La Galería Nacional de Arte Antiguo del Palacio Barberini acoge, del 27 de septiembre de 2018 al 27 de enero de 2019, la exposición La stanza di Mantegna. Obras maestras del Museo Jacquemart-André de París, comisariada por Michele Di Monte, que trae a Roma seis importantes obras del Museo Jacquemart-André de París, todas de gran calidad y de gran importancia tanto desde el punto de vista de la historia del arte como de la historia del coleccionismo y del gusto. Entre las obras, llegan también a Roma dos obras maestras de Andrea Mantegna (Isola di Carturo, 1431 - Mantua, 1506).
Esta exposición tiene cierta relación con el territorio, ya que el artista permaneció en Roma de 1488 a 1490, invitado por el Papa Inocencio VIII para decorar la capilla del nuevo edificio del Belvedere. Sin embargo, los cuadros con las Historias de Juan el Bautista y laInfancia de Cristo se perdieron durante unas reformas del siglo XVIII. En la ciudad no se conserva ninguna obra autógrafa de Mantegna, por lo que la exposición se convierte también en una oportunidad única para admirar algunas obras de este extraordinario maestro, uno de los genios más revolucionarios de la historia del arte.
Todas las obras expuestas en el Palacio Barberini fueron reunidas por el famoso coleccionista Edouard André (París, 1833 - 1894) y su esposa Nélie Jacquemart (París, 1841 - 1912), que legaron su prestigiosa colección al Estado francés. La selección se centra en la obra maestra de Andrea Mantegna,Ecce Homo, una clara síntesis a principios del siglo XVI entre las exigencias de la pintura devocional y una construcción científica de las formas anatómicas y del espacio. El cuadro de Mantegna reviste además un interés excepcional por su estado de conservación, que documenta la técnica de ejecución original del pintor y los efectos estético-visuales que perseguía.
Junto alEcce Homo, se expondrá otra obra atribuida al propio Mantegna, la Virgen con el Niño entre los santos Jerónimo y Luis de Tolosa, más juvenil, que atestigua, con una cronología más temprana (1455), la interpretación que Mantegna hizo de las imágenes de María, tema ampliamente tratado en la zona del Véneto por el taller de Giovanni Bellini, con quien Mantegna estuvo en estrecho contacto.
Esta evolución iconográfica y estética se aprecia claramente en la pequeña pintura sobre tabla, Virgen con el Niño, de Cima da Conegliano (Giovanni Battista Cima, Conegliano, 1459/1460 - 1517/1518), que retoma y reformula ese modelo tipológico ya influyente y exitoso. El raro retrato sobre pergamino de Giorgio Schiavone (de nombre real Juraj Ćulinović, Scardona, 1433/1436 - Šibenik, 1504), por su parte, ilustra el interés por el género del retrato celebratorio, a la vez moderno y clasicista, declinado en un perfil grabado de inspiración antigua y rendido con un precioso gusto por la materia que el artista había madurado en el taller del maestro paduano Francesco Squarcione. El culto a las formas del arte antiguo es igualmente evidente en el dibujo de la escuela de Mantegna, Hércules y Anteo, y en el cotizado bronce de Andrea Briosco, conocido como Riccio (Trento, c. 1470 - Padua, 1532), también activo en la zona paduana, que representa a Moisés con la elegante pose y el solemne drapeado de una pequeña estatua clásica.
Todas estas piezas aluden a una fase de la historia del coleccionismo de arte europeo de finales del siglo XIX, marcada por una creciente pasión por las obras del Renacimiento italiano y los maestros de las escuelas veneciana y toscana, en una mezcla de intereses sociales y económicos, necesidades cognitivas, críticas e históricas y nuevas aspiraciones intelectuales, que puede encontrar un elocuente paralelo en la colección de obras que la coleccionista alemana Enrichetta Hertz(Colonia 1846 - Roma 1913) donó a la Galleria Nazionale a principios del siglo pasado.
Para toda la información sobre horarios y precios de las entradas, pinche en el siguiente enlace de la página web de la Galería Nacional de Arte Antiguo.
En la foto: Andrea Mantegna, Ecce homo (1500; temple y oro sobre lienzo, 54 x 42 cm; París, Musée Jacquemart-André)
Dos obras maestras de Mantegna llegan a Roma procedentes de París. La habitación de Mantegna se expone en el Palacio Barberini |
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