Una excavadora en los Quattro Canti de Palermo: el trabajo de Arcangelo Sassolino contra la Mafia


En el trigésimo aniversario de la masacre de Capaci, Arcangelo Sassolino, uno de los mayores artistas italianos, presentó Elisa: un brazo mecánico que corta el cemento de forma contundente. Una obra contra la mafia y contra los indiferentes.

Hoy se ha cumplido el trigésimo aniversario de la masacre de Capaci, mientras que el 19 de julio se cumplirá el trigésimo aniversario de la masacre de Via d’Amelio: para conmemorar los dos atentados mafiosos en los que perdieron la vida los jueces Giovanni Falcone y Paolo Borsellino, así como los miembros de sus escoltas, uno de los más grandes artistas italianos, Arcangelo Sassolino, ha presentado su nueva obra, Elisa, invitado por la Fundación Falcone. Esta poderosa obra monumental se ha instalado en la plaza Villena de los Quattro Canti de Palermo.

Elisa es una escultura simbólica en forma de excavadora, blanca y sin cabeza, que se desplaza sobre sí misma mediante movimientos lentos y aparentemente incontrolados. La excavadora se encontraba en una obra, completamente calcinada, bloqueada por problemas contractuales y la máquina madre: Arcangelo Sassolino ha dado así nueva vida al brazo mecánico dotándolo de un corazón artificial, mediante un sistema hidráulico.



La escultura parece una bestia primitiva que corta el hormigón, lo agrieta y destruye el propio pedestal sobre el que descansa. Los tres brazos, separados entre sí, crean diferentes formas en el espacio. La obra de Arcangelo Sassolino pretende evocar los numerosos saqueos arquitectónicos y urbanos que la Mafia ha llevado a cabo en toda Italia, especialmente en Palermo y Sicilia.

Así, en uno de los lugares históricos más bellos y al mismo tiempo más frágiles de la ciudad de Palermo, irrumpen con su estridente presencia la brutalidad del cemento, aunque sea provisional, y la obtusidad de la máquina de demolición, que se lo come todo, incluso su propio altar de presunción. Elisa quiere ser también una acusación contra los que gritan contra el arte contemporáneo en lugares históricos mientras premian a los indiferentes, así como una acusación a los moderados que a lo largo de los años han callado ante la okupación especulativa de Cosa Nostra y el Saco de Palermo.

El brazo mecánico blanco, leemos en una nota, “como un sepulcro, como un demonio de chatarra, es una provocación pasajera, como un repentino y desconcertante reflejo en el espejo de un escaparate inesperado que nos revela tal y como somos en realidad, hipócritas y frágiles”.

Arcángel Sassolino, Elisa
Arcangelo Sassolino, Elisa
Arcángel Sassolino, Elisa
Arcangelo Sassolino, Elisa

Una excavadora en los Quattro Canti de Palermo: el trabajo de Arcangelo Sassolino contra la Mafia
Una excavadora en los Quattro Canti de Palermo: el trabajo de Arcangelo Sassolino contra la Mafia


Advertencia: la traducción al español del artículo original en italiano se ha realizado mediante herramientas automáticas. Nos comprometemos a revisar todos los artículos, pero no garantizamos la ausencia total de imprecisiones en la traducción debidas al programa. Puede encontrar el original haciendo clic en el botón ITA. Si encuentra algún error, por favor contáctenos.