Supercult. Tiziano Scarpa en Bertozzi & Casoni

En muchas de las obras de Bertozzi & Casoni, uno se encuentra con objetos que son abiertamente “de cerámica”: platos, tazas, teteras donde la cerámica se declara explícitamente en medio de una maraña de otros objetos. La cerámica es un material proteico. Es la campeona mundial de la imitación. Como el dios Proteo descrito por Ovidio, puede adoptar formas orgánicas e inorgánicas, animales y vegetales: Proteo se convierte a voluntad en niño, león, jabalí, serpiente, toro, piedra, planta, agua, río, fuego. La cerámica de Bertozzi & Casoni se convierte en mesa de metal, pulpo, cafécenicero de plástico, paquete de cigarrillos, filtro de cigarrillos, ceniza, papel de aluminio, rollo de película, pastel de nata, vela quemada, mecha apagada, tucán, caja de fruta, loro, caja, bolsa de plástico, cáscara de plátano, saltamontes, dentadura postiza, cucaracha, bolsa de papel, bellota, ardilla viva, pollo desplumado, cuchillo, cervatillo, bloque de piedra, cigüeña, ramitas, dólares, baterías de coche, seta, tambor, gallo, fuego.coche, seta, tambor, gallo, mariposa, guiso de excrementos, maleta, gorila, lima, revista, guante de lavavajillas, lata, red de cuerda, hielo, nieve, oso blanco, jarrete humano. Pero aquí, en su capacidad de imitar cualquier cosa, la cerámica también choca con la imitación de sí misma: platos, platillos, tazas, teteras son una presencia recurrente en la obra de Bertozzi & Casoni.

La incesante versatilidad metamórfica de la cerámica provoca una ambivalencia, una incertidumbre en la percepción: ¿qué estamos mirando? ¿Un montón o un objeto único? ¿Un agregado o un bloque unitario que pretende ser polimérico y plural? La hiperrealidad de Bertozzi & Casoni es a la vez clásica y anticlásica: clásica en su respeto por el límite, el contorno, la representación perspicua, precisa, infinitesimal, obstinada; anticlásica porque, bajo esas líneas, más allá de esos límites, es siempre la misma materia la que se extiende, la que se desborda, la que continúa. Es siempre la misma cerámica fluyendo bajo la forma, pasando de un objeto a otro. Estas consideraciones mías, hay que decirlo, honran y al mismo tiempo agravian el arte de Bertozzi & Casoni. Honra a su maestría, agravio a su naturaleza visionaria, porque la remontan al material que utilizan y a la habilidad técnica. Quiero decir que, por ejemplo, en pintura, a ningún crítico de arte se le ocurriría tener en cuenta, o mejor dicho tener en su discurso interpretativo, el hecho de que, en un cuadro, es siempre la misma pasta oleosa pigmentada extendida por el pincel, primero fluida y luego seca sobre el lienzo o sobre la tabla, la que se convierte de vez en cuando en árbol, en cielo, en carne, en tela; es un hecho implícito y adquirido, forma parte de las reglas del juego de la pintura: el óleo o el acrílico no alimentan las especulaciones hermenéuticas. Y sin embargo, no se puede negar que el virtuosismo material, la acrobacia imitativa, el vértigo metamórfico de la cerámica es un elemento del arte de Bertozzi & Casoni que no se puede pretender ignorar. De hecho, la mirada de cualquiera que se encuentre frente a una de sus obras contiene siempre una cuota de incredulidad, de asombro casi barroco. "¿De verdad han conseguido hacer todo esto con cerámica? ¿Incluso con esta enclenque cáscara de huevo? ¿De verdad?"

La admiración por el virtuosismo técnico forma parte de la mirada con la que hay que recibir sus obras. Es sólo una parte, eso sí, pero una parte inevitable y esencial. [...] Te sorprende que todo lo que ves esté hecho de cerámica. En algunos casos llegas a no creerlo. Entonces empiezas a buscarla. A rastrearla, a reconocerla. El cuestionamiento de la materia, la verificación de la materia se convierte en una de las experiencias estéticas preponderantes en el encuentro con su obra. Así pues, a diferencia del vidrio, la cerámica corre el riesgo de situarse en primer plano , ¡precisamente porque hace todo lo posible por no situarse en primer plano! Hay que tener cuidado, al contemplar sus obras, de que la asombrosa actuación metamórfica y proteica de la materia no robe toda la escena a través de esta paradójica retirada de la escena. La ocultación de la materia es uno de los temas técnicos y filosóficos de sus obras.

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Tiziano Scarpa, La deliczza della devastazione, en Maurizio Caldirola, Daniele Sorrentino (eds.), Bertozzi & Casoni. Le bugie dell’arte, catálogo de exposición (Venecia, Galleria Internazionale d’Arte Moderna di Ca’ Pesaro, del 6 de junio al 2 de septiembre de 2007), Damiani, Bolonia, 2007, pp. 73-74

Supercult. Tiziano Scarpa en Bertozzi & Casoni

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