La Scapigliatura lombarda. Evolución, estilos y temas de los pintores inconformistas

La Scapigliatura fue un movimiento cultural, literario y artístico surgido en Milán entre los años 1860 y finales de la década de 1870, que reunió a artistas lombardos y piamonteses en una ruptura con la tradición y las costumbres de la sociedad burguesa de la época, proclamando valores alternativos en el arte y la vida. Un fenómeno artístico urbano, con implicaciones también sociales y políticas, cuyas expresiones más significativas cobraron vida gracias al intercambio de experiencias que tuvo lugar en la zona de Lombardía durante y después del Risorgimento.

En línea con los escritores Scapigliati, los artistas plásticos llevaron adelante, especialmente en pintura, una revolución técnica, narrativa y moral que evocaba la libre expresión personal y melancólica de los pintores románticos y que, al mismo tiempo, estaba influida por los inicios del Realismo, en su preferencia por los temas reales y la representación verosímil. Unidos por la aversión al gusto dominante y el deseo de vivir el arte como un modo espontáneo de expresión de la interioridad, los pintores Scapigliati abogaron por un cambio de estilo y de los temas preestablecidos de la pintura académica de la época. Abandonaron el uso del dibujo y los temas históricos en favor del sfumato sin contornos claros, produciendo principalmente retratos y algunos paisajes. Defensores de la pintura de efecto y de atmósfera, se dedicaron a la sugestiva representación de la luz en los ambientes. Con la Scapigliatura, y la desmaterialización de la imagen sólida, se inició un importantísimo curso de estudio de la luz que más tarde desembocaría en las vanguardias del siglo XX.

Los artistas de aquella época milanesa eran jóvenes inconformistas, que sufrían el fracaso de los ideales democráticos del Risorgimento tras las luchas por la independencia y la Unificación de Italia (17 de marzo de 1861) y que padecían, como muchos intelectuales disidentes de la época, una degradación social y económica, una situación de malestar y rechazo de la actualidad. Su actitud era abiertamente ambivalente: por un lado el impulso hacia los ideales nobles y elevados y la belleza mística, por otro la complacencia hacia los aspectos más degradados de la vida civil.

Al igual que los bohemios franceses, escritores, artistas, músicos y actores que eligieron un estilo de vida poco convencional de extravagancia, marginalidad y empobrecimiento, entre los artistas de las grandes ciudades europeas, como en Milán, se extendió un sentimiento de rebeldía juvenil y desprecio radical por las normas y convicciones morales vigentes, que llevó a los protagonistas de Scapigliatura a una vida irregular y disoluta. Fue una respuesta vital a la dura racionalidad de las leyes económicas y la industrialización de la segunda mitad del siglo XIX, una protesta pagada, sin embargo, con precarias condiciones de vida y estados de ánimo, enfermedad o incluso suicidio.

Sin injertarse profundamente en la historia de la cultura y la vida moral italianas, la Scapigliatura representó una experiencia de transición, en el giro del Romanticismo hacia una mayor adhesión a aspectos de la realidad contemporánea, en laencrucijada de corrientes literarias y visuales extranjeras que contribuyeron a la desprovincialización del clima cultural italiano. Los artistas Scapigliati no se constituyeron en escuela ni en movimiento organizado, la suya fue una suma de experiencias individuales, de poco más de una década, unánimes en su deseo de defender laautonomía del arte, la inspiración y la expresión en un contacto más íntimo con la vida.

Orígenes y desarrollo de la Scapigliatura

El Romanticismo en Italia se identificó con el Risorgimento, el movimiento de patriotas que luchaban por la formación de un Estado unitario e independiente de la dominación extranjera. Esta circunstancia coincidió en las artes figurativas sobre todo con la afirmación de la pintura de historia, que ya era ampliamente reconocida como género dominante con el Neoclasicismo. Los pintores románticos, sin embargo, cambiaron su fuente de inspiración, sustituyendo la historia antigua de Roma por la historia medieval, cuyos episodios podían ofrecer estimulantes alegorías de la lucha por la libertad del Risorgimento; la Edad Media se entendía también como la época gloriosa de la religiosidad y la afirmación de una conciencia nacional. En el plano estilístico, los pintores del Romanticismo italiano se presentaban como continuadores del Neoclasicismo y en su pintura predominaba el dibujo, por lo que la plenitud y la suavidad de las formas se consideraban requisitos fundamentales.

La Scapigliatura trastocó el Romanticismo anterior, ya que, una vez finalizados los ideales del Risorgimento, surgieron problemas sociales y desequilibrios económicos como consecuencia de la transformación del país de agrícola a industrial, que los artistas absorbieron y quisieron interpretar. Los pintores renunciaron al uso del dibujo y empezaron a difuminar las formas en brillantes salpicaduras de color. Esta técnica poco convencional daba la idea de lo “inacabado” y lo incierto, ya que el trazo abocetado común a muchos de ellos parecía representar la desconfianza y la incertidumbre que estaban experimentando.

Un precursor e inspirador en este clima fue Giovanni Carnovali conocido como il Piccio (Luino, 1804 - Cremona, 1873) que, ya en la década de 1850, comenzó a deshilachar la figura, introduciendo el sentido del sfumato, para figuras y naturaleza, con una pincelada suelta, en toques y manchas, con combinaciones de colores que recreaban atmósferas luminosas.

Aunque todos los artistas habían sido alumnos de las academias de Bellas Artes, en Brera, Venecia o la Albertina de Turín, manifestaban un rechazo a las reglas académicas, en conflicto con la sociedad del arte.Los principales exponentes, próximos a Piccio y Federico Faruffini, Filippo Carcano y otros, fueron Tranquillo Cremona (Pavía, 1837 - Milán, 1878) y Daniele Ranzoni (Intra, Verbania, 1843 - 1889), que profesaban: “No hay cosa tan incierta como el arte, como la pintura”, es necesario “pintar con el aliento”, escribía Ranzoni, es decir, con extrema ligereza, casi espiritualmente, ya que “en la naturaleza y en el arte no existe la línea, sólo existen los efectos de luz”.De hecho, los dos artistas eligieron para sus cuadros modos y colores vaporosos, para dejar en suspenso la relación y la certeza de las formas. Mientras tanto, Milán crecía como capital económica y gran ciudad.

El término "scapigliatura " fue propuesto por primera vez por el escritor Cletto Arrighi, nombre artístico procedente del anagrama de Carlo Righetti (Milán, 1828-1906) en su novela La scapigliatura e il 6 febbraio, publicada en 1862.En la definición ya estaba implícita la ruptura con la tradición y las costumbres: ’scapigliato’ es aquel que lleva el pelo revuelto, despeinado, despeinado, es aquel, por tanto, que no se preocupa por el aspecto exterior tan importante a los ojos de la sociedad burguesa. El estado de ánimo de los “scapigliati”, común a los intelectuales de otros países europeos como ya hemos visto con respecto a Francia, les llevó a renunciar a la forma dibujada, al claroscuro y a la compostura y a la elección de utilizar el sfumato para dar el sentido plástico a las figuras, fundidas con la atmósfera de su entorno.

Bautizada como la “Scapigliatura milanesa”, también implicó a escultores, como Giuseppe Grandi (Ganna, Varese, 1843 - 1894), que llevó a las tres dimensiones la movilidad, los efectos de luz y las actitudes de las figuras de los dos grandes pintores(Il paggio di Lara, 1872). Además de la polémica antiacadémica y el gusto por los matices, la Scapigliatura perseguía el intento de unificar todas las expresiones artísticas con una"teoría de las tres artes" que superara las rígidas clasificaciones escolásticas de pintura, escultura y música. Sus portavoces eran los novelistas Giuseppe Rovani y Emilia Praga. Otros miembros eran los poetas Arrigo Boito, también músico y hoy recordado sobre todo como libretista de Giuseppe Verdi, e Igino Ugo Tarchetti, junto con Alberto Carlo Felice Pisani-Dossi, Antonio Ghislanzoni y Giovanni Camerana, entre otros.

En 1873 nació en el seno de la Scapigliatura la Famiglia Artistica Milanese (Familia Artística Milanesa), asociación que aún existe y que fue fundada por el pintor Vespasiano Bignami (Cremona, 1841 - Milán, 1929), cuya función era representar a los artistas milaneses ante las instituciones oficiales de la época, en particular la Academia de Brera. En 1881, con motivo de la Exposición Nacional Italiana o también Exposición Industrial Italiana, Bignami capitaneó una contraexposición goliárdica scapigliata llamadaIndisposizione di Belle Arti. El objetivo era crear una parodia de la más seria Exposición Nacional, una muestra de pinturas y esculturas en la que tuvieran lugar encuentros y lo que hoy llamamos “performances”, que realzaran el carácter rebelde y anárquico de los artistas scapigliati.

El estilo de los pintores de la Scapigliatura

La clave pictórica revolucionaria de los Scapigliati fue la búsqueda de la indeterminación de la forma y del contorno, del color y de los efectos luminosos.Los Scapigliati desafiaron al clasicismo del siglo XVIII y a la pintura romántica italiana, representada sobre todo por la obra del académico milanés Francesco Hayez (Venecia, 1791 - Milán, 1882), conocido por sus temas de la historia de Italia y temas del pasado de alto valor patriótico y colores vivos.En cambio, se decantaron por temas de la vida cotidiana y una pincelada más líquida y enrarecida, aunque retomaron algunos de los temas del romanticismo tardío, como la fugacidad y precariedad de los sentimientos humanos y la felicidad.

La unidad de ideas y técnica de Tranquillo Cremona(L’edera, 1878) y Daniele Ranzoni(Al balcone. Le curiose, c. 1874) demuestra su influencia mutua, aunque la pintura de Cremona era más evanescente y simbólica y la de Ranzoni más concreta. Ambos se dedicaron al retrato y a lainvestigación psicológica de los sujetos a través de la representación de expresiones y gestos.

Cremona se dedicó a retratar la juventud(Primo amore, 1872-1874) y alcanzó su máxima expresión con laacuarela, técnica que, comparada con el óleo, resultó más adecuada para sus trazos rápidos, pinceladas cortas de colores puros, formas en movimiento y juegos de luz(Paggio curioso, 1878). No respetaba el dato natural, sino que moldeaba el color sobre valores luminosos y simbólicos, realizando también miniaturas y dibujos. Ranzoni destacaba en los retratos al óleo, evocando más que describiendo a los personajes, gracias a los colores que creaban a su alrededor una luminosidad suave y difuminada. Los retratos de mujeres, niños y familias(Los hijos de los príncipes Troubetzkoi, 1873-1874; Los tres amigos, retrato de Mary Frances y Ralph Plantagenet, 1878) contribuyeron decisivamente a la evolución de la pintura lombarda.

La Scapigliatura lombarda. Evolución, estilos y temas de los pintores inconformistas

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