Las últimas obras políticas de Jenny Holzer se exponen en Nueva York

Del 8 de septiembre al 29 de octubre de 2022, la renombrada galería Hauser & Wirth de Nueva York dedica una gran exposición a Jenny Holzer (Gallipolis, Ohio, 1950), titulada Demented Words: la muestra presentará las obras más recientes de Holzer, incluidas pinturas, sus llamadas tabletas de maldición y una monumental pantalla cinética que contiene tuits del presidente de los Estados Unidos. Jenny Holzer ha utilizado el lenguaje como medio principal desde la década de 1970, sirviéndose de textos poéticos, políticos y personales para reflexionar sobre nuestras experiencias del poder, la violencia, la alegría, el idealismo, la estupidez, la desesperación, la diversión y la corrupción.

En su debut en Hauser & Wirth Nueva York, Holzer se enfrenta directamente al momento presente, recurriendo a materiales políticos y culturales nuevos y antiguos para iluminar la vida contemporánea. La pieza central de la exposición será la obra WTF (2022), un letrero electrónico que oscila con tweets publicados por Donald Trump durante su presidencia y posts de Q, líder del grupo conspirativo QAnon. WTF es el último de una serie de experimentos con la cinética, y fluye a lo largo de una pista con una cadencia impredecible que se hace eco del ritmo errático al que aparecieron los mensajes en línea.

Los textos parpadeantes iluminan las casi 300 tabletas de curse que se alinean en las paredes de la galería y están esparcidas por el suelo. Esta nueva obra se inspira en las tablillas de plomo grabadas que utilizaban los antiguos romanos para vengarse. Las tablillas de Holzer se crearon imprimiendo tweets en fragmentos de metal, envejeciéndolos después mediante baños químicos, arrugándolos, doblándolos, taladrándolos. Como iteraciones dañadas o fundidas de las anteriores evocaciones de Holzer de las placas públicas, las tablillas dañadas sugieren desperdicio, chatarra y devastación. Juntas, la electrónica y las tablillas casi arqueológicas componen una cápsula del tiempo del pasado y el presente, registrando la retórica hiperbólica y exasperante que caracteriza el panorama político y mediático actual, un lenguaje divisivo que iguala o supera el empleado en los Ensayos inflamatorios (1979-82) de Holzer.

La exposición también presenta una selección de nuevas pinturas a gran escala sobre lino, que marcan la última fase de la práctica pictórica de Holzer, que analiza y visualiza la agitación continua e interconectada de la política estadounidense desde la era de George W. Bush hasta nuestros días. Las superficies de estas obras están construidas sobre trazos de páginas ampliadas de documentos gubernamentales, incluido el informe del asesor especial Robert Mueller sobre la injerencia rusa en las elecciones presidenciales estadounidenses de 2016 y documentos del FBI relacionados con la Ley Patriota. Holzer cubrió meticulosamente las redacciones y el espacio en blanco con coloridos bloques de pintura al óleo antes de añadir capas de brillantes hojas de oro, platino y otros metales.

Jenny Holzer

Nacida en 1950 en Ohio (EE.UU.), Jenny Holzer estudió pintura y grabado en la Universidad de Ohio y obtuvo un máster en pintura en la Escuela de Diseño de Rhode Island en 1977. También cursó estudios de artes liberales en la Universidad de Duke y en la Universidad de Chicago. Una amplia formación que resuena en toda su práctica artística multidireccional. Aunque sus primeros esfuerzos se dedicaron a la pintura, pronto se decantó por el texto e incorporó dinámicamente las nuevas tecnologías para canalizar su obra hacia el espacio público: la obra de Holzer es tan accesible en vallas publicitarias, camisetas, bancos y aparatos electrónicos de Times Square en Nueva York como en museos y galerías.

Desde 1996, Holzer ha utilizado las proyecciones de luz (en las que potentes proyectores proyectan textos en desplazamiento sobre la arquitectura o el paisaje) como otro medio de presentar la escritura en la esfera pública. Los textos y la luz son dramáticos a la vez que enigmáticos, adaptándose a diferentes superficies, desde las montañas y los saltos de esquí de Lillehammer hasta la Pirámide del Louvre de París. Tras el 11-S, Holzer volvió a la pintura, aludiendo a hitos como el suprematismo y el expresionismo abstracto para reforzar la relación permanente entre arte y política.

Las últimas obras políticas de Jenny Holzer se exponen en Nueva York

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