente ambicioso y complejo, que se desarrolla en tres niveles, incluyendo diferentes lenguajes, desde la dimensión material y de instalación digital, pasando por la dimensión expositiva tradicional que se desarrolla en los espacios del Museo di Santa Giulia, hasta la parte performativa con la representación teatral dirigida por Giorgio Sangati", afirma Stefano Karadjov, Director de la Fondazione Brescia Musei. “Este proyecto es tanto más importante cuanto que no es efímero, ya que permitirá a la ciudad incluir nuevas obras de arte contemporáneo en su patrimonio cultural. Un camino importante que también permitirá, gracias a la colaboración con Arte Sella, que el proyecto y la ciudad de Brescia vivan y hablen más allá de los límites espacio-temporales de la exposición”.
Los grandes temas de lo antiguo y lo contemporáneo son también una ocasión para volver a proponer el teatro de este artista multiforme que, a principios de los años 80, marcó un paso importante en la dramaturgia contemporánea con la trilogía Orestea puesta en escena sobre las ruinas del terremoto de la antigua Gibellina. El jueves 23 de junio de 2022, el Teatro Romano, otro lugar fascinante de la ruta arqueológica de la antigua Brescia, acogerá el estreno de Dido Adonais Domine, una de las obras escritas por Isgrò, producida por el Centro Teatrale Bresciano, protagonizada por la actriz Sandra Toffolatti y dirigida por Giorgio Sangati. El texto, escrito en 1983, sólo se representó una vez en agosto de 1986 en Barcellona Pozzo di Gotto (ME), en el Teatro Mandanici. La representación se escenificará en 6 réplicas: además del 23 de junio, también se representará el viernes 24 y el domingo 27 de junio, así como los días 1, 2 y 3 de julio.
El catálogo de la exposición Isgrò cancella Brixia, publicado por Skira, reúne una serie de contribuciones de destacados arqueólogos, historiadores del arte y estudiosos de la obra de Isgrò. El volumen explorará en sus diversos matices la relación que el artista ha mantenido siempre con la Antigüedad y la cultura mediterránea, reviviéndolas con originalidad y nueva energía en su obra.
Considerado uno de los innovadores del lenguaje artístico italiano después de la Segunda Guerra Mundial, Emilio Isgrò es el padre indiscutible del borrado, un acto con el que comenzó a experimentar a principios de los años sesenta y que aún hoy conserva la misma vivacidad y audacia creativa. Esta original investigación sobre el lenguaje le ha convertido en una figura casi única en el panorama internacional del arte contemporáneo, convirtiéndole en uno de sus protagonistas indiscutibles. Fue, de hecho, en 1964 cuando el autor comenzó a crear sus primeras obras interviniendo textos, en particular las páginas de los libros, cubriendo manualmente gran parte de ellos bajo estrictas cuadrículas pictóricas. Las palabras y las imágenes se borran individualmente con una marca densa y sólo quedan legibles pequeños fragmentos de frases o una sola palabra. Con el tiempo, este gesto se aplica a mapas, télex, cine, partituras musicales, anticipa las expresiones más típicas del arte conceptual, se declina en instalaciones y, con el paso del negro al blanco en los años ochenta, llega a resultados pictóricos que se han renovado en los últimos años, cuando con el borrado ha construido imágenes casi como si fueran pictogramas. Borrar es un gesto contradictorio entre la destrucción y la reconstrucción. Las palabras, y posteriormente las imágenes, no son ultrajadas por el borrado, sino que a través de éste devuelven nueva vida a un significante portador de múltiples significados: la esencia primaria de toda obra de arte. El borrado es el lenguaje inconfundible de la investigación artística de Emilio Isgrò, que hoy aparece como una filosofía alternativa a la visión contemporánea del mundo: explica más de lo que dice.
Tras su debut literario con la colección de versos Fiere del Sud (Schwarz, 1956), se dedicó a la poesía visual, en el doble papel de teórico y artista. En 1966 celebró su primera exposición individual en la Galleria 1 + 1 de Padua, a la que siguieron numerosas exposiciones en la Galleria Apollinaire, la Galleria Schwarz y la Galleria Blu de Milán, La Bertesca de Génova y la Galleria Lia Rumma de Nápoles. En 1977 ganó el primer premio de la Bienal de São Paulo. En 1985 realizó en Milán la instalación multimedia La veglia di Bach, encargada por el Teatro alla Scala con motivo del Año Europeo de la Música, mientras que en 2010, con la exposición Var Ve Yok, estuvo presente en la Taksim Sanat Galerisi con motivo de la Capitalidad Europea de la Cultura de Estambul.
Participó en la Bienal de Venecia en 1972, 1978, 1986 y 1993, esta última con una sala individual. También es inconfundible su actividad como escritor y hombre de teatro, consolidada con L’Orestea di Gibellina (1983/84/85) y varias novelas y libros de poesía, entre ellos L’avventurosa vita di Emilio Isgrò (Il Formichiere, 1975), Marta de Rogatiis Johnson (Feltrinelli, 1977), Polifemo (Mondadori, 1989), L’asta delle ceneri (Camunia, 1994), Oratorio dei ladri (Mondadori, 1996) y, por último, Brindisi all’amico infame (Aragno, 2003). En los últimos años, sus exposiciones individuales se han presentado en el Centro per l’arte contemporanea Luigi Pecci de Prato (2008), en la Galleria Nazionale d’Arte Moderna de Roma (2013) y, en 2016, una gran exposición antológica comisariada por Marco Bazzini en la que participaron el Palazzo Reale, la Gallerie d’Italia y la Casa del Manzoni de Milán. En 2019, se presentó una impresionante exposición antológica comisariada por Germano Celant en la Fundación Giorgio Cini de Venecia. Sus obras se encuentran en importantes colecciones privadas y públicas nacionales e internacionales.
Emilio Isgrò cancela Brixia: el nuevo proyecto del gran artista siciliano en camino |
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