Patrimonio e innovación: con estas dos palabras se podría resumir la exposición LuBeC - Lucca Beni Culturali, que desde hace quince años lleva a Lucca los productos y las prácticas más avanzadas en relación con temas como la tecnología, la digitalización, la sostenibilidad, la participación y la investigación para el patrimonio cultural. En este 2019, LuBeC llega a su decimoquinta edición, celebrada los días 3 y 4 de octubre, como es habitual, en el Real Collegio di Lucca. Entrevistamos a Francesca Velani, Directora de LuBeC y Vicepresidenta de Promo P.A. Fondazione (que organiza el evento), para hacer un primer balance de este importante evento de dos días, del que siempre surgen muchas ideas que acabarán dando forma a las políticas culturales italianas. La entrevista es de Federico Giannini, redactor jefe de Finestre sull’Arte.
Francesca Velani |
FG.
Dra. Velani, ¿cómo ha ido esta edición de LuBeC?FV. El balance es ciertamente positivo: este año hemos registrado una gran participación de operadores e instituciones. La presencia del Ministerio de Patrimonio y Actividades Culturales y Turismo (presente en la figura del jefe de gabinete Lorenzo Casini y otros importantes representantes), así como la del Ministerio de Asuntos Exteriores, acreditaron el evento como un momento importante para la definición de las políticas del país: Por supuesto, para nosotros es un aspecto fundamental, porque el esfuerzo que hacemos para reunir a más de dos mil personas en dos días tiene como objetivo que los territorios hablen con el centro, por un lado, y las empresas hablen con el sector público, por otro. Y este año el objetivo se ha cumplido plenamente gracias a una importante representación tanto del mundo privado como del público. El mayor reto de LuBeC es precisamente intentar que las buenas prácticas procedentes de los territorios (porque la innovación viene de abajo) se conviertan en modelos: este es nuestro reto, contra el que luchamos cada día. Cada día, Promo P.A. Fondazione trabaja con los territorios y sus socios para conseguirlo, es decir, para mostrar cómo las acciones que pueden haber surgido espontáneamente en los territorios pueden convertirse en modelos replicables, pero sobre todo pueden convertirse en políticas. Hay que hacer política: “política” es una palabra preciosa, y hay que decirla muchas veces en positivo porque, a través de la política, hay que transmitir los valores de este país.
Y hablando de políticas, de este evento de dos días, ¿cuál podría ser una de las sugerencias más importantes que LuBeC envía a MiBACT?Me gustaría mencionar una que considero de gran importancia: hemos recibido la confirmación de que la convocatoria de candidaturas para la Capital Italiana de la Cultura volverá a empezar. Me gustaría abrir un debate con el Ministerio para actualizar los parámetros de evaluación de la convocatoria, incluyendo las importantes cuestiones de sostenibilidad: así que sí al turismo, sí a la innovación, pero sí también a la sostenibilidad. De hecho, hay que subrayar un punto muy significativo: la convocatoria de candidaturas para la Capital Italiana de la Cultura puede ayudarnos a ganar un reto importante, el de los proyectos a largo plazo.
Ensu opinión, ¿cuál es la importancia de un proyecto como la Capital Italiana de la Cultura?La importancia reside sobre todo en el camino que emprenden las ciudades: esta convocatoria hace que las ciudades se sienten a la mesa junto con los territorios, las instituciones (como la región o los municipios vecinos), los particulares y las asociaciones. Y todos estos actores planifican juntos, sobre una base cultural. Si no existiera una estructura como la Capital Italiana de la Cultura, no lo harían: porque, en la mente de las administraciones, la cultura aún no se percibe como un elemento de planificación estratégica. En cambio, las declaraciones de todas las partes interesadas internacionales (pienso en la Agenda Europea para la Cultura, la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, la Expo 2020 de Dubai cuyo lema será Conectando mentes, creando el futuro) nos dicen claramente que la cultura está en el centro y es la plataforma para el crecimiento. Significa que tenemos que planificar sobre una base cultural: pero para ello tenemos que invertir, poner dinero en ello. En Italia seguimos diciendo que tenemos un patrimonio cultural extraordinario, pero recordemos que este patrimonio existe porque alguien ha invertido en él, ha gastado dinero en él. Tenemos que hacer lo mismo: crear inversiones. La Capital Italiana de la Cultura activa inversiones. Pondré un ejemplo: en Parma, que será Capital Italiana de la Cultura en 2020, se ha puesto en marcha un camino que puede definirse como un verdadero camino público-privado, ya que las inversiones se han repartido a partes iguales (4 millones de euros son públicos y 4 millones de euros son privados). Y estos 8 millones de euros generarán una serie de acciones que no sólo están pensadas para 2020, sino que miran más allá.
Hemos mencionado la Expo 2020 de Dubai, y este año el país anfitrión de la LuBeC ha sido Emiratos Árabes Unidos.
¿Qué se desprende de las reuniones celebradas aquí en Lucca?Los Emiratos Árabes Unidos confirmaron su intención de invertir fuertemente en cultura en Italia. Para ellos, cultura significa formación, por lo que implica universidades, investigación, tecnologías, contenidos: los EAU necesitan crear un fuerte intercambio, desde el punto de vista de la formación, para cultivar sus talentos y, al mismo tiempo, necesitan enviar gente a Italia a estudiar para nutrirse. Desde hace unos años (hay declaraciones al respecto que se remontan a 2014), los EAU afirman claramente que tarde o temprano el petróleo se acabará, y el día que vendan el último barril habrán invertido tanto en cultura que ya no tendrán el problema de encontrar modelos económicos alternativos.
LuBeC siempre ha sido un evento muy atento a todo lo digital: ¿cuáles han sido las principales novedades presentadas en el Real Colegio este año?
Sin duda, me parece muy interesante el tema de la gamificación, en el que nos hemos centrado mucho para esta decimoquinta edición de LuBeC: sin embargo, hay que subrayar que, por lo que a nosotros respecta, el aspecto principal de la gamificación no es tanto el juego en sí, sino la técnica del juego para ayudar a interceptar audiencias. Otra novedad es la presencia de publicaciones, como la propia Finestre sull’Arte, que son fuertes, llegan a un público sectorial, aportan calidad y comunicación, y para nosotros esto es muy importante, porque si crecemos todos, crece también el sector. El sector del patrimonio cultural es un sector que necesita nutrirse de esta manera, es decir, necesitamos hacer crecer el sistema empresarial (estas son las famosas industrias culturales creativas).
Y hablando de industrias culturales creativas, el Ministro de Patrimonio Cultural Dario Franceschini, al presentar las directrices de su ministerio, hizo saber que precisamente estas industrias serán una prioridad de la próxima acción de gobierno.
¿Qué hay que hacer en este ámbito? Es necesario crear canales de inversión y fondos de inversión dedicados, fondos de capital riesgo serios que permitan el crecimiento de una parte del sistema empresarial. Al mismo tiempo, hay que trabajar mucho en la posibilidad de utilizar el patrimonio cultural: hablamos de imágenes, contenidos, textos, archivos para que puedan ser utilizados y transferidos. Porque entonces, si quisiéramos dar una definición de “industria cultural creativa”, podríamos identificarla simplemente como aquellos que producen contenidos de base cultural: va desde los que hacen libros y publicaciones hasta los que hacen comunicación, arte, teatro, canto, ópera, música pop o rock, pero también pensemos en toda la cadena que alimenta el cine, la moda, la alimentación. Todo ello puede definirse como “industrias culturales creativas”, y se trata de un sistema valorado en 89.000 millones de euros, que influye aproximadamente en más del 37% del Producto Interior Bruto relacionado con el turismo. Es un sector en crecimiento, y es el único sistema que tiene un 1,5% de empleo este año.
Una última cuestión se refiere a los archivos, a los que LuBeC ha dedicado especial atención este año, lo que parece hacerse eco de la atención que el ministro también prometió dedicar a estos órganos del ministerio. Órganos que se encuentran en cierto modo en el año cero, ya que han estado olvidados durante mucho tiempo.
¿Qué podemos esperar?El ministerio está preparando una inversión muy fuerte, desde el punto de vista económico, en digitalización: porque los archivos son nuestra memoria. El tema es el de los datos abiertos: es decir, hay que poner los datos a disposición de todos, conectarlos, permitir que el mundo lea lo que está escrito en nuestros archivos. Y esto sólo puede hacerse digitalizando: es la materia prima de cualquier empresa de hoy, y por tanto de cualquier economía. En definitiva, sabemos, como nos dicen los economistas, que un territorio que crece hoy es un territorio que invierte en cultura e innovación. Los territorios más importantes desde el punto de vista económico, como Silicon Valley por ejemplo, son territorios que han optado por hacer fuertes inversiones en digitalización, informatización y formación de las personas. Y con ello viene el crecimiento.
Advertencia: la traducción al español del artículo original en italiano se ha realizado mediante herramientas automáticas. Nos comprometemos a revisar todos los artículos, pero no garantizamos la ausencia total de imprecisiones en la traducción debidas al programa. Puede encontrar el original haciendo clic en el botón ITA. Si encuentra algún error, por favor contáctenos.