Camerino acoge la primera exposición tras el terremoto de 2016. Obras recuperadas en el Palazzo Castelli.

Después de cinco años, un municipio situado en el cráter del terremoto que asoló el centro de Italia en 2016 vuelve a acoger una exposición de arte antiguo. Se trata de Camerino extramuros: perspectivas del arte de los siglos XV al XVIII, que tendrá lugar en Camerino, en el Palazzo Castelli, del 25 de junio al 19 de septiembre de 2021, promovida y apoyada por la Región de las Marcas y el Ayuntamiento de Camerino. La exposición tiene como objetivo valorizar las obras de arte recuperadas en la zona de Camerino y salvadas del terremoto, procedentes de iglesias y museos que estaban inutilizables. Algunas de ellas vuelven a exponerse al público por primera vez desde el terremoto, otras tras su restauración, mientras que para otras se trata de revivirlas a través de las nuevas tecnologías. Se trata, pues, de recuperar un patrimonio extraordinario que nunca ha caído en el olvido.

La exposición cobrará vida en uno de los edificios históricos de la ciudad, gracias a la colaboración de la Universidad de Camerino, cuyo Rector, Claudio Pettinari, es también miembro del Comité Científico. La exposición también hará uso de vídeos de ultra alta definición que permitirán a los visitantes recorrer la Visión de San Felipe Neri con la Virgen y el Niño, pintada por Giovanni Battista Tiepolo entre 1739 y 1740, para descubrir cada detalle gracias a la colaboración con Haltadefinizione. La obra es el único testimonio del pintor veneciano en el centro de Italia. También se exponen el Retrato de Gi ulia da Varano atribuido a Dosso Dossi, laAnunciación de Giovanni Angelo d’Antonio (un asombroso manifiesto del siglo XV en la región de Las Marcas, pintado por un intérprete que en muchos aspectos fue precursor de la pintura culta y refinada de Piero della Francesca: esta obra también ha sido digitalizada por Haltadefinizione), y otras obras importantes. También se ha restaurado especialmente el retrato de Giulia da Varano de niña, que muestra a la última duquesa de Camerino sentada en un cojín de brocado rojo e inmersa en un paisaje con vistas a la ciudad. Tras una campaña de investigaciones diagnósticas previas a la propia intervención y un adecuado conjunto fotográfico que documenta las distintas fases de la restauración, se ha devuelto la plena legibilidad a esta obra atribuida a Dosso Dossi y fechable hacia 1524. La pintura, adquirida por el Ayuntamiento en 1860 y robada en 1980, fue recuperada en 2019 por la Unidad de Protección del Patrimonio Cultural de los Carabinieri.

La novedad científica radica en que las obras han sido objeto de investigaciones de diagnóstico realizadas por la spin-off Art & Co srl de Unicam y de valorización mediante digitalización llevada a cabo por la empresa Haltadefinizione, cuyos resultados estarán a disposición del público a través de herramientas multimedia especiales. No hay un comisario único de la exposición: de hecho, ha sido obra colegiada de un Comité Científico compuesto por Pier Luigi Falaschi, Marina Massa, Barbara Mastrocola, Claudio Pettinari, Matteo Mazzalupi, Francesco Orsolini y Alessandra Pattanaro. Se seleccionaron las obras más representativas, importantes y valiosas presentes en la ciudad de Camerino y su territorio, destacando la obra atribuida a Dosso Dossi (recientemente restaurada y nunca expuesta), el retablo de Tiépolo y laAnunciación de Giovanni Angelo d’Antonio.

Tras los eventos sísmicos de 2016, el Ayuntamiento trabajó tenazmente para salvaguardar el patrimonio artístico y la mayor parte de las obras que poseía, gracias también a la disponibilidad obtenida de la Archidiócesis de Camerino-San Severino Marche, fueron trasladadas y alojadas en las salas del sótano del Episcopio, en el depósito Venanzina Pennesi de Camerino y en el Palacio Episcopal de San Severino Marche. Gracias a la Superintendencia de Arqueología, Bellas Artes y Paisaje de la Región de Las Marcas, se diseñaron diversos sistemas de equipamiento, vitrinas y estanterías, y se catalogaron, fotografiaron y aseguraron los bienes dañados. Así pues, la exposición es también el resultado de este trabajo. El coste total del proyecto asciende a 90.000 euros, 80.000 de los cuales han sido asignados por la Región de Las Marcas y 10.000 en concepto de coparticipación del Ayuntamiento de Camerino.

“Se trata de una exposición simbólica”, subraya la consejera regional Giorgia Latini, “por varias razones: por el gran trabajo en equipo y la excelente colaboración institucional entre todos los actores implicados, a los que quiero dar las gracias, por el amor al patrimonio cultural, destinado a hacerlo compartible al mayor número de personas posible, y porque es un verdadero reinicio para este territorio herido, que siempre ha demostrado que sabe resurgir de las dificultades, como saben hacer las gentes de Las Marcas. Con esta exposición-evento, damos una fuerte señal de esperanza siguiendo un camino más amplio de valorización de las obras de arte en las que la región de Las Marcas es rica. Nuestro objetivo es el de la reactivación económica a través de la cultura, volante esencial para el crecimiento de los territorios”.

“Camerino no olvida sus orígenes”, afirmó el alcalde Sandro Sborgia: “Es una ciudad con vocación artística y cultural, y es precisamente esta última la que queremos que sea el motor del reinicio, de una reactivación económica y social de nuestro territorio herido por el terremoto y luego en lucha con Covid. Partimos del Renacimiento, entre los periodos explorados en la exposición, para llegar a un renacimiento que sin duda debe pasar por muchos factores y sectores, y la cultura para nosotros es uno de los principales en los que centrarnos a través de las comunidades, los territorios y las tecnologías”.

“Con la exposición”, explica la concejala de cultura Giovanna Sartori, “hemos querido exponer algo que nunca se ha hecho antes: el visitante queda literalmente capturado por los esplendores que para nosotros tienen el fuerte valor simbólico del renacimiento. Se trata de perspectivas artísticas que tienen como centro la identidad de Camerino, pero que se proyectan a una perspectiva mucho más amplia y que, para esta tierra herida por el terremoto, quieren representar también un nuevo comienzo reiniciando desde un espacio histórico que se convierte en otra cosa, una instalación que gana la unión entre lo antiguo y lo contemporáneo. Camerino manifiesta así la voluntad de volver a empezar desde el arte y la cultura, y el hecho de promover la primera exposición en el cráter es una metáfora del renacimiento verdadero y colectivo”.

"Todos tenemos en la retina aquel trágico noviembre de 2016 -señaló el rector Claudio Pettinari-, cuando esas mismas obras salvadas por la Superintendencia, por Legambiente, salieron de nuestra ciudad, heridas y en camiones. En nuestras almas había dolor y preocupación por no volver a verlas. Y, en cambio, hoy estamos aquí para celebrar este regreso al esplendor de una exposición largamente esperada, un buen lustro. La belleza y la importancia de estas obras de arte demuestran la prestigiosa tradición histórica de Camerino, y la Universidad está dispuesta a continuar, junto con las instituciones, este camino de valorización del patrimonio cultural tanto de la zona de Camerino como de la región, apoyando las acciones con nuestra experiencia, investigación y estudio aplicados a la promoción y protección del patrimonio cultural, a través de la arquitectura, la informática, la química y la comunicación digital".

En la imagen, un detalle del retablo de Tiépolo

Camerino acoge la primera exposición tras el terremoto de 2016. Obras recuperadas en el Palazzo Castelli.

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