Iconoclasta, la cerámica de diseño que reelabora objetos de culto y figuras mitológicas

Se llama Iconoclastic y es un proyecto que reelabora un clásico de la cultura artesanal italiana como la porcelana y lo reinventa según formas e iconos contemporáneos. Los autores del proyecto son los dos creativos fundadores de Daamstudio, un estudio de diseño del Véneto que lleva varios años trabajando tanto en Italia como en el extranjero. En Iconoclastic, han querido volcar la experiencia adquirida a lo largo de los años como diseñadores de marca y directores artísticos para industrias creativas y culturales, y transportar su imaginario visual a una colección de objetos simbólicos, modelados por una empresa que lleva décadas operando en el campo de la porcelana artística y, por tanto, portavoz de la alta artesanía italiana.

Iconoclastic reelabora estímulos de la moda, la música y la cultura visual contemporánea en general, modelándolos sobre una base clásica. Las piezas, todas ellas artesanales, requieren una elaboración regida por las necesidades de la materia prima y los ritmos del hombre, no de las máquinas. Además, la producción se realiza por encargo y en ediciones limitadas, para no sobrecargar un mercado ya saturado de productos. “Queremos imaginar que quien compre una pieza de Iconoclastic”, dicen los creadores del proyecto, “sea consciente de estos valores y los asuma a su vez, con vistas a contribuir, mediante una compra consciente, a hacer de este mundo un lugar mejor”.

El proyecto también se desarrolla con respeto por el medio ambiente, empezando por la materia prima: la arcilla. Un material pobre y noble a la vez, fruto puro de la tierra que gracias al agua, primero, y al fuego, después, se modela y estabiliza en un elemento sólido precioso pero frágil. No hay interferencias contaminantes en este proceso: sólo las hábiles manos de los artesanos que primero moldean el caolín, luego lo cuecen con un molde de yeso y finalmente lo pintan con pigmentos naturales. Se trata de un proceso ancestral, que se remonta a los orígenes de la humanidad, perfeccionado en torno al siglo XVIII con las distintas escuelas de cerámica y transmitido de generación en generación: por eso sólo los talleres de artesanos expertos pueden abordar este proceso. Por ello, Iconoclastic ha elegido confiar la creación de sus objetos a una empresa especializada en la producción de porcelana de Capodimonte y, concretamente, a las manos del escultor Luciano Cazzola, que cuenta con cincuenta años de experiencia en el sector. Esta empresa forma parte del tejido artesanal de la zona de Nove (Vicenza), especializado en la producción de cerámica. Para los fundadores del proyecto, es una forma de reforzar el espíritu empresarial local y perpetuar tradiciones que, de otro modo, estarían destinadas a disolverse en la furia innovadora de los tiempos.

El último requisito, en la perspectiva de una ética sostenible, es el papel del tiempo: “en esta época frenética de producción desenfrenada, nos enorgullecemos de crear objetos lentos”, dicen los creadores de Iconoclastic, “donde el tiempo que se tarda en fabricarlos es un valor añadido y no un factor discriminatorio”. De hecho, cada pieza requiere una elaboración adecuada ajustada a las necesidades de la materia prima y a los ritmos del hombre, no de las máquinas. Además, la producción se realiza por encargo y en ediciones limitadas, para no sobrecargar un mercado ya saturado de productos. Objetos lentos, porque cada pieza es deseada y esperada".

Hay dos colecciones: Icons y Muse. Icons reinterpreta uno de los fetiches de la cultura callejera contemporánea, la zapatilla deportiva, y lo cristaliza en un objeto de porcelana. Convertida ya en objeto de culto tanto entre los jóvenes como entre los coleccionistas de todas las edades, convertida en protagonista absoluta por el marketing a través de complejas operaciones de co-branding entre casas de moda, la zapatilla Iconoclastic, despojada de su función real, aspira a convertirse en puro objeto de devoción. Se propone en diferentes variantes, homenaje a símbolos o expresiones visuales de la cultura pop contemporánea, y se presta a adoptar siempre nuevos disfraces, como en una auténtica colección siempre en curso. Por eso, cada trainer está numerado y se produce en edición limitada.

Muse, por su parte, es una colección de damas de porcelana inspirada en la figura mitológica de las musas y reelaborada con códigos simbólicos para aspirar a crear “un nuevo arquetipo femenino, ideal y mágico”, en palabras de los creadores de Iconoclastic. Desde la Grecia arcaica, las Musas han representado el ideal supremo del Arte entendido como “manifestación de lo divino”. Identificadas habitualmente como nueve figuras distintas, cada una de ellas es portavoz de un arte muy específico, que abarca todos los campos del saber humano: de la poesía a la danza, del arte a la ciencia. La colección Muse reinterpreta estas figuras mitológicas con un lenguaje estilístico que se inspira en las artes y el diseño contemporáneo y los fusiona con elementos de actualidad. Urania, Terpsícore y Talía, son las tres primeras damas “ideales”, cada una cargada de simbolismo y referencias visuales por descifrar, quimeras decorativas pero con aspiraciones a convertirse en “iconos” contemporáneos. La colección está totalmente tallada a mano por un maestro escultor según un diseño exclusivo de los diseñadores de Iconoclastic, las piezas decoradas individualmente con una mezcla de técnicas pictóricas y gráficas, numeradas y producidas en ediciones limitadas.

Para más información, visite el sitio web de Iconoclastic.

Iconoclasta, la cerámica de diseño que reelabora objetos de culto y figuras mitológicas

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