Bolonia, Dario Picariello expone tres grandes instalaciones como puente entre pasado y presente

LABS Contemporary art acoge en Bolonia, del 14 de septiembre al 13 de noviembre de 2021, la exposición individual del joven Dario Picariello (Avellino, 1991) titulada L’acqua le bagna come il vento le calpesta, que presenta tres grandes instalaciones inéditas de la serie Cicli, una producción iniciada en 2020 que se inspira en las tradiciones de las canciones populares del sur. La exposición va acompañada de un texto crítico de Eugenio Viola, conservador jefe del Museo de Arte Moderno de Bogotá - MAMBO, Colombia, y próximo comisario del Pabellón de Italia en la Bienal de Arte de 2022.

Las intervenciones de la instalación, realizadas con diferentes materiales y técnicas, se muestran utilizando equipos fotográficos entre bastidores, como paraguas o soportes. La atención se centra en el medio fotográfico, puente entre el pasado y el presente: las imágenes fotográficas se modifican digitalmente, se transfieren con ácidos sobre tejidos o se imprimen sobre papel blueback hecho en tiras, para utilizarlas después para bordar palabras, según patrones decorativos de prendas ceremoniales o imágenes naturales. Las canciones seleccionadas para esta ocasión tienen orígenes y épocas diferentes; entre ellas se entrelaza el tema común de la violencia, ya sea física, verbal o psicológica. Cada obra relata un tema difícil, presentado a través de versos cortos tejidos sobre textiles.

La primera obra, Cinquantaquattro, toma una canción oral tradicional del Alto Ionio Cosentino para mostrar las difíciles condiciones de trabajo de los jornaleros en el campo. El trabajador, dispuesto a someterse a duros trabajos para no perder su ocupación, única fuente de sustento para toda su familia, crea una relación de “dependencia” con el terrateniente. Un fenómeno que todavía puede observarse hoy en día y del que a menudo son protagonistas las clases subalternas, obligadas a aceptar todo tipo de abusos para no perder su empleo o incurrir en la humillación pública. La obra titulada Le buone misure (Las buenas medidas ) retoma en cambio los versos de A Partannisa, una canción de niñas en la recogida de la aceituna, una antigua canción popular siciliana. Un llamamiento de una niña que suplica a su madre que no la envíe al molino para no someterse a los abusos del molinero. Por último, la tercera instalación escenifica una relación amorosa que nunca se ha consumado y ha llegado a su fin. Resuenan en el aire los versos de Strambellate, una canción cantada en primera persona: “no me envíes más besos por correo / pierden su sabor en la calle / si quieres dármelos, dámelos en la boca / para que pueda probar lo que es el amor [...]”.

La exposición concluye con dos fotografías expuestas a modo de políptico. Las imágenes presentadas son el resultado de un proceso digital: la fotografía es leída por un software que no es adecuado para codificar el formato digital original, produciendo un error, o glitch. La imagen resultante se imprime por contacto sobre papel, dándonos apariciones que se sitúan en una espacialidad indefinida y vibrante.

Dario Picariello es licenciado en Artes Visuales por la Academia de Bellas Artes de Urbino y Master en Fotografía y Diseño Visual por la Nuova Accademia delle Belle Arti di Milano - NABA. Su investigación se sirve de distintos medios expresivos para dar vida a obras que transmiten una narrativa entre el pasado y el presente, a menudo expuestas utilizando equipos fotográficos entre bastidores, como paraguas o atriles. Lo que interesa al artista es la posibilidad, a través de un estudio científico, antropológico y folclórico, de revivir un lugar con su historia presentando al público una narrativa más amplia y cercana a los temas de la existencia humana. Su primera exposición individual, Mascarata, se celebró en 2016, con un texto crítico de Eugenio Viola. En 2017 fue finalista del Premio Cramum. También ha participado en exposiciones colectivas en sedes como el Palazzo Ducale de Génova, el PAC de Milán y la Villa delle Rose de Bolonia.

Imagen: Dario Picariello, Non mi mandà più baci per la strada (2021; impresión fotográfica de contacto sobre organza, abanicos, soportes fotográficos, papel blueback, 460 x 100 x 50 cm)

Bolonia, Dario Picariello expone tres grandes instalaciones como puente entre pasado y presente

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