Gaetano Previati. Vida y obra del maestro del Divisionismo

Gaetano Previati (Ferrara, 1852 - Lavagna, 1920) fue un pintor italiano, conocido exponente del movimiento divisionista. Su formación tuvo lugar principalmente en Milán, donde estudió en la Academia de Brera, ambiente en el que absorbió todas las influencias de los maestros del Romanticismo y el Realismo. El de Previati era un estilo único, caracterizado por un uso innovador de la luz y el color. Tras un momento de juventud en el que se acercó a la experiencia de la Scapigliatura, adoptó un estilo que supuso una contribución fundamental a la formación y desarrollo del Divisionismo: separando los pigmentos en líneas, filamentos y puntos, consiguió crear vibrantes efectos luminosos. En particular, Previati es recordado por Maternità (Maternidad), una obra que suscitó importantes debates en Milán a finales del siglo XIX.

Además de pintar, Previati escribió textos teóricos que exploraban los principios y códigos del Divisionismo y el Simbolismo, contribuyendo significativamente al debate artístico de su época. Su obra influyó en muchos artistas contemporáneos y posteriores, dejando una huella duradera en el arte italiano y europeo. A partir de la experiencia de Gaetano Previati, así como de la de Giuseppe Pellizza da Volpedo, el movimiento futurista tomó forma y sustancia unos años más tarde, en 1909.

Vida de Gaetano Previati

Gaetano Previati nació en Ferrara el 31 de agosto de 1852, hijo del relojero Flaminio Previati y de Riccarda Benvenuti Bonlei, que murió de parto dos años más tarde. Su padre se casó en segundas nupcias con Cornelia Facchini. En 1870, el joven Previati abandonó sus estudios en el Instituto Técnico local para asistir a los cursos de pintura impartidos por Girolamo Domenichini y Giovanni Pagliarini. Ese mismo año participó en la Exposición Nacional de Bellas Artes de Parma. En los años siguientes, estuvo en Florencia, donde asistió ocasionalmente al taller de Amos Cassioli, y finalmente su gran interés por las artes le llevó a laAcademia de Bellas Artes de Brera, en Milán, donde asistió durante tres años a los cursos del maestro Giuseppe Bertini.

En 1879, Previati ganó el Premio de la Fundación Canonica con Gli ostaggi di Crema. Con esta primera obra, queda patente hasta qué punto el artista no se conformaba con los modos y maneras de sus maestros. Previati manifestó un espíritu de independencia que los críticos describieron como “un temperamento artístico audaz hasta la exageración”. A este periodo corresponden composiciones como Abelardo ed Eloisa, Torquato Tasso, obras de tema histórico y que responden a una cierta teatralidad, realizadas con gran objetividad. En la década de 1880 a 1890, Previati estuvo marcado por acontecimientos bastante desalentadores: graves dificultades económicas, una larga enfermedad; en 1883 envió dos cuadros a la Exposición Nacional de Roma, que resultó un fracaso. El artista atravesó un periodo de crisis espiritual que le llevó a acercarse brevemente a los círculos milaneses de la Scapigliatura. En esta experiencia de debilidad, Previati volvió a los temas del Romanticismo(Il bacio, 1889-1891) hasta la maduración de un lúcido sentido de la tragedia cristiana: destacan las versiones de Tre Marie ai piedi della croce (Tres Marías al pie de la cruz ) y los catorce lienzos del Via Crucis (Vía Crucis).

La obra Maternità (Maternidad), expuesta en Milán en la Trienal de 1891, fue el cuadro que desencadenó una tormenta crítica más que ningún otro, debido a la singularidad de la técnica divisionista adoptada. Gaetano Previati fue una figura fundamental en la definición de esta técnica, de la que fue un atento examinador y teórico. El artista se había acercado al Divisionismo con la intención de conciliar el contraste entre la naturaleza metafísica de la imagen y la naturaleza física de la materia pictórica: a partir de un estudio analítico del color, se dedicó a la elaboración de gamas doradas y plateadas, cuidando de yuxtaponerlas en pinceladas filiformes y sinuosas.

En los años comprendidos entre 1895 y 1914, Previati fue invitado a exponer en muestras internacionales de arte en Venecia; en particular, celebró dos exposiciones individuales en 1901 y 1912. En 1907, participó en la VII Bienal de Venecia, contribuyendo a la instalación de la Sala del Sogno y, a continuación, expuso algunas obras en el Salon des peintres divisionnistes italiens organizado en París por el marchante Alberto Grubicy; este último, junto con su hermano Vittore, expuso en el Salon des peintres divisionnistes italiens de París.Este último, junto con su hermano Vittore, fundó en 1911 la Sociedad para el Arte de Gaetano Previati, adquiriendo un importante núcleo de sus pinturas que fueron presentadas en exposiciones organizadas en Génova en 1915 y al año siguiente y en 1919 en Milán.

El artista falleció a la edad de 67 años en 1920 en Lavagna, localidad ligur no lejos de Chiavari, donde pasó largas temporadas en sus últimos años. Fue enterrado en el cementerio monumental de la Certosa di Ferrara. Los argumentos y teorías de Gaetano Previati sobre la técnica divisionista están recogidos en dos volúmenes, La tecnica della pittura (Turín, 1905) e I principi scientifici del divisionismo (Turín, 1906).

El estilo de Gaetano Previati

La obra temprana Gli ostaggi di Crema lanzó a Previati a la escena cultural de su época. El cuadro representa a unos prisioneros durante la conquista de una ciudad enemiga. Con esta primera obra, Previati obtuvo un reconocimiento que validaba su distanciamiento de las enseñanzas de sus maestros. Fruto del momento más crítico de la década de 1880-1890 es el Beso, fechable en 1889-1891 (colección particular), que corresponde a la reinterpretación del Romanticismo por parte del artista. Ya hay un indicio de las pinceladas yuxtapuestas, aunque todavía lejos del adelgazamiento de las pinceladas en largos filamentos de color.

A diferencia de muchos otros pintores lombardos de su época, Previati llegó al puntillismo por la necesidad de transmitir una idea a través del estudio físico de la materia, y no a partir de una visión del natural. El lirismo y las vibraciones inherentes al medio pictórico debían ser funcionales a los sentimientos que quería transmitir en sus obras. Para ello, utilizaba colores divididos, directos, dispuestos por hilos de color en un sentido sinuoso, según un ritmo que pretendía transmitir un aspecto fluctuante del concepto interior.

Con Maternità (Maternidad), Previati dejó una huella a la que la crítica respondió juzgando negativamente la obra y declinando su idoneidad para la exposición. La escena representa a una madre, recreación de la Madonna, amamantando a su hijo. Detrás de ellos hay un árbol lleno de luz, que recuerda al árbol de la vida. El cuadro se aproxima, aunque no explícitamente, a una dimensión religiosa. La edición de este cuadro fue acompañada de un texto crítico del pintor Vittore Grubicy de Dragon, que dio testimonio de la esencia del cuadro para hacer frente a las críticas más severas que recibió el cuadro: en efecto, debido a la manera en que fue pintado, el cuadro gustó a muy poca gente, atravesado por una miríada de grandes pinceladas que hacían vibrar todo el espacio.

“[...] Previati no atribuía ninguna importancia objetiva a las formas y a los colores, sino que sólo los utilizaba como signos y en la medida estrictamente necesaria para expresar la idea de conjunto; es por tanto que recurrió a esa simplificación sintética, arbitraria e incluso a la alteración de formas y colores que, en diversos términos, fueron estigmatizados por todos” (Vittore Grubicy de Dragon en Cronaca dell’Esposizione di Belle Arti, 1891). Lo que Previati hizo en este cuadro fue centrarse esencialmente en laidea de la maternidad: quería plasmar y representar la idea de una madre de la manera más fuerte y poderosa posible.

El simbolismo de Previati destacaba aquí en el panorama de la exposición de 1891; a pocos metros de este cuadro había otra imagen sobre el tema de la maternidad, Las dos madres, del artista divisionista Giovanni Segantini (1858 - 1899), más realista y pintada especialmente para la Trienal de Brera.

En La danza de las horas, título que también recuerda una ascendencia musical, Previati perfeccionó su técnica divisionista en un tema profano. Fechado en 1899, Previati define su idea de la luz en una representación de vibraciones luminosas. Pueden asociarse a esta idea las distintas versiones de Elcarro del sol (de hacia 1900) y también el lienzo con Paolo y Francesca, realizado para la VIII Bienal de Venecia, fechado en 1909. Este último es un cuadro que hay que situar en el contexto simbolista, ejecutado ya con una conciencia madurada y lograda de la expresión divisionista. Previati se sumergió después en la dimensión religiosa con las catorce pinturas rojizas del Vía Crucis, conservadas en la Colección de Arte Contemporáneo de los Museos Vaticanos. En estos lienzos, el artista realiza una nueva composición, una poderosa invención hecha de dibujos sintéticos y colores ardientes que engrosan su ímpetu trágico.

En Funerali di una vergine (Funerales de una virgen), Previati se encuentra totalmente implicado en la dimensión más sagrada del arte: fechado en 1912-13, tras dos versiones, en el tercer lienzo restituye la despedida silenciosa de una criatura blanca, la atmósfera ligera y dolorosa de una despedida en forma de tríptico, donde las figuras recuerdan los mosaicos con las teorías de las vírgenes de la basílica de Sant’Apollinare Nuovo de Rávena.

Dónde ver las obras de Gaetano Previati

En Ferrara, ciudad natal del pintor, en el Museo dell’Ottocento se pueden admirar el cuadro con Paolo y Francesca y el lienzo con laAsunción. En Lombardía, en el Museo di Crema e del Cremasco se encuentra el cuadro de 1879 Gli ostaggi di Crema. En Novara, en las Colecciones de la Banca Popolare di Novara se conserva la obra manifiesto del Divisionismo: Maternidad (1890-1891). En cambio, en Milán, en las Colecciones de Arte de la Fondazione Cariplo, se encuentra La danza delle ore (Danza de las horas), mientras que la Pinacoteca di Brera alberga Funerali di una vergine (Funerales de una virgen ) en su versión de 1895.

La versión considerada en este texto, que data de 1912-1913, se conserva en cambio en la Galleria Nazionale d’Arte Moderna e Contemporanea de Roma. También en la capital, como ya se ha mencionado, los lienzos del Vía Crucis se exponen en la Colección de Arte Contemporáneo de los Museos Vaticanos. En Florencia, en la Galleria d’Arte Moderna del Palazzo Pitti, hay un óleo sobre lienzo con el título Nel prato (La paz), fechable en 1889-1890. En el extranjero, en Brasil, se encuentra un Paisaje de Previati fechado en 1905, expuesto en el Museo de Arte de São Paulo.

Gaetano Previati. Vida y obra del maestro del Divisionismo

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